Después de que el consejo le hablara sobre la misión Karissa salió apresuradamente, como si tratara de limitar la convivencia con él. Y como era de esperarse Obi-Wan la siguió,
—¿Me estás evitando? —pregunto Obi-Wan cuando la alcanzo.
—¿Qué te hace pensar eso? —dijo Karissa sin dirigirle la mirada.
—Tal vez porque mientras íbamos en camino a ver al consejo estuviste muy callada —dijo Obi-Wan—. Cuando lo normal es que te burles de mí.
—Estaba... pensativa.
—Pensativa.
—No es algo de lo que debas preocuparte.
Obi-Wan acompañó a Karissa hasta el gran árbol, Vaj su aprendiz seguía en el lugar donde ella lo había dejado. Al verla llegar, el padawan se acercó corriendo hasta ellos, quería saber que le había dicho el conejo a su maestra. Al chico le brillaron los ojos al enterarse de que irían a una misión.
—Tendrás que hacerme caso, Vaj —advirtió Karissa—. Esto es una misión de rescate, la vida de una maestra y un padawan corren peligro.
—Entendido, maestra —dijo Vaj—. Será un honor participar en una misión con usted maestro Kenobi.
—El honor es mío, tu maestra me ha dicho maravillas sobre ti.
Obi-Wan notó que el rostro del chico se ponía rojo. Al parecer Karissa tenía prisa por definir los detalles del plan así que se dirigieron a los archivos jedi para buscar información sobre el planeta para armar un plan. Al llegar a los archivos, buscaron una mesa lo suficientemente apartada para no incomodar a nadie.
Mientras trabajaban, Obi-Wan miraba disimuladamente a Karissa. Desde lo de Mandalore, había comenzado a aceptar que tal vez sí que tenía sentimientos por ella, pero lo que no sabía es cuando habían comenzado a aparecer. Sabía que Karissa tenía sentimientos con por él, ella misma se lo había dicho, pero algo en la actitud de ella había cambiado y Obi-Wan comenzaba a pensar que aquello era lo mejor.
—¿Qué has encontrado, Vaj? —le pregunto Karissa a su padawan.
—Según esto, Braxxar es un planeta boscoso —leyó el padawan—. Además, la fauna del planeta es en su mayoría salvaje.
—Muy bien, mi joven aprendiz —lo felicito Karissa.
—Según esto —dijo Obi-Wan—. En el planeta se comercia con especias, así que es el lugar ideal para los sindicatos criminales.
Obi-Wan sintió una perturbación en Karissa, su rostro se puso tan pálido como las nubes y su respiración se aceleró, pero su rostro recupero el color casi tan rápido como había desaparecido y su respiración volvió a la normalidad.
—Tendremos cuidado —dijo Karissa—. Ahora necesitamos encontrar una nave y provisiones.
—Yo me encargo de la nave —dijo Obi-Wan,
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Illicit affairs | Obi-Wan Kenobi
Fiksi PenggemarKarissa Mágnum y Obi Wan Kenobi se conocían desde que eran padawans, pero su relación siempre había sido complicada es por eso que el fallecido maestro de Obi Wan los había mantenido alejados durante su misión en Naboo. Después de la muerte de su ma...