Después de un rato cuando él logro calmarla se separaron pero solo por un momento. El tomo su cara entre sus manos y limpio con ternura sus lágrimas.
La beso tiernamente y luego se alejo un poco de ella.
Anahi por su parte no sabia que pensar por primera vez se dio cuenta de que a pesar de todo Alfonso le había afectado lo sucedido. Él también había sufrido.
-Es mejor que yo me vaya a mi habitación - dijo pues quería descansar un poco y tratar de poner sus pensamientos en orden.
-Quedate esta noche junto a mi. Quiero sentirte entre mis brazos.
-No, lo mejor es que me marche.
-Por favor, quedate prometo que sólo dormiremos.
-Eso ya lo sé.
-Así, ¿entonces porque te sonrojas?. Me halaga cariño al pensar que en mi estado soy capaz de hacer el amor.
-Ya basta Alfonso, yo no e dicho eso.
-Disculpa ,pero eso me a parecido. Annie te pido que por favor tome la bolsa, todo lo compre con mucho cariño para ti y el bebé y me avergüenzo de mis palabras. Por favor aceptalo, lo compre con buena intención.
-Esta bien Alfonso gracias.
-No agradezca soy yo quien tiene que agradecerte, mereces eso y mucho más. Me encargare de que a ti y al bebé no les falte nada.
Ella lo contempló un instante sin saber que decir. Al final optó por la retirada.
-Buenas noches.
-Espera, ¿no te quedaras a cuidarme?-dijo medio divertido.
-Eres lo bastante mayor como para necesitar que cuiden de ti.
-Pero estoy enfermo-replico con ternura y una sonrisa devastadora.
-Si necesitas algo llama, estoy segura de que alguien acudirá a tus gritos.
-Mujer cruel - Dijo con una sonrisa de diversión en su rostro.
-Trata de descansar. Buenas noches Alfonso
-Buenas noches cariño descansa.
Ella camino así la puerta pero antes de que saliera él le llamo.
-Creo que olvidas algo cariño.
-¿así?
-Si.
-Oh ya comprendo.
Se acerco a la cama y tomo la bolsa. Había creído lo que él le había dicho aunque le había dolido mucho que el hubiese vuelto a desconfiar de ella.
Pero comprendía que él estaba muy arrepentido.
Se incorporo para marcharse pero entonces en la tomo del brazo y la atrajo así sus brazos y la beso.
-Esto era lo olvidaba cariño, pero descuida yo me encargare de recordartelo con gusto.
-Esto no esta bien y no volvera a repetirse -dijo a la vez que se alegaba de él.
Alfonso contempló durante varios minutos la puerta por la que ella acababa de salir. Sería difícil recuperarla y hacer que confiara en él otra vez. Pero sabía que serie difícil pero no imposible.
Mientras tanto Anahí se encontraba acostada en su habitación pensando en que no podía dejar que Alfonso le manipulara a su antojo quizás el estuviera arrepentido pero no la amaba. Además sus heridas era muy reciente y apenas habían empezado a sanar, heridas que él le había provocado.
Y a pesar de que aún lo amaba no estaba segura de que algún día fuese capaz de perdonar lo del todo, pues el le había dado la espalda cuando ella más lo había necesitado.
Consiguió conciliar el sueño.
Anahí despertó horas después y decidió ir al ver si Alfonso estaba bien. Pero cuando entro a la habitación lo encontró gimiendo de dolor.
Al parecer el dolor era tan fuerte que no había tenido fuerza para pararse de la cama. Visualizo el pote de los calmentes en el piso
rápidamente lo tomo y saco dos píldoras y lleno un vaso de agua de la jarra que estaba en la mesita.Alfonso tenia los ojos cerrados del dolor tan fuerte que sentía.
Con una mano levanto un poco su cabeza y con la otra introdujo dos calmante en su boca y luego sostuvo el basó de agua para darle a beber. Él se tomó las píldoras con trabajo. No paso mucho tiempo cuando él se quedo dormido tranquilamente.
Anahi se sentó en una silla a la lado de la cama, no podía acostarse a su lado pues aun recordaba a ver visto a Kristeen en aquel lugar que ahora estába vacío.
La silla no era cómoda pero no quería dejar a Alfonso sólo otra vez, se sintió culpable él le había pedido que se quedara pero ella no lo había hecho. Se sintió mal al pensar cuanto tiempo había estado allí solo gimiemdo de dolor, claramente él había tratado de alcanzar el pote de los calmante pero lo único que había logrado había sido tirarlo al piso eso le había hecho pensar en lo mal que él había estado. Ahora dormía tranquilo y relajado y ella esperaba que continuará así.
Pero no paso ni media hora cuando él desperto. Ella estaba despierta pues no había querido dormir por si él la necesitaba.
-Gracias, cariño. Ahora ven junto a mi. Se nota que está incómoda ahí.
-No hables, trata de descansar.
-Lo haré cuando te tenga en mis brazos. Anda ven junto a mi, Necesitas descansar.
-No insista no dormíre en esa cama.
Era notable que ella tenia sueño y que se encontraba incómoda, pero no quería compartir la cama con él, a pesar de que sabía que él no se encontraba en condiciones para tocarle, entonces cierto recuerdo del paso llego a su mente, con que eso era pensó él.
-Lo que viste aquella mañana no fue lo que parecía, ni siquiera sabía que Kristeen estaba allí hasta que tu entraste y vi la palidez de tu rostro. En aquel momento no dije nada porque no sentía debía darte explicaciones y también porque quería que pensará que había pasado la noche con ella. Pero la verdad es que nunca me acosté con ella, porque la única mujer que deseo eras tu, no a habido ninguna mujer depues de ti.
Aquella declaración la dejo atonica le costaba creer aquello, pero en sus ojos podía ver que no mentía. Le costaba creer que un hombre como Alfonso Herrera llevaba tanto tiempo sin tener sexo.
Suspiró resignada tenia sueño y estaba cansada lo mejor sería acostarse con él, pues no quería dejarlo solo.
En cuanto la tuvo a su lado la rodeo con sus brazos y la atrajo a su pecho.
Alfonso estaba desnudo debajo de la sábana que le cubrían de cintura para bajo, su abultado vientre chocaba con el tonificado abdomen de él .
-Dios aún me asombra la maravilla de la vida, esto es increíble - susurró el asentir como la criatura daba patadas en el vientre de su madre.
-Si es increíble, pero yo espero que se duerma o de lo contrario no me dejara dormir, aveces pienso que es un niño y que será futbolista.
Alfonso sonrió por su comentario.
-Estoy seguro de que será buen chico y dejara dormir a su madre.
Mientras decía esto su mano acariciaba suavemente el vientre de la chica.
-Eso espero.
-Descansa pequeña.
Y lo hizo en aquellos brazos que le brindarán seguridad. Aquella noches ambos durmieron a gusto después de tanto tiempo sin hacerlo.
La criatura había dejado de patear al parecer le había gustado aquella voz ronca que susurraba lindas palabras a su madre.
Y al igual que su madre se sentía protegido.
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Dolorosa venganza
FanfictionEsta es una adaptación, es una historia interesante espero os guste!! Anahí había quedado embarazada del hermano de su prometido, y su amado prometido lo que único que buscaba era; VENGANZA.