Capítulo 1

2.9K 244 17
                                    

"El foso más profundo"

Un par de horas atrás...

Las uñas de tus dedos se encajaron en tus palmas, sacando sangre. Aprietas las manos en puños como el impulso mismo del enojo que empieza a crecer dentro de ti.

Agachas la cabeza mientras eres regañada por la jefa de los sirvientes, una pecadora que probablemente lleva muerta mucho más tiempo del que tu has vivido.

Cuando te arrastraste hasta este lugar por el trabajo te prometieron varias cosas, una de ellas era la seguridad de que dentro de la mansión Morningstar no entraría ningún otro demonio, por lo que estabas relativamente a salvo. Claro que era una mentira.

Fuera de la mansión se hayaban cadáveres de pequeños otros malditos demonios que se habían intentado colar, justo cuando tú estabas de guardia. Tuvieron que encargarse de ellos, pero aún así por tu culpa casi llegan a las puertas de la mansión.

--¡¿Tienes una idea de lo que Lucifer nos harías si ellos llegara a pasar?!-- Repite la mujer, más fuerte y cerca de tu cara por si no lo habías escuchado las anteriores veces.

--S-si... señora... lo sé.-- Contestas en un susurró.

La pecadora sin embargo no parece contenta y si sus gritos no había sido suficientes te da una gran bofetada que te deja tirada en el piso, luego de eso ella vuelve a gritar que regreses a trabajar.

Sientes ganas de llorar, sin embargo no hay lágrimas. Derramaste todas cuando recién habías llegado al infierno.

Te pones de pie, debes volver a trabajar después de todos.

"Limpia por aquí, limpia por haya. Debiste pensar en las consecuencias antes de pecar." Es la tonta melodía que aparece en tus pensamientos mientras te diriges junto a un par de empleados más a limpiar el desastre sangriento afuera.

Ayudas a juntar miembros anatómicos del piso mientras otros quitan la sangre como pueden.

Estas haciendo tu trabajo, pero hay algo que te incomoda, como si alguien vigilará.

Por curiosidad subes la mirada hacia el segundo piso de la mansión, donde hay un balcón que da justo donde estas ahora. Logras deslumbrar una figura parada ahí, vigilando lo que hacían. No te veía particularmente a ti, así que simplemente disimulas como si no lo hubieras visto y continuas. Hay un pequeño sonido de puertas cerrándose y para cuando diriges la mirada nuevamente al balcón ya no hay nadie.

"Un suspiro, un grito... desesperación."

Tus alarmas se levantan cuando oyes a una de tus compañeras dar un grito agudo de terror. Ella sostiene entre sus manos la cabeza decapitada de algún pecador, que extraño... ¿Acaso lo conocía?

Sigues el ejemplo de los demás y te alejas cargando bolsas repletas para deshechar.

--Que cruel...-- Murmuras.

Una campana suena, lo que significa que todos los empleados deben reunirse de inmediato para asignarles nuevas tareas. Mientras estas parada codo a codo notas como la compañera de grito agudo ya no estaba. Ella no era especialmente cercana, pero era unos de los pocos que no intentaron matarte en cuanto llegaste a la mansión. Una pena.

Frente a ti aparece una lista de tareas, la tomas sin cuestionar y empiezas a leer mientras la jefa pasa al siguiente desgraciado a tu lado.

Para tu suerte todas las tareas son dentro de la mansión, nada de salir o estar vigilando.

Cuando todos son asignados con nuevas tareas, se dispersan para empezar a trabajar.

Llegar el final del día... y tú aun no acabas tus tareas. Mientras los demás se apresuran a abandonar la mansión, incluida la jefa de empleados, tú aún estas atrapada entre ropa sucia y jabón.

Por alguna razón (Lucifer x T/N)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora