Cap 33

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Un nuevo día inicio, otra día mas de tortura; el grupo de primos fue dejado en la entrada del colegio, Keisuke, Kazutora, Mikey y Ran iban quejándose sobre levantarse temprano.

—Es que neta no entiendo, ¿por qué llevamos lengua?, no es como si no supiéramos escribir - Ante el comentario de Mikey todos giraron a ver a Keisuke.

—Bola de culeros, yo si se escribir

—Aja si - Chifuyu respondió con una sonrisa, Keisuke le miro ofendido.

—Ya veremos si sigues pensando lo mismo cuando te hag-

—Callate, solo callate, no quiero escuchar - Ken alzó su mano, poniéndola frente al rostro del azabache.

—¿Qué pensabas Draken? - Rindou pregunto divertido, a su lado, Haruchiyo sonrió con gracia.

—¡No haremos nada de eso idiotas! - Chifuyu hablo fuerte, bastante sonrojado. —¡Ya me voy, vamos Take, Emma, Hakkai!

El rubio salió casi corriendo hacia los edificios de primeros, los tres nombrados le siguieron entre risas, despidiéndose y acordando juntarse en el almuerzo.
Cuando los menores desaparecieron el grupo se miro entre sí, esperando que alguien hiciera algo.

—Bueno idiotas, ya me voy, si llego tarde a química me mandaran un reporte y papá no estará contento con eso - Kazutora se despidió, jalando de la sudadera a Rindou.

Keisuke se encojio de hombros, caminando al otro lado para ir a su aula, Ken y Mikey le siguieron.

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Haruchiyo llego a su clase, saludando con la mano a algunos de sus compañeros, dejo su mochila y acomodo su saco tras su silla, frunció el ceño el ver una carta bajo el compartimento de útiles de la mesa, la tomo con curiosidad y la abrió.

"A la tercera hora en la azotea, te espero Haruchiyo"

Miro curioso la letra, era tan impecable que dudo que fuera de un hombre, miro a todos lados esperando ver al propietario, pero todos parecían en su mundo; por un momento pensó que Muto podría haber dejado la carta, pero descartó la idea al recordar que el rubio le llamaba por Haru o Sanzu.

—¡Haru-san, hola!

—Miyo, Kae, Serin, buenos días - Las chicas le sonrieron, acomodándose a su lado.

—¿Podemos? - Preguntó Kae, mostrando un cepillo para pelo, Haruchiyo sonrió un poco y asintió.

Cada una sacó sus cosas para comenzar a a arreglar al pelirrosa. Esta vez las chicas se decidieron por hacer unas trenzas más pequeñas y ponerle prendedores de colores y figuritas.

—¿No vino Kotoko?

—Me dijo que tenía algo importante que hacer

El trío de chicas escucho la conversación ajena, casi gritando de felicidad al escuchar que la insoportable de la pelirrosa había faltado.

—Te pondremos lindo para tú salida con Muto-san

—Yasuhiro es muy afortunado eh - Hablo el joven del día anterior, recargandose ahora en una de las chicas. —Yo también quiero un novio así de lindo como Haruchiyo

—Nadie te va a querer así, Kota-san - Serin hablo, concentrada en retocar de Rosita claro las uñas del pelirrosa.

—Buenos días jóvenes, tomen asiento para comenzar la clase - El profesor llego al aula, todos hicieron caso volviendo a sus lugares. —Hoy vamos a repasar las conversiones, ¿recuerdan como se hacen?

Nadie respondió, mirandose unos a otros, el profesor suspiro, tomando el gis y caminando al pizarron.

—No chavos, ¿así como vamos a avanzar?, bueno, repasemos desde el inicio

𝐓𝐎𝐊𝐘𝐎  𝐅𝐀𝐌𝐈𝐋𝐘  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora