ALL THE PRINCE'S MEN

Capítulo 42

~¡Tú! Has masacrado a mi amigo, ¡ahora lo pagarás!~.

El dragón rugió y Severus trató de arrojar a Harry detrás de él, pero Harry lo detuvo, dando un paso adelante para enfrentarse a la bestia.

~Sí, yo maté a tu amigo, sólo yo~ Harry siseó ~aunque de eso hace ya algunos años. Su mente había sido envenenada y le habían ordenado que me matara. Era mi vida o la suya. Me arrepiento de haber tenido que matarla, aunque me temo que si no lo hubiera hecho habrían perecido muchos más~.

Harry se mantuvo firme, desafiante mirando fijamente al dragón aunque Severus podía notar como temblaba.

~¿Hace algunos años?~ preguntó el dragón ~pero ahora no eres más que un niño. ¿Cuántos años tenías, pequeño, cuando te viste obligado a acabar con mi amigo?~.

~Doce~ respondió Harry, sintiendo que se relajaba un poco ahora que no se sentía en peligro inminente.

~Tan joven~ siseó el dragón ~debes ser todo un guerrero~.

~En realidad no~ Harry se sonrojó ~fue más que nada suerte y un poco de ayuda de Fawkes el fénix~.

~¿Un fénix te ayudó?~ preguntó el dragón ~entonces tus intenciones deben haber sido puras~.

~Sí. Un mago oscuro le había ordenado atacar a los estudiantes de la escuela y, cuando bajé aquí para impedir que drenara la vida de mi amigo, le ordenó que me matara. Intenté razonar con ella pero no pude~.

El dragón dejó escapar un suspiro. ~No me sorprende demasiado, pequeño. Ashista era muy vieja, incluso para una de su especie, y su mente ya no era lo que era. Si el mago tenebroso del que hablaste se parecía en algo al joven Tom, no me sorprende que no pudieras llegar a ella~.

~Fue Tom Riddle~ Harry admitió ~o al menos el espíritu de él~.

~Entonces Ashista lo habría defendido hasta su último aliento. Se había tragado sus mentiras cuando iba al colegio y lo había adoptado, negándose a ver la oscuridad de su alma. Por mucho que llore la pérdida de mi amiga te perdono por haberla matado, pequeño, de hecho probablemente le hiciste una misericordia al final. Puedes decirle a tu amigo que estás a salvo de mí, parece estar bastante preocupado por ti~.

Harry rió entre dientes. -Puedes estar tranquilo Severus, él no nos hará daño-.

-¿Estás seguro?- Cuestionó Severus.

-Bastante-. Harry se volvió hacia el dragón. ~Sé que esto puede sonar grosero pero ¿te importaría si cosechamos algunas partes de Ashista? Este hombre es en realidad mi marido y es un gran maestro de pociones al que le encantaría poder utilizar partes de Basilisco en sus brebajes, ya que son muy escasas en esta época~.

~Por supuesto pequeño~ el dragón se inclinó ~El maestro de Ashista era un gran pocionero y siempre fue su deseo continuar con el oficio cuando ella muriera. Debo decir que pareces muy joven para estar ya apareado, pequeño, ¿es una práctica habitual en tu mundo?~.

~No, hubo, digamos, circunstancias especiales que condujeron a nuestra boda, pero admito que estoy muy contento con el resultado. Mi nombre es Harry, por cierto, y este es Severus~.

~Es un honor conocerte, joven Harry. Mi nombre es Aithusa y soy el último de los grandes dragones~.

~¿Grandes dragones?~ preguntó Harry.

~Sí, aquellos de nuestra especie que son llamados por los señores dragón y no son incubados por madres, es por eso que siempre sentí algo de parentesco con Ashista ya que ella también tuvo que ser especialmente incubada por un orador~.