Cap 51

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Sus ojos se llenaron de lágrimas, apretó sus puños con fuerza sin importarle el lastimarse.
Se sentía terrible, había evitado a su hermano, le había dicho cosas horribles y le miraba mal cuando su hermanito estaba pasandola mal. Llevó sus manos a su cabeza y tapo su rostro, no merecía ni siquiera las disculpas de Take, había sido un hermano mayor terrible.

Chifuyu lloraba mientras abrazaba a su papá, lamentándose el no haber ayudado a su hermano.

—Niños, esto no es culpa de ninguno ¿de acuerdo, Ken? - Inupi miro a su hijo mayor, limpiándo sus propias lágrimas.  —Su hermano es muy fuerte y la única razón por la que no hablo fue por miedo

—Soy un her-mano terrible papá... perdóname por no ha-haber cuidado bien de mi hermanito... ¡Lo siento mucho!

Hajime lo tomó entre sus brazos, sobando la espalda de su hijo, calmando sus lamentos y limpiando sus lágrimas.

—No lo eres Kennie, eres grandioso

—N-no yo-

—No lo sabías - Inupi negó mientras abrazaba con fuerza a Chifuyu. —Por el momento no le digan a nadie, ¿de acuerdo?

—Nosotros hablaremos con sus tíos, vengan aquí - Hajime jaló a su hijos y esposo para un abrazo familiar. —Ahora solo podemos apo-yar a su hermano, todo estará bien...

Habló en un susurro, dejando que sus lágrimas cayeran. La familia se hundió en un abrazo durante unos minutos, y después de un rato se separaron.
Inupi limpió sus mejillas y sonrió un poco.

—Arreglense un poco, debemos ir al hospital

Miro con un poco de asco el plato frente a él; la comida de hospital era fea, sin color, sin sabor y líquida

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Miro con un poco de asco el plato frente a él; la comida de hospital era fea, sin color, sin sabor y líquida.

Cuando la enfermera salió de la habitación aprovecho para ponerse de pie, tomó con sus delgadas manos la charola de la comida y camino al baño; miro la puerta unos segundos pensando en lo que estaba por hacer.
La puerta se abrió, sorprendiendolo y por ende casí tirando la comida.

—¡Ah!

—¿Hmm? - Los ojos cansados y cabello suelto le hicieron sonreír. —Oh, estás despierto Take

—¡Ran-kun!

Dejo la charola en la cama y caminó rápido hacía el mayor, escondió su rostro en el pecho del teñido y soltó una pequeña risa cuando este le abrazo con un brazo y con el otro revolvía su cabello.

—¿Qué haces aquí?

—Vine a verte peque

Takemichi volvió a sonreir, su mirada cambió a una llena de preocupación al ver todos los golpes que el mayor tenía, llevando su mano con lentitud a la mejilla del mayor, la cual tenía un gran golpe.

—¿Te peleaste?

—No te preocupes por eso

—Debe dolerte, le dire a la enfermera si puede curarte - Takemichi se puso de pie.

𝐓𝐎𝐊𝐘𝐎  𝐅𝐀𝐌𝐈𝐋𝐘  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora