Grupos opuestos

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Nos tuvimos que sentar esa mañana en los viejos muebles de la sala, mientras Aris nos contaba lo que había podido averiguar luego de derretirles el cerebro a los hombres en el hotel.

Era claro que estaba ansioso por contarnos, pero que se había aguantado casi una semana ya que al parecer ninguno de nosotros estaba de humor para ver su sonrisa cada que hablaba sobre como taladró en sus recuerdos hasta que encontró algo de valor, no sin antes hacerlos sufrir en el proceso, claramente.

Aunque tenía que darle crédito, luego de una conversación corta que tuvimos la noche anterior, intentó bajar la intensidad de la dicha tan obvia que sentía cuando acababa con una vida de forma tan cruel y despiadada.

-Nadie conoce al creador directamente- dijo al final, luego de contarnos sobre otras cosas poco relevantes- Pero si había algo interesante.

-Lo único interesante sería tener una imagen de su rostro para poder cazarlo como se merece- soltó Fassier, dejando caer la cabeza hacia atrás en el espaldar del sofá.

-Tengo una dirección- sonrió- Donde al parecer solo han ido un par de miembros de la Marea para recibir información confidencial.

-¿Confidencial?- fruncí el ceño- Creí que era solo, subir una foto, y el más cercano se encargaba de cazar al protegido de la oscuridad. ¿Qué más puede haber?

-Va a haber un ataque-suspiró Aris, cruzando los brazos sobre su cuerpo- En la academia.

Me incliné hacia delante, abriendo los ojos de par en par.

-¿Qué?- Willow nos miró, y luego a Aris- ¿Por qué no nos lo dijiste antes?

-Porque... ridícula humana... dejaron que sus estúpido sentimientos se mezclaran con el trabajo... y me ignoraron por toda una semana. Tienen suerte de que decidiera hablar ahora- el aire en la habitación se volvió helado, era claro que estaba molesto.

Pero al dirigir la mirada hacia mí dejó salir un suspiro y cerró los ojos por unos segundos.

-Al parecer, parte de su departamento de justicia... los Jurados, tendrán unas audiencias con los estudiantes para averiguar sobre lo que ocurre con la Marea, y llevarán detectores.

-¿Detectores, en la academia?- Alden lucía realmente confundido- ¿Qué van a hacer esos... carceleros ahí?

Los detectores eran de los protegidos de la oscuridad mas despiadados que había, se encargaban de arrancar la información de los reclusos en las cárceles, de torturar a las personas hasta que dijeran las palabras que querían escuchar frente a la corte. Se encargaban de ver en tu alma, a tu conexión con tu dios y arrancarlo de cada fibra de tu ser si consideraban que eras un peligro.

-El miércoles, cuando vayan los detectores, la Marea está planeando atacar- Aris tensó la mandíbula- Acabar con los únicos en Ravine que podrían condenarlos por sus delitos y aprovechar para acabar con tres generaciones de protegidos de la oscuridad.

Nos quedamos en silencio, mirando hacia la nada, preguntándonos ¿Qué podríamos hacer ante aquello?

-Deberíamos avisarles, a los protegidos de la oscuridad... los de la clase de Darius- Me levanté del asiento, teníamos que intentar salvarlos a ellos al menos.

-¿Cómo? No tenemos sus números, o contactos de algún tipo, ir a la academia ha de ser imposible con la cantidad de seguridad que habrá cuando lleguen los detectores- soltó Alden.

-Y si la Marea nos ve ahí, luego de todo lo que ha pasado... Seremos los primeros en ser perseguidos, y dudo que los protegidos de la luz quieran ayudarnos a escapar- se rio Fassier.

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