Son las 2 de la madrugada cuando suenan los acordes de la mítica gasolina, llevo un rato apegada a Pierre en uno de los rincones del reservado, pero nada más sonar la música me separo de él rápidamente y echo una ojeada a la zona, donde mis ojos se encuentran con los de Laura y ambas salimos dirección a la otra.
Si hay algo que nos une a Laura y a mí eso es la música, y si es un buen reguetón con el que poder mover la cadera más aún.
Como de costumbre bailamos muy cerca y en uno de mis giros veo a Vanessa un poco sola solo tomando su bebida, aviso a Laura y vamos a por ella. La situamos entre las dos y comenzamos a bailar sincronizadas.
La canción termina y con ella nosotras con las pulsaciones a tope. Vanessa nos da un fuerte abrazo a las dos.
-Chicas, no sabéis cuánto necesitaba un ratito con vosotras - dice notablemente contenta por el alcohol.
-Deberíamos repetir esto más veces - dice Laura - y no me refiero a la fiesta o el baile, me refiero a momentos las tres, como amigas.
Las miro alzando mi mano cerrada solo con mi dedo meñique separado.
-Pincky promise- les digo alzando la voz.
Las tres enlazamos nuestros dedos y comenzamos a bailar otra vez.
Llevamos un buen rato cuando veo a Lando hacerme señas desde la cabina de dj a la que me acerco rápidamente.
-Si tú quieres, es tu momento - me dice Lando.
-¿Mi momento de que?- le digo alzando la voz sobre la música.
-Cantar, con Martin- dice el empujándome hasta el pequeño escenario donde se encuentra el Dj.
Subo y cuando Martin me ve se acerca y me abraza a la vez que me habla.
-No te vas a arrepentir. - dice el - ¿te sabes alguna de mis canciones?
-Si si si - digo nerviosa - There for you.
-Vale- me sujeta de la mano - ven conmigo.
Me ayuda a subir unas pocas escaleras hasta la cabina y me muestra al público alzando nuestra manos entrelazadas.
-Buenas noches Milán - grita a través de un micrófono - os traigo a una increíble artista directa desde España, dadle mucho amor a Angel!!!!!
El público estaba en gritos aún cuando nadie me conoce. Miro hacia nuestro reservado y veo a todos los chicos en la barandilla. Pierre y Laura gritan como fanáticos y Vanessa se encuentra saltando con Charles. Ellos son mi lugar seguro.
La canción comienza e intento hacerlo lo mejor posible. Nunca suelo cantar en inglés y mucho menos sin calentar la voz antes, pero no podía desaprovechar esta oportunidad de la vida. Adrián no se va a creer que he tenido el valor de hacer esto. No tengo que preocuparme de hacerlo, mañana las redes estarán llenas de vídeos y fotos de este momento.
Cuando la canción termina Martin me abraza y me levanta por los aires y me deja ir a seguir disfrutando de la noche.
-Pásalo bien hermosa - me dice el - espero que pronto tengas noticias de mi, porque te aseguro que esto se va a volver a repetir.
-Muchas gracias por la oportunidad - le digo yo - eres el mejor.
Me despido y vuelvo a reservado acompañada de Lando.
-Lando muchas gracias por esto- le digo - sé que no hubiera sido posible sino es por ti.
-No me des las gracias por esta tontería - me dice el - Laura me comentó lo fans que sois de él. Y sabiendo eso, tenía que presentaros si o si. De dejarlo embrujado ya te has encargado tu.
-No digas tonterías Lando - le digo entrando al reservado.
Me acerco a Pierre que está bebiendo de una botella de agua y lo abrazo por la espalda. Se pone rígido en el primer momento pero cuando subo mis manos por su pecho noto como su cuerpo se relaja.
-¿Te he asustado? - le digo bajando las manos por su abdomen.
-No sabía quién eras hasta que he notado tus manos - me pone sus manos encima de las mías - las diferenciaría hasta con los ojos cerrados.
Pierre se da la vuelta pero sin soltarme las manos, quedando estas nuevamente en su pecho.
-¿Te ha gustado? - le pregunto acercándome más a él.
-Me ha encantado - me susurra acercándose a mi oído - pero lo que más me ha encantado ha sido ver cómo cantabas mirándome a mí, espero que a Martín le haya quedado claro quién es el que está esta noche para ti.
Pierre me deja sin habla cuando sus manos bajan peligrosamente de mis caderas y me aprieta más hacia con por mi culo.
-Oh cariño - le digo esta vez yo bajando mi manos y metiéndolas por dentro de sus camisa - te tengo esta noche y todas las que quiera.
-Si sigues así, la noche de discoteca va a durar menos de lo que esperabas - me susurra al oído.
No se termina de separar de mí y alzo mi cara hasta casi rozar mis labios con los suyos.
-Si fuera por mí - le digo girándome y poniéndome de espaldas a él mientras muevo mi cadera al compás de la música. - hace bastante rato me tendrías en tu cama, dejado de ti- me sujeta fuerte de la cadera y pego completamente mi culo a su pelvis, notando algo crecer. - encima de ti - giro mi cara para mirarlo.- o de rodillas ante ti.
Pierre no pierde más el tiempo y me gira completamente para quedar cara a cara conmigo.
-No me quemes pequeña - me dice antes de besarme.
Nos besamos hasta recordar que estamos rodeados de nuestros amigos y nos separamos de golpe.
-Debemos parar a no ser que quieras irte ya - le digo dando un paso atrás.
Ambos miramos a los lados y nos damos cuenta que nadie nos está mirando. Levanta su mano y me la muestra esperando que me agarre a ella. Entrelazó su mano con la mía y salimos corriendo de la discoteca.
Doy gracias a Dios, incluso siendo atea, de que Pierre viva a escasos 15 minutos en coche.
Cuando llegamos a su casa apenas me bajo del coche cuando me alza entre sus brazos y rodeo su cuerpo con mis piernas.
Me besa como si fuera a ser el último día que pueda hacerlo.
Llegamos como podemos a su habitación y me tira en la cama.
-Prepárate porque vas a cumplir lo que has dicho en el club - me dice - me debes tres orgasmos.
-¿Podrás seguirme el ritmo?- le digo riendo y desafiándolo.
-Quítate la ropa. - me reclama.
-¿Qué? - le pregunto arrastrándome en la cama y quedando de rodillas en el suelo ante el.
-No estoy para juegos Angel - me dice el.
-No estoy jugando - digo a la vez que alzo mi mano y la paso por encima de sus pantalones.
Pierre suelta un suspiro.
-¿Estás segura? - me pregunta.
-Shh, cállate y siéntate en la cama - le digo a la vez que bajo sus pantalones.
Pierre se sienta y la cama y yo sujetó su miembro con una de mis manos, la otra la subo por su pecho lentamente mientras me mentalizo para lo que estoy apunto de hacer, nunca he hecho algo así, pero una fuerza que no sé de dónde sale me insiste en hacerlo.
Pierre abre ligeramente su boca cuando comienzo a mover mi mano de arriba a abajo por su miembro, pero todo se descontrola por su parte cuando me pongo más sobre mis rodillas y comienzo a pasar mi lengua desde la punta a la base.
-Me vas a matar si sigues así - dice el acariciando mi cara.
No le contesto y abro mi boca y la dejo caer por todo su miembro. Como esperaba no es suficiente para albergarla entera pero no por eso paro en mi trabajo. Sigo así hasta que el sujeta mi cara y me separa de golpe.
-¿Qué ocurre? - le pregunto alarmada.
-Se que es mi cumpleaños, pero los orgasmos son para ti, no te engañes. - me dice el poniéndome de pie.
Se pone de pie a mi lado y sujeta una de mis piernas alzándola y poniéndola encima de la cama, quedando de esta manera abierta para el, de pie y con las piernas como gelatina por la incertidumbre.
Comienza a bajar una de sus manos desde mi cuello, por mi abdomen hasta adentrarse entre mi zona íntima. Comienza a acariciarla y cuando creo que no puedo ver nada más sexi, separa su mano de mí y la lleva a su boca, mojando sus dedos y bajando nuevamente hasta mi centro, introduciendo dos de sus dedos de golpe dentro de mi, curvando y bombeando estos sin parar. Llevándome a un límite que no esperaba nunca llegar.
-Pierre, debes parar - le digo entre jadeos.
-No pequeña, este es el primero - dice acariciando mi clítoris con su dedo, haciendo así que segundos después llegará al clímax.
Se separa de mi y baja con delicadeza mi pierna de la cama.
-Te voy a hacer recordar esta noche para toda la vida - dice besando mis labios suavemente.
Agradezco que sea tan delicado después de esto porque estoy demasiado sensible.
Se gira y me tumba en la cama. No me deja ni rechistar cuando ya se encuentra con uno de mis pechos dentro de su boca mientras que el otro es presa de una de sus manos. Sigue bajando como a poco hasta que sus manos y con delicadeza abre mis piernas.
Dios mío, no irá a hacer lo que creo que va a hacer. JODER SI.
No puedo pensar cuando noto su lengua pasar por todo, desde delante atrás, sin dejarse ni un solo hueco de mi.
-Pierre... por favor...- digo apenas pudiendo hablar.
Se separa de mí y sube poco a poco besando todo mi cuerpo.
-¿Sigues llevando el implante? - pregunta a lo que yo solo asiento con mi cabeza. Después de eso entra de golpe en mi.
No siento mis piernas, no siento mi cuerpo, me siento flotar en el limbo.
No sé cuánto tiempo pasa cuando las embestidas comienzan a ser más descoordinadas, me agarro a su espalda con fuerza.
-Dámelo todo cariño - me dice él en mi oído - dame el segundo.
Pasan pocos segundos cuando me siento casi desfallecer entre los brazos de Pierre.
-Mírame preciosa - me dice el sujetando mi cara - te quiero, te admiro , no sé cómo describir esto que siento.
Vuelve a besarme fuertemente y me dejo abrazar por el.
-Te quiero - le contesto acurrucandome en su pecho.
-No no no, preciosa , no puedes dormirte - me dice separándose de mí. - aún me debes algo.
-No creo poder de verdad- le digo.
-¿Quién no puede seguirle el ritmo a quien? - me dice él entre risas.
Lo miro y solo con mi mirada sabe que ha ganado, sabe cómo convencerme de todo, pero sobre todo sabe lo competitiva que soy y esto, no va a ser una excepción.
-Túmbate - le ordeno.
El me mira con una ceja levantada y no se mueve.
-Te he dicho que te tumbes- le vuelvo a repetir esta vez más seria. El me vuelve a mirar extrañado.
-No me mire con cara de perro que no tengo pienso - le digo - lo que sí tengo ahora mismo es unas ganas increíbles de hacerte perder. Túmbate, última oportunidad.
Pierre no dice nada y se tumba, subiendo yo encima de el, sentándome en su cadera aún desnuda.
Cuando nuestras zonas íntimas se rozan, siento el miembro de Pierre comenzando a moverse involuntariamente.
Voy pasando mis manos lentamente por su pecho hasta llegar a su cuello, donde hago girar su cara hacia un lado, aprovechando para tumbarme sobre él y comenzar a pasar mi lengua desde su clavícula hasta el lóbulo de su oreja, haciendo así que un fuerte gemido salga de la garganta de Pierre.
-¿Te gusta? - le susurro en su oído para después lanzarme a sus labios, haciendo que el apriete fuerte mi culo con sus manos y mueva mi cuerpo sobre el, meciendo unidas nuestras zonas íntimas.
-Tienes todo lo que me gusta - me dice entrando de mí sin apenas aviso - esa boquita que he descubierto esta noche, pero sobre todo ese coñito que me aprieta con fuerza para exprimirme entero.
No vuelvo a contestar porque sus palabras me dejan sin habla. Nunca durante el sexo me habían hablado así, pero ya veo que con él nada es como yo conocía antes y eso me gusta, me encanta.
Pierre se incorpora en la cama conmigo encima aún, haciendo que yo de pequeños saltitos encima de él. Con esta nueva posición me doy cuenta que aunque yo pensaba que un tercer orgasmo iba a ser imposible, estaba muy equivocada.
-Déjate caer atrás - me dice él empujando mi pecho hacia atrás.
Me apoyo con mis manos inclinadas hacia atrás en la cama, poniendo distancia así entre nuestros cuerpos.
Pierre vuelve a bajar una de sus manos hacia mi clítoris mientras que con la otra sujeta mi cadera para sujetarme y que no me aleje demasiado de él.
-Dios Pierre ...- le digo extasiada de placer.
-Vente para mi cariño - me dice el - no puedo aguantar mucho más.
Pierre mueve mucho más rápido su mano mientras me vuelvo a lanzar a sus labios, callando en estos un fuerte gemido con el que llego al clímax, seguido siento como Pierre me llena y como fluidos salen de mi.
-Te quiero - le digo intentando recuperar la respiración.
-Te quiero - dice abrazado a mi.
No tardo mucho en levantarme de encima de Pierre y excusarme en salir al baño. Necesito con urgencia una ducha.
A la vuelta, Pierre está sentado en la cama, aún desnudo esperándome. Me acerco a él y le situo de pie entre sus piernas.
Me mira con los ojos casi brillosos.
-¿Eres consciente de que te quiero verdad? - me dice el. -¿y que nunca haría nada para hacerte daño,no?
-¿Qué pasa Pierre? No me asustes - le digo alarmada.
Pierre me enseña su móvil desbloqueado y me enseña una foto publicada en su perfil de Instagram. Somos nosotros.
Es una foto que nos hicimos por la mañana cuando salimos a comer al centro de Milán y la ha publicado, no me ha etiquetado pero soy yo.@PIERREGASLY: Milán tan hermosa como siempre y yo solo te miro a ti.
-Vale, tranquilo - le digo intentando mantener la calma - esto tenía que pasar ¿no?
-¿No te enfadas?- me dice él mirándome sorprendido - debería de haberte preguntado, se lo difícil que es esto para ti.
-Bueno, nadie sabe quién es esa chica - le digo. - no te preocupes aún soy un secreto. Ahora ve a la ducha, prometo esperarte despierta.
Pierre se levanta de la cama y desaparece por la puerta del baño.
Me quedo pensativa en la cama, con un debate interno del que no sé qué hacer.
¿Dejo que el mundo sepa quién soy para Pierre? O, ¿sigo ocultando todo?
No sé en qué momento sucede pero estoy llamando a mamá.
-Buenas noches Ángel ¿qué pasa?- pregunta mamá alarmada.
-No pasa nada, solo quería hablar con mi madre - le digo.
-¿PERO TÚ HAS VISTO LA HORA QUE ES?- me grita ella a través del teléfono.
-Lo siento mamá, no sé qué hacer - le digo al borde de las lágrimas, mientras le comento la situación de la foto.
-Cariño, tú eres fuerte, has madurado mucho y piénsalo, en apenas dos meses, llevarás conociendo 1 año a Pierre- me dice ella - si que es verdad que habéis estado separado cuando estuviste mal por Adrián, pero él nunca te dejó, solo te dio tu espacio, desde lejos te estuvo cuidando y velando por ti, todas las semanas me preguntaba por ti y sé que a Adrián también, no sé qué más necesitas para saber que puedes confiar en el.
-Confío en el mamá, de verdad que lo hago. - le digo.
-Pues demuéstraselo - me dice ella.
Me despido de mamá y cuelgo la llamada.
Me tiemblan la manos y no sé muy bien qué escribir.@ANGELTRRS: Gracias por elegirme y dejarme elegirte, por seguir eligiéndonos siempre.
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CUESTIÓN DE VELOCIDAD. Pierre Gasly
FanficNos encontrábamos en ese punto de nuestras vidas en los que solo nos sentíamos cegados por los flashes. El, ya experto en lidiar con esos problemas. Yo, recién acababa de empezar. -La próxima vez que nos veamos querrás arder en mi infierno.