En la multitud bulliciosa, mi ser se desliza en un eco de silencio, perdido entre rostros que parecen esfumarse en la vorágine. Risas y charlas danzan sin cesar, creando una sinfonía que resuena en mis oídos, pero mi alma anhela un encuentro que se desvanece en la algarabía.
Cuerpos cercanos se entrelazan en una danza efímera, sin embargo, mi corazón yace en la penumbra de la soledad, pereciendo en un silencio que flota como niebla densa. En la muchedumbre, un vacío sutil se abre, separando mi esencia de la vibrante energía circundante; mi alma clama por un lazo, un perfil que le dé sentido a su existencia en este torbellino de conexiones fugaces.
La maraña de voces y risas se enreda, pero mi soledad persiste, resistiéndose a disiparse ante las brisas efímeras del bullicio. Entre la muchedumbre, me siento perdido, un eco solitario que se desvanece en el ruido ensordecedor. Busco refugio en la sinfonía compartida, anhelando encontrar un eco afín que rompa la barrera de mi aislamiento.
Y así, en la encrucijada de la multitud, mi ser se debate entre la conexión y la soledad. Hasta que, en ese instante, una mirada, un gesto, como una nota perdida en el tumulto, revela un lazo inesperado. En ese encuentro fortuito, el eco solitario encuentra su contraparte, y el silencio se transforma en una melodía compartida. En la sinfonía de la existencia, descubro que la soledad puede ser eclipsada por la magia de conexiones genuinas, resonando con la verdad profunda de nuestro ser.
En la multitud, un eco de silencio,entre rostros, mi alma sin encuentro.Entre risas y charlas sin cesar,mi soledad parece flotar. Aunque cuerpos cercanos se entrelacen, mi corazón en soledad perezca. Entre la muchedumbre, un vacío sutil, mi alma anhela un lazo, un perfil.
En la maraña de voces y risas,
mi soledad persiste, sin brisas.
Entre la muchedumbre, me siento perdido, un eco solitario en el ruido.
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Pensamientos de un adolescente
Poetry"En nosotros mismos está la respuesta a nuestros problemas".
