the alpha posessive

Ansiedad

A pesar de que mi mirada va hacia la persona a la que más siento temor busco a alguien que me ayude sintiendo esta parte de mi desesperanza.

Eliot por otra parte gruñe suavemente al percatarse de mi miedo, él sabe que si se molesta fuerte mamá se dará cuenta del tipo de bestia que habita conmigo.

Siento sus enormes manos posarse sobre mis hombros, lo único que me intimida su tamaño.

Cuando menos me lo espero tengo toda la atención de mi tío... quiero que se vaya tengo miedo.

Siento un asqueroso líquido salir de mis piernas es caliente y no huele a nada raro.

Eliot paso un brazo alrededor de mi espalda como por debajo de mis piernas alzándome hacia la habitación.

- ¿Qué te está sucediendo? -me pregunta con fastidio.

Mi cuerpo tiembla y no sé qué responder más la maravillosa idea de mi intranquilidad lo que hace ponerme ansiosa.

Siento la bestia asomarse hacia la cama con su peso hundirse a los costados de mi cuerpo.

- T-tengo... quiero ... que se vaya. -más cuando me cuesta formular palabra que quiere salir de mis labios al temblar tanto tengo miedo que note mi angustia.

Estoy desesperada, necesito ayuda.

- Huelo algo extraño en ti ... Si no me dices que pasa ...

-¡Quiero que se vayan todos!. -grito.

El silencio sobre la presión atmosférica de Eliot me aterra, todo es pura tensión, es como si pidiera silencio y fuera hecho con una sola orden.

- Aitana cálmate.

Eh intentado mantener una postura educada delante de todos, me parece indecente está situación, se que no es nada pero estoy ansiosa, tengo miedo que nos golpee a mi y a Alec.

Salvaje, el es así.

- Aitana, deja de morderte los labios, te vas a lastimar.

¿Que...?. Giro mi cabeza para verme hacia el Placard el cual tiene un espejo, tengo el labio demasiado partido, provocado por las mordidas que me hice. La cantidad de sangre recorre mi barbilla hasta el pecho.

- No te quiero volver a ver con todas esas heridas ¿me oíste bien?.

Estoy atontada pienso y pienso pero no entiendo.

Por culpa de mi ansiedad no me doy cuenta del dolor que siento en el pecho, siendo mis pulmones hundirse mientras la falta de aire está muy presente en mi.

Eliot se acerca a tocar mis labios y tratar de tapar la hemorragia, no creo que sea necesario que quiera pararlo.

Será que puedo ... No ... Seguro que no puedo hacerlo. Quiero matar a Federico aún así... sería realmente absurdo ya que ... nadie me creería.

Creía estar contenta pero eso parece ser absolutamente estúpido aunque deceo omitir la idea de escaparme también.

Creo y empiezo a pensar en amar a Eliot, estoy realmente confundida y a pesar de la larga tensión que hemos tenido me satisface pensar que todavía me sigue apoyando y no está su lado ignorante.

Más yo también soy una estúpida por haber pensado en que Eliot era una mala persona, tengo problemas y eso no creo que nadie lo puede entender.