"Conmigo..."

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Hades pidió disculpas a Artemisa, misma que no dejaba de comerse con la mirada al alfa que estaba siendo regañado por esa niña con complejo de emperatriz.

"Si Apolo lo rechazó, quizás yo debería hacer algo..."


Como quitárselo a Polly, por dar un ejemplo.

-Artemisa, cuando Apolo se sienta mejor que me llame, debe tener un día tranquilo y quiero llevarla de viaje con nosotros el fin de semana... -Hades se sentía mal por Apolo, adoraba a sus primas, pero la joven de cabellos rosa era más la hermana que hubiera deseado tener.

Amaba a sus hermanos, pero siempre quiso tener una pequeña hermana a la cual proteger.

"Ahora que lo pienso, tendré una porque dudo que Poseidón deje ir a la hermana de Qin después de su celo..."

-Si, claro, yo le digo... -La pelirroja apenas y le prestaba atención. Su vista seguía en la ceñida camiseta negra del alfa que resaltaba su musculatura, comenzando a fantasear con levantarla y lamer lo que hubiera debajo.

A veces se preguntaba por qué deseaba lo mismo que su gemela, cuestionándose si era pésima hermana, pero en cuanto lo vio flexionar los brazos para alzar a Qin, supo que no le importaban sus lazos sanguíneos.

Deseaba llevarse a ese alfa a la cama a como diera lugar.

-¡YA BÁJAME LEÓNIDAS! ERES UN TROGLODITA

Qin no podía procesar el por qué su hermano se estaba arriesgando a una paliza con el bokken de bambú que su padre reservaba para los castigos más fuertes, ni tampoco el actuar como si fuera un animal en celo en lugar de hablar claramente con Apolo.

Pero, brindarle su apoyo y decirle la simple frase "Voy a ayudarte a conquistarla" fue motivo suficiente para que ese rostro abatido con la frente partida se iluminara y le alzara en brazos mientras decía "Gracias, gracias, eres la mejor".

"Claro que soy la mejor. No por nada soy una emperatriz amada por sus súbditos..."

Las cosas no iban a ser fácil para Leónidas, pero el alfa estaba dispuesto a hacer lo que fuese suficiente para emendar su error y ganar el corazón de Apolo.

"No importa el costo, estoy dispuesto a todo por ella..."

-Significa mucho para mí que quieras ayudarme Qin...

-Hey, no te confundas. Lo hago porque esa chica siente algo y quiero verla correspondida. Es hermosa y me gustan las cosas bonitas cerca de mi -Qin soltó una risita para quitarse su fina pajolera de seda y limpiar la magullado frente de su hermano mayor.

Hades siguió la vista de Artemisa, encontrándose con una sonriente y calmada Qin limpiando la sangre de un hombre que parecía más un oso que persona, dándose cuenta de lo poderosa y amorosa que era su reina.

"Muero por verla cuidando de un cachorro..."

Si Qin se descuidaba un día, Hades no dudaría en preñarla. Era la omega ideal para tener la descendencia numerosa que siempre había deseado.

-Creo que debemos irnos Artie, dile a Apolo lo que te he planteado, por favor -Hades ya no veía a Artemisa, su vista estaba clavada en la esbelta figura de Qin, la cual se desplazaba tranquilamente por la entrada hasta llegar al auto.

Se sintió hipnotizado por el balanceo de esas caderas aunque eso duró nada porque vio que el alfa también les acompañaría a ver a sus respectivos hermanos.

𝑪𝒂𝒖𝒔𝒊𝒏𝒈 𝒂 𝑪𝒐𝒎𝒎𝒐𝒕𝒊𝒐𝒏Donde viven las historias. Descúbrelo ahora