[Fanfic/AU] Espero no sea tarde (Jinx)

ENST 'Realidad alterna' 2

Una semana pasó, Dan y Jaekyung llegaron al hospital para la sesion de quimioterapia de Dan.

Dan y Jaekyung caminaban juntos por los pasillos del hospital, sus pasos resonaban ligeramente en el suelo pulido mientras se dirigían al área de oncología. Jaekyung estaba visiblemente incómodo, sus cejas fruncidas y las manos metidas en los bolsillos de su chaqueta.

— Te puedes ir, ¿eh? — dijo Dan, caminando.

— Ja, ni creas que me iré — dijo Jaekyung, incrédulo — Capaz que te escapas a otro lado y todo esto de tu enfermedad es una maldita fachada

Dan solamente se limitó a rodar los ojos, el cansancio y la ansiedad eran evidentes en su rostro. 

— Nunca mentiría respecto a eso...

— Entonces me lo hubieses comentado.

— Me preferirías muerto.

Jae no respondió, pero su mandíbula se tensó. Continuaron caminando hasta llegar a la sala de quimioterapia, donde varias sillas reclinables estaban dispuestas en fila, cada una con un paciente recibiendo tratamiento. El aire estaba impregnado con el leve olor a desinfectante y el zumbido de las máquinas.

Dan se dirigió a la recepción para registrarse, mientras Jaekyung se quedó cerca de la puerta, observando todo con una mirada inquieta. Cuando Dan regresó, se sentó en una de las sillas vacías y miró al ojigris.

— Ya me asignaron lugar, es por allá — dijo Dan, señalando una silla cercana.

Jaekyung dudó un momento antes de asentir y tomar asiento, sus ojos recorriendo la habitación.

— ¿Cuánto tiempo dura esto? — dijo Jaekyung, tomando su teléfono de su bolsillo

— Unas pocas horas — respondió Dan, tratando de sonar casual, aunque su voz traicionaba una leve preocupación — Depende de cuánto tarde en acabarse la bolsa de infusión.

— Tengo la agenda llena.

— Puedes irte entonces si te vas a estar que-

— No — dijo Jaekyung firmemente — Me voy a quedar, ya dije.

— Eh... señor Kim, ¿El joven de aquí lo está molestando? — llegó la enfermera Goo, llevando el portasuero y el equipo de quimioterapia.

— Eh no... Él viene conmigo, solo una peuqeña discusión — dijo Dan, volteando a ver a Jaekyung, y continuó ocupando un tono bajo pero muy firme, daba miedo — No estamos en el gimnasio, y no estamos en su casa, señor Joo... Comportese si es que tiene educación.

— Bueno... Ya traje lo de su quimioterapia, la doctora Lee me comentó que esta vez sería ligeramente menos agresiva por el como reaccionó la semana pasada — dijo la enfermera Goo — Bien, voy a ponerle la intravenosa ¿Se encuentra listo?

— Sí... Adelante — dijo Dan, colocando su brazo sobre el apoyabrazos del sillón.

Jaekyung observó atentamente mientras la enfermera preparaba a Dan, insertando la aguja en su brazo y ajustando el flujo del medicamento. Sus ojos se fijaron en la expresión de Dan, buscando cualquier señal de dolor o malestar.

Cuando la enfermera se alejó, Jae se inclinó hacia adelante, susurrando.

— ¿Era necesario hacer tu maldito comentario enfrente de la enfermera?

— No tan lejos de la realidad así eres tú con los del gimnasio — dijo Dan — Ah dios...

— ¿Duele?

— Es incómodo... El líquido es frío por lo que es una sensación horrible — dijo Dan — Y es solo esperar a que se acabe la bolsa y ya habrá terminado.

Jaekyung se recostó en su silla, tratando de relajarse, pero su mente no dejaba de girar.

Los sonidos y olores del hospital lo hacían sentir enfermo, débil. Recordaba las veces que había estado en hospitales, siempre sintiéndose vulnerable y fuera de control.

— ¿Y esto es todas las semanas?

— Así es... Normalmente vengo con un libro o veo alguna película en mi teléfono mientras espero... — dijo Dan , removiéndose un poco en su lugar por lo incómodo del fluir de la quimioterapia — No me permiten venir solo, así que cuando Changmin, o Yoongu, o Daehyun vienen, normalmente platico con ellos...

— ¿Y porqué ellos?

— Porque son mis amigos, señor Joo... Ustedy yo solamente somos doctor-paciente, jefe-empleado, y persona-juguete sexual.

— ¿De verdad crees eso?

— No es que lo crea... Lamentablemente es lo que es.

— Ni creas que con eso me iré.

— No espero que lo haga.

El líquido goteaba lentamente por el tubo conectado a su brazo. El ambiente estéril y el olor a desinfectante le resultaban familiares y desagradables al mismo tiempo. A su lado, Jaekyung estaba inquieto, moviéndose en su silla y lanzando miradas de disgusto a todo el entorno.

— No soporto estos lugares —murmuró Jae, cruzando los brazos — Me hacen sentir enfermo y débil.

Dan lo miró con paciencia, sabiendo que Jae no estaba acostumbrado a mostrar empatía o a lidiar con situaciones incómodas

— Si te sientes así, puedes irte — dijo Dan en voz baja, sintiéndose un poco mal.

Jae resopló, sacudiendo la cabeza.

— No lo haré... Ahora cállate — dijo Jaekyung, poniendo los ojos en blanco, concentrándose en algo que estaba leyendo en su teléfono.

Dan suspiró, apreciando a regañadientes la insistencia de Jaekyung en quedarse, aunque sabía que sus motivos eran más posesivos que altruistas.

—Como quieras — dijo, cerrando los ojos y tratando de relajarse mientras la quimioterapia continuaba.

El tiempo pasó lentamente. Jaekyung continuaba moviéndose incómodo, mirando su teléfono y a su alrededor, claramente deseando estar en cualquier otro lugar.

Sin embargo, nunca dejó de vigilar a Dan, a pesar de sus quejas.

Cuando el tratamiento finalmente terminó, Dan se sentía extremadamente débil. Intentó levantarse, pero sus piernas no le respondieron, y su visión se volvió borrosa.

— Oye Kim Dan, despierta — dijo Jaekyung, notando la palidez en el rostro de Dan.

Dan abrió los ojos lentamente, tratando de enfocarse en el rostro de Jae.

— Estoy... bien — alcanzó Dan a murmurar, aunque su voz no tenía la fuerza habitual.

— No, no lo estás — dijo Jaekyung, quien frunció el ceño, claramente irritado por la situación, pero preocupado de todas formas — Vamos, levántate.

Dan intentó moverse nuevamente, pero sus fuerzas lo abandonaron, dejándolo más débil que antes. Jae maldijo por lo bajo, sabiendo que no había otra opción. Con un resoplido de resignación, se agachó y levantó a Dan en sus brazos.

— Esto no significa que me guste —  murmuró Jae, sintiendo el peso ligero y la fragilidad del cuerpo de su fisioterapeuta.

— No te preocupes... Esta vez no me haré ilusiones al respecto... Es muy claro...

Jaekyung salió de la sala de quimioterapia, cargando a Dan con cuidado. Las miradas curiosas de las enfermeras y otros pacientes lo irritaban, pero ignoró todo, centrando su atención en llevar a Dan a casa.

Aunque sus quejas y su actitud hosca seguían presentes, había un algo en sus acciones que hablaba de algo más profundo, una necesidad de proteger a Dan, aunque nunca lo admitiría abiertamente.

Al llegar al coche, Jaekyung colocó a Dan en el asiento del pasajero, asegurándose de que estuviera cómodo antes de subirse al volante.

Mientras conducía, lanzó una mirada de reojo a Dan, que ya se había quedado dormido.

— Sólo eso... ¿soy sólo eso? — dijo Jaekyung.