[Fanfic/AU] Espero no sea tarde (Jinx)

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Dan fue dado de alta al día siguiente de la visita de Jaekyung. La doctora Lee recomendó a Dan descansar la semana completa para que recuperase la energía para estar en óptimas condiciones para poder trabajar.

Aunque la casa ya no se sentía sola gracias a una adorable y esponjosa bola de pelos dorados que corría de un lado a otro en la casa.

Hace unos días...

Changmin paseaba por una calle, regresando al dormitorio del gimnasio para descansar después de un largo día haciendo mandados con su madre. Al caminar, se encontró con refugio de animales, observando a los diversos perros que buscaban hogar.

Por mera curiosidad, el finalista a campeón entró al lugar. Entre los ladridos y las miradas tristes, sus ojos se posaron en un pequeño cachorro de golden retriever, apacible y tranquilo, su placa indicaba que el cachorro tenía Pang como nombre.

— Pang llegó hace unos días, su anterior dueño falleció por un tumor cerebral, está entrenado para el cáncer y se adapta rápidamente a los entornos en los que se encuentra — dijo la cuidadora — Y le encanta que le froten la barriga, ¿no es así Pang? — ladró juguetonamente el cachorro.

Changmin sintió una conexión instantánea con el tierno golden retriever, pensó que sería una muy buena compañía para Dan, para que no estuviese tan solo en el apartamento, y alzarle un poco los ánimos, por lo que, expectante, decidió adoptar a Pang, llevándolo consigo con la esperanza de brindarle no solo un hogar cálido, sino también convertirlo en una fuente de alegría para Dan en medio de sus desafíos de salud.

Changmin, con Pang en brazos, llegó al apartamento de Dan.

Sin embargo, al entrar, se encontró con una escena preocupante: Dan estaba sentado en la taza del baño, sosteniendo con una mano un pañuelo empapado en sangre debido a un sangrado nasal fuerte. El rostro de Dan reflejaba el malestar y la sorpresa por la situación.

— ¡Dan! — exclamó Changmin, sintiendo la urgencia del momento — ¿Cuánto tiempo has estado sangrando?

— Como... Cinco minutos seguidos, supongo, Dios, no se detiene. Solo necesito que se detenga. — respondió Dan, intentando restar importancia al incidente, pero su palidez y la preocupación en sus ojos revelaban lo contrario.

El silencio tenso del apartamento solo se rompía por el sonido del pañuelo absorbente y la respiración agitada de Dan. En medio de la preocupación, la presencia reconfortante de Pang se convirtió en un destello de consuelo para ambos, mientras esperaban a que la situación se estabilizara. 

Changmin, sin hacer caso a las palabras de Dan, llamó a la doctora Lee para informarle sobre la situación.

— Los estaré esperando, así que vengan al hospital. Tendré que hacerle un chequeo completo a Dan.

Sin dudar, Min llevó a Dan al hospital y permaneció allí durante algunas horas. Pang, en medio de su curiosidad, empezó a explorar por la casa, empezando a acostumbrarse al apartamento, y se quedó dormido a un lado de la cama.

De regreso al apartamento, Dan, al entrar a su habitación, notó la presencia adormilada y curiosa de Pang.

— Ah, Dan, mira, te presento a Pang. Lo encontré en un refugio de animales, y la cuidadora me contó que fue dejado allí porque su dueño falleció. Es un cachorro adorable y pensé que podría brindarte compañía en momentos difíciles —explicó Changmin, mientras Pang movía la cola con entusiasmo, respondiendo a las caricias y la atención.

— Min, esto es el regalo más inesperado que me han dado — dijo Dan, mientras el cachorro se acercaba a él — ¿Los vecinos estarán bien con la presencia de Pang aquí? No quiero causar problemas — preguntó Dan, con una mezcla de sorpresa y gratitud, observó al cachorro con ojos cálidos. Preocupado de que la mascota no fuera bienvenida en el complejo de apartamentos.

— No te preocupes, Dan, el complejo acepta mascotas, y es más, Pang está entrenado como perro de terapia y de acompañamiento para personas con cancer.

Dan asintió, sintiéndose agradecido por la consideración de Changmin y emocionado por la adición de Pang a su vida.

— Bueno... De niño siempre quise un perro, creo que por fin se me hizo Min.

Dan y el juguetón Pang, comenzaron a encontrar un nuevo equilibrio en medio de las adversidades.

Volviendo a la actualidad...

Dan se encontraba sentado en el sofá, observando con ternura y diversión a Pang. El pequeño cachorro exploraba cada rincón del lugar con su energía incontenible, moviendo la cola con alegría mientras descubría juguetes dispersos por el suelo.

El apartamento, antes tranquilo, se llenaba ahora de ladridos suaves y risas de Dan al interactuar con Pang. Juguetes mordisqueados y pelotas rodando por el suelo se convertían en parte del nuevo escenario doméstico.

Dan, a pesar de los desafíos de su salud, encontraba consuelo en la presencia juguetona de Pang. Le daba un motivo adicional para sonreír y una distracción bienvenida de las preocupaciones que lo rodeaban. La rutina diaria incluía paseos cortos por el vecindario, donde Pang se detenía para explorar cada esquina con curiosidad.

Changmin se unía a Dan en la tarea de cuidar a Pang, encargandose de los gastos de la comida y de vez en cuando, juguetes.

Juntos, ahora formaban un trío dinámico que encontraba consuelo y alegría en la sencillez de los momentos compartidos. La vida en el apartamento comenzó a transformarse, marcada por las huellas de patitas y la risa reconfortante que llenaba el espacio antes silencioso.