𝑪𝒂𝒖𝒔𝒊𝒏𝒈 𝒂 𝑪𝒐𝒎𝒎𝒐𝒕𝒊𝒐𝒏

Especial: Causando Conmoción el último día del año en casa ajena. Parte 1.

Desde el incidente con el resto de los hermanos Bibleas en su propia casa, Adán decidió que necesitaba un respiro y por ello dio el permiso de que sus hijos salieran ese último día del año a casa del alma perdida que respondía al nombre de Hades Olympus puesto que Kōjiro no podía ir a ningún lado por exigencia del alfa celópata que tenía.

Por ende, la residencia principal donde ocurrieron todos los desastres que conmocionaron la vida de los Bibleas sería la sede de la fiesta para recibir el año nuevo, estresando al primogénito ya que sus hermanos no estaban cooperando en absolutamente nada.

La única alma caritativa de ese lugar ayudaba en lo que podía, ofreciéndole a Hades hacerse cargo de la comida para quitarle peso de sus hombros.

-¿Nos explicas cómo es posible que seas pareja de Poseidón? Niña, debes huir de aquí y conseguir algo mejor, te presento a quién quieras pero déjalo -Zeus no podía creer que la omega había hecho un desayuno en compañía de su hermana Qin para todos ellos, aunque comenzaron a reír en cuanto vieron un plato donde sólo había pulpos pequeños bañados en salsa agridulce en el lugar donde solía sentarse Poseidón.

Adamas le dio un codazo a su imprudente hermano ya que había encontrado un extraño modo de entretenimiento que implicaba a su otro hermano menor y a la omega que vivía con ellos.

Sin decirlo en voz alta, las horas relacionadas a los alimentos se habían vuelto su novela favorita.

-No comeré esa basura. Dame otra cosa -El rubio empujó el plato con cierta delicadeza, ya que era consciente del trabajo que estaba realizando la azabache, pero su día comenzó mal desde el instante en el que abrió los ojos y no vio su larga cabellera negra sobre la almohada.

Kōjiro suspiró antes de darle un pequeño plato con oniguiris pero sin decirle de qué estaban rellenos, ocupando un sitio a lado de él y de todos modos servir lo que designó para su alfa.

-Posei, debes comer todo y de todo, si no lo haces duermes esta noche en la sala -Hades disimuló su risa lo mejor que pudo pero tanto Adamas como Zeus y Qin estallaron a carcajadas al ver que el rubio frunció el ceño y tomaba de mala gana el plato con pulpos.

Poseidón jamás diría a viva voz que prefería esa tortura a no dormir con ella. Había desarrollado una dependencia significativa en cuanto a la figura de la azabache entre sus brazos todas las noches, así que armándose de valor dio el primer bocado casi lamentándose por el pobre octópodo pero le importaba más la recompensa que tendría después.

-Eres un buen chico -El alfa ronroneó tras recibir un beso en el mentón por parte de su pareja, dejando que la omega le alimentara para seguir recibiendo besos haciendo su tortura soportable por esa sonrisa brillante.

-Olvida lo que dije, nunca lo dejes por favor. Adamas, dime que grabaste este momento del último desayuno del año-Zeus no podía dejar de reír al ver que su hermano mayor estaba siendo reprendido y mimado al mismo tiempo por una omega que no le llegaba a la altura del hombro.

"Ah, la mañana no podría ir mejor con Poseidón siendo humillado por su pareja. El año entrante será glorioso"

-Desde que vive aquí todos los momentos donde se trata de comer algo son entretenidos -Adamas tenía un punto y es que la azabache era demasiado alegre cuando se trataba de degustar alimentos, ayudando a las cocineras y resto del personal para hacerlos, pero sus momentos favoritos eran donde había mariscos.

La omega siempre hacía que su hermano comiera todo sin quejas.

-Bueno, al fin alguien domesticó al perro rabioso que tienen por hermano -Qin degustó tranquila su desayuno aunque sintió que alguien le pateó una pierna, mirando fijamente al alfa de su hermana que esperaba tranquilamente el ser alimentado.