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Dan estuvo ausente al día siguiente debido a una hemorragia nasal y fue al hospital rápidamente, al igual que Changmin quien lo acompañó.

Jaekyung todavía quería hablar con él, pero no sabía qué decir cuando Dan estaba frente a él, y cada vez que se sentía listo para hacerlo, nada podía salir de su boca. Y añadiendo el hecho de que era muy malo expresando sus sentimientos, era mucho más difícil para él. Tenía la gran necesidad de reconciliarse con él, no sabía por qué, pero sentía la necesidad de hacerlo.

Al día siguiente, notó que Dan y Changmin llegaban temprano ese día. Para él era algo más que obvio que Changmin era más que solo un paciente y un amigo...

Se imaginaba mil y un escenarios donde los dos eran felices, incluso suponía que ambos ya lo habían hecho, él gustaba de suponer mil y un cosas, y varias de esas cosas era que ya se habían besado, empezaran a salir o que incluso ya hasta se habían acostado. Y de solo pensar que Dan estaba disfrutando los labios de otra persona lo ponía mal.

Y por más mal que se sintiera, más fuerte fue su golpe al saco de boxeo, que terminó rompiéndose.

— Hombre, han pasado meses desde que rompió un saco de boxeo — dijo un chico que pasaba para usar un saco de boxeo junto a Jaekyung.

— Sabes que puedo oírte, ¿no? — dijo Jaekyung un poco enojado.

El otro chico simplemente se estremeció y siguió con lo suyo.

— ¿Cómo sientes tu hombro Jaekyung? — preguntó el entrenador.

— Mejor que hace unos meses, ¿por qué la pregunta?

— ¿Me preguntaba si podrías hacer sparring?

— Puedo, pero ¿contra quién tengo que ir? Ninguno de estos cabrones está a mi nivel.

— No, pero por falta de práctica por lo de tu terapia ha bajado considerablemente así que rdtás en el nivel de ellos — comentó el entrenadro — Ve preparandote y encaminando al ring.

Jaekyung dejó el saco de boxeo roto, ordenando que lo cambiaran y empezó a caminar hacia el ring de sparring. A medida que avanzaba, el sonido de sus pasos resonaba en el ambiente, una mezcla de confianza y tensión.

Sus puños se cerraban y abrían involuntariamente, era una manifestación física del torbellino de emociones que lo envolvían y que no comprendía. La iluminación del gimnasio revelaba una expresión seria y concentrada.

En su trayecto, el destino le tenía preparada una sorpresa. Al doblar la esquina, se encontró con una escena que detuvo brevemente sus pasos. Dan y Changmin estaban allí, inmersos en una conversación animada. La naturalidad con la que compartían risas y gestos amigables creaba un contraste impactante con el mundo interior de Jaekyung.

Changmin, con su presencia serena y solidaria, era una figura que se interponía en su camino. Dan, por su parte, irradiaba una calidez que no podía ignorar, si él estaba cerca, Dan nunca tenía una expresión facial así. 

Una corriente de celos y frustración se apoderó de él, pero se esforzó por mantener su fachada de confianza.

Aunque su camino hacia el ring continuó, la imagen de Dan y Changmin hablando amenamente como si fueran amigos o pareja de hace muchos años se repetía una y otra vez en su cabeza. La confrontación próxima en el ring se volvía más que un simple enfrentamiento físico; era una lucha interna contra sus propios demonios y una creciente sensación de pérdida.

— Changmin, prepárate, harás sparring con Jaekyung, rápido — ordenó el entrenador Park — Y ponte el caso y el peto, no vaya a ser que este se aloque.

Changmin asintió con la cabez y fue a colocarse los guantes, y con ayuda de Dan se colocó lo demás. Reconocía la gravedad de enfrentarse a alguien como Joo Jaekyung, difícilmente sales vivo del ring. 

— Lo harás bien Minnie — dijo Dan asegurando con el velcro el casco de esponja.

— Gracias Danny — Changmin agradeció al doctor, que ahora traía el gorro blanco que Heesung le regaló, por sus palabras y en un gesto inesperado, le dio un beso suave en la frente. Dan estaba sorprendido pero con una sonrisa cálida en su rostro.

La atmósfera en el gimnasio estaba cargada de emoción mientras se acercaba el momento del enfrentamiento entre Changmin y Jaekyung, quienes ya se encontraban en el ring. 

Daehyun, con una chispeante energía, se apoderó del centro del gimnasio y tomó un micrófono y se metió en su papel de MC del gimnasio.

— ¡Bienvenidos a un nuevo combate de la Team Black Sparring League! — exclamó Daehyun, con entusiasmo desbordante — ¡Bienvenidos al evento más esperado en la historia de nuestro querido gimnasio! Estamos a punto de presenciar un encuentro que seguramente quedará marcado en los anales de la historia del sparring del gimnasio.

La multitud respondió con vítores y aplausos, emocionada por la presentación animada de Daehyun.

— Pero antes de entrar en acción, permítanme presentar a nuestros valientes contendientes — anunció Daehyun, con un gesto teatral hacia el área de combate.

— En esta esquina, con una habilidad que iguala su tenacidad, les presento a nuestro increíble luchador, el actual finalista a campeón de peso medio, Kim Changmin — Daehyun señaló hacia Changmin, generando aplausos y ovaciones.

Changmin asintió con modestia, sintiendo el apoyo de sus amigos y la energía de la multitud.

— Y en esta otra esquina, con una historia impresionante y una fuerza imparable, y muchos juegos de pera rotos, les presento a nuestro formidable oponente, el excampeón internacional de peso pesado, Joo Jaekyung — Daehyun señaló al azabache, quien solamente bufó y recibió una ligera mezcla de aclamaciones y silbidos — ¡Amigos, prepárense para el combate del siglo! ¡Una batalla entre campeones! ¡Que comience el espectáculo!

Los que entrenaban dejaron de hacerlo para presenciar el combate no oficial, anticipando el enfrentamiento que se avecinaba. Daehyun se unió al público, expectante de la emocionante batalla que estaba a punto de desplegarse en el ring.

Jaekyung, aunque mantuvo su fachada imperturbable, notó la resolución en los ojos de Changmin. El sonido de golpes resonó en el gimnasio mientras ambos combatientes se enfrentaban. Changmin esquivaba los golpes con destreza, mostrando una habilidad notable. A pesar de la disparidad de fuerzas, Changmin demostraba una resistencia y habilidad táctica impresionantes.

Dan, desde la barrera, no podía evitar sentirse asombrado por el despliegue de habilidades de Changmin. Cada movimiento de su amigo por el cual ya empezaba a sentir mariposas en el estómago era una expresión de valentía y determinación. Mientras observaba el sparring, Dan no sabía que esperar como resultado de la pelea.

El primer round terminó, ambos se mantenían en pie, y con algo de sangre en sus rostros. Después de unos segundos, empezó el siguiente round.

La tensión entre ellos es palpable, especialmente por los celos persistentes del más alto.

Aunque nadie esperaba lo que vendría después.

En un arranque de enojo y celos descontrolados, y una aparente sed de sangre, Jaekyung hace una llave, que lastima fuertemente a Changmin durante el combate, lastimando su brazo.

— ¡Argh! ¡Mierda!

— Cállate imbécil — dijo Jaekyung dejando que los celos lo dominasen.

Dan, quién escuchó el grito y vio la esxpresión de dolor en el rostro de Changmin, corrió hacia donde todos estaban presenciando la situación desde el borde del ring, se apresuró a intervenir junto con el entrenador para abrir espacio, apartar a Jaekyung, y auxiliar a Changmin.

— ¡Detente, Jaekyung! ¿¡Qué demonios estás haciendo!? — vociferó el entrenador.

Jaekyung, con una mirada desafiante hacia Dan, quien lo miró fijamente con esa mirada de odio nuevamente, se bajó y alejó del ring. Dan ignoró este gesto, y se enfocó principalmente en atender las heridas de Changmin, quien aún muestra signos de dolor.

[Fanfic/AU] Espero no sea tarde (Jinx)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora