A la hora de despedirnos de Iván nadie se quería ir.
Nos hizo tanta falta que para compensarlo tendríamos que estar todos juntos una eternidad.
Caleb inventaba cualquier excusa para quedarse con él...pero bueno no tuvo chance porque era el chofer.
Romi estuvo todo el día abrazada a él y dándole besitos.
En ningún momento hablamos del tema del incendio. No queríamos recordárselo y abrir heridas que poco a poco iban cerrando.
Además parecía que lo iba superando.
Cuando llegamos a la ciudad nos quedamos un rato en la casa de Caleb.
Su abuelo Tom estaba haciendo unos trabajos en unos barcos y nos pidió ayuda con unos pescados para sacarale las escamas y espinas.
- Si quieren cenar hoy tienen que ayudar. Vamos hagan algo. - dice Tom.
- Caleb les puede explicar si nunca lo hicieron.
Romi y Laila no querían saber de nada. Les encanta el pescado pero me parece que destriparlos no les parecio tan agradable.
- ¿Enserio tengo que hacer eso? - susurra mi hermana con una mueca de asco.
Me río por su reacción.
Los chicos ya estaban haciendo el trabajo y me uní a ellos.
Nunca lo he hecho pero tampoco me desagrada.
- Si quiere podemos ir prendiendo el fuego... - dice Laila mientras se aleja de los pescados.
Tom pone los ojos en blanco y asiente.
- Voy contigo - dice enseguida mi hermana.
Las pocas olas que habían rompían en el muelle dónde estábamos sentados.
- ¿Al final que vas a hacer para tu cumple? - habla Zac y lo fulmino con la mirada.
Ya habíamos hablado de que no le íbamos a decir nada a Luke.
Maldito Zac.
- No sé algo sencillo - dice él sin mucha importancia.
- Quiero que haya bebidas fuertes, sino no voy - Advierte Caleb.
- ¿Para que después andes vomitando? - digo y se ríen.
- Bueno, son las consecuencias de pasarla bien ¿no?
Reímos.
De la nada sentimos unos gritos.
- ¡Aaaa! ¡Apagalo! - volteo y veo a mi hermana con parte de su blusa prendida fuego y Laila sin saber que hacer.
El abuelo de Caleb sale de la casa con un extintor y apaga el fuego.
- Muchas gracias me salvó la vida - exajera mi hermana y los chicos intentan no reírse.
- Que niñas complicadas - el ansiano sacude la cabeza.
- Te dije que no te acercaras porque tu blusa era demasiado larga y se iba a quemar... - la regaña Laila.
- Al final ¿Pudieron prender el fuego? - pregunta Luke con sarcasmo.
- ¿Eso es lo único que te importa? Casi muero incendiada - se molesta mi hermana y Zac y Caleb se mueren de la risa.
Luego de una hora, estábamos todos al rededor de la fogata viendo como se cocinaban los pescados.
La noche estaba súper estrellada y el ruido de las olas era muy relajante.
El abuelo de Caleb nos contaba como fueron sus años jóvenes como navegante y su historia de amor con la difunta abuela de Caleb.
- Luego la convencí para que navegara conmigo durante meses. Fuimos por toda América del sur.
Fué la mejor etapa de mi vida.
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Un atardecer contigo
Teen FictionPara Victoria Rorys, la decisión que tomaron sus padres de mudarse a Hawai y dejar a sus amigos, no le gustó mucho, pero tampoco le pareció mala idea estar en Hawai. También le va a resultar difícil alejarse de su novio Renzo ¿Pero qué pasa si Vict...
