One Shots | Harry Potter - Male Characters | Male Reader

40. ______ Malfoy

Miedo

Merlín. Tengo tanto miedo, siento que el aire me falta y como mi garganta se cierra en un nudo que duele demasiado. A pesar de que la cálida luz que entra por la ventana, inunda toda la habitación, mi cuerpo se siente como si estuviera sumergido en las más frías aguas.

Mis manos tiemblan, aun después del esfuerzo sobre humano que hago para que no suceda. A mis oídos solo llegan los latidos de mi acelerado corazón, llegando a ser ensordecedor. Mi estómago siente un vacío que me recuerda a cuando sabes que algo malo va a pasar y es que se que así será. Mi ropa hecha a la medida ahora es como si fuera una camisa de fuerza y solo hace que la desesperación llegue a mi de una manera que no puedo soportar.

Jamas tuve tanto miedo de ir a algún lugar. Jamás tuve tanto miedo de estar en mi casa. Jamás tuve tanto miedo de mi familia. Jamás tuve tanto miedo como ahora.

Tengo unas inmensas ganas de gritar y tirar todo, pero ni siquiera soy capaz de moverme de mi posición frente al espejo y mucho menos de emitir algún sonido sin largarme a llorar. Estoy intentando tener esa postura firme y estoica, pero mis cejas fruncida y mi expresión de pánico lo hacen más difícil.

Todo lo que pasa por mi mente se ve interrumpido cuando escucho un suave golpe en la puerta de mi habitación, pero una vez más no puedo hablar ni siquiera para permitir la entrada, aunque en el fondo desearía que fuera así y poder estar solo, en la poca seguridad que mi habitación me brinda.

- Amo ______ ¿Puede Maca entrar? - La voz de uno de mis elfos domésticos se escucha desde el otro lado de la madera oscura. - Amo ______... Los amos Malfoy esperan por usted. - Llamo de nuevo al no recibir respuesta, pero al obtener el mismo resultado, decidió abrir muy lentamente la puerta, intentando no molestarme y tampoco desobedecer a mis padres.

Yo solo pude ver a través de mi espejo como mi pequeño elfo entraba temeroso, mirando hacia mi como si intentará analizar que sucedía.

- ¿Amito? - Se acerco lentamente mientras me llamaba. Finalmente se posicionó a mi lado y jalo suavemente de mi pantalón para intentar llamar mí atención. - Amito... ¿Se encuentra bien? - En su voz se notaba la preocupación. Maca siempre ha cuidado de mi y sé que en estos momentos él también está asustado por lo que pueda pasar y porque no puede hacer nada para ayudarme, aun así le estoy agradecido.

Por primera vez en varios minutos logro moverme y con mi mano acarició la cabeza de mi elfo doméstico mientras camino afuera de mi habitación, dando inicio a mi camino hacia el comedor. Cada paso lo siento más pesado que el anterior y la presión en mi estómago solo se intensifica.

Por mi mente solo pasa la pregunta ¿Cuándo mi hogar se volvió un infierno? Al ver como todo es oscuro, frío, tenebroso y solitario. Antes era tan cálido, con la luz del sol entrando por todos lados, las cortinas arriba dejando que los claros días entrarán por las ventanas, sentía que no había lugar más seguro que mi hogar. Pensaba que mi padre sería siempre mi héroe, mi madre estaría siempre abrazándome y calmando mis miedos, que mi hermano siempre sería mi fiel compañero, mejor amigo, mi otra mitad. Este lugar era el hogar que toda persona habría deseado, pero ahora eso no es más que un recuerdo muy lejano que incluso sonaría a una locura.

Ahora al entrar al comedor me doy cuenta de que ya no es así. Mi cálido hogar ahora es un cuartel horrible de asesinos, mi padre no es más que un maldito cobarde que condenó a su familia, mi madre intenta hacernos sentir mejor, pero ya no le creo nada después de permitir que esto pasara, tal vez es la única manera, pero no lo puedo ver así cuando mi hermano ahora está temblando de miedo sentado junto a tanta gente desquiciada.

Finalmente paso a un lado de mi madre, siento mi corazón encogerse cuando ella intenta tomar mi mano y yo solo la apartó sin siquiera mirarla, pero en este momento no puedo abandonar la furia que he sentido durante todo este tiempo, no cuando es lo único que me está dando el valor para estar aquí sin derrumbarme. Tomo asiento en el lugar entre mi padre y mi hermano, puedo ver como mi hermano se relaja un poco y deja su mano aun lado de su pierna, sin esperar un segundo más, tomo su mano con una mía y le doy un ligero apretón intentando hacerle saber que estoy ahí con él, que seguiré cuidando de él, por otro lado, mi padre ni siquiera tiene el valor de mirarme a la cara, solo me doy cuenta como de reojo mira hacia mi.

Sé que saldré de esta habitación siendo parte de las peores escorias de este mundo, pero debo hacerlo, debo hacer lo que mis padres no hicieron por sus hijos. Solo haré lo necesario para salvar a mi familia, sin importar que sea.

Porque es momento de que la antigua familia Malfoy, tenga un heredero de verdad. Alguien que saque el apellido del lodo en el que lo dejaron.