FRIDA [Parte II] (Ivar The Boneless)

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Ivar está a nada de lanzarse contra él, desea asesinarlo ahí mismo. 

—¿Ivar? —el chico escucha a Frida preguntando por él, y es eso lo que le hace guardarse su rabia contra su hermano—. Por favor, no me dejes sola. 

Ivar se ve obligado a retroceder para entrar a esa habitación y cerrar la puerta, furioso. Entonces la encuentra en el mismo lugar donde se quedó Frida.  

—¿Qué pasa? —pregunta ella. Ivar está derramado lágrimas ahora, mientras niega, e intenta que su voz no se rompa.

—Sólo hablaba con Hvitserk. ¿Estás cómoda? ¿Quieres que vaya por algo? —Frida niega.

—¿Puedes recostarte conmigo? No quiero que te vayas, por favor no me dejes sola —Ivar niega, enseguida se mueve al otro lado de la cama, en dónde comienza a ponerse cómodo, para acomodarse debajo de las mantas. Con cuidado, Frida aparta al gato de sus piernas, dejándolo en la misma cama, pero consiguiendo libertad para acercarse a Ivar y abrazarlo.  

—Lamento no haber parado lo que Hvitserk te hizo —menciona Ivar. Frida busca la mano del chico, y una vez la encuentra pide que él le acaricie el rostro, él lo hace enseguida, sintiendo esas facciones y esa piel lisa de ese rostro.

—Está bien. Creo que es algo a lo que ya debería estar acostumbrada. Ya no interesa Ivar. Sólo sé que deseo irme de aquí. Cualquier lugar es mejor que esto.