a tí y solo a tí

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- a ti... y solo a ti le daré todo mi amor eso es lo que te mereces.

Estaba mareada con la cara de estúpida no pensaba más y nada menos con la lujuria sintiendo el verdadero placer de una cerda.

Pero... algo me hizo acordar a qué esto no es una serie, porque lo estoy viviendo en carne propia.

De pronto me aferró y me doy cuenta de la más estúpida y horrenda intención de lamerle el miembro bien hasta adentro de la garganta.

Tan solo pensaba que sería de un tamaño normal como el de toda persona...

A este punto ya se había quitado los jeans.

Despegó su bóxer y vista no podía creer el miedo que estaba sintiendo

- No tiembles...- Hablo suave, que en su intento de calmar se subió a la cama mientras se masturbaba y me veía a los ojos a medida que se acercaba lentamente- Ya lo haz echo con ese estúpido ¿no?... No creo que ...

Salí de la cama con todos los tirantes sueltos. El vestido se me había caído al suelo, sin pensar tanto me lo coloqué rápidamente.

- ¿Quieres ...? -Busque palabras para que me entendiera- ¿puedes esperar está vez?.

Me miró serio aún así con el tamaño grande se fue acercando hasta a mi y se paro recto.

M***** como intimida.

-Esperaré lo que sea necesario -Beso mi cabeza y me agarró de la cintura suavemente para luego esconder su estúpida cabeza en mi cuello- Hueles bien ...

...

Me miró a los segundos, pero lamía suavemente la zona donde se reubica el sitio de la "marca" lamió parte de mi cuello. Eso hizo que saltará de un respingo.

El por si parte gruño. Después de un momento aspirando mi aroma salió de mi y me miró a los ojos.

-¿tienes hambre?.

-si, lo tengo.

- Entonces que esperas, apúrate.

Me guío hacia la salida dando que a la vez agarraba firmemente mi cintura.

Llegamos al comedor, Nana nos miraba con una sonrisa radiante.

- ¿y, ya, se arreglaron?- pregunto Nana sacando la pata y muslo del horno.

Avergonzada escondí mi cabeza entre por debajo del pecho de mi lobo.

- No te metas en estos temas Nana -Eliot sonrió y me apretó más- Señorita Evans está avergonzada.

- Oh... entiendo -Virginia después de decir ese río como loca.

-Ya, ya, no te avergüences mi Luna. -Nana sonrió y me acaricio la cabeza para luego marcharse.

Mientras yo por mi parte, aún. Sobaba mi cabeza por debajo del pecho de mi Alfa.

Tetillas.

M*****. Era demasiado grande y curpulento.

Mi alfa me acaricio la cabeza y me alzó con uno de sus brazos.

- A comer - ríe.

No voy a mentir, su sonrisa también me alegra a el día.

Eliot me sentó cerca de él en la mesa de la isla y me llevo una cucharada de huevo a la boca.

Eso me había tomado por sorpresa.

-¿te gusta? -dijo mientras limpiaba parte del huevo con llema cerca de mis labios.

Asentí con la cabeza. Si bien, su trato de tratarme como una niña me era extraño, porqué no lo era.

Hace rato andábamos peleando pero ahora ...ahora era diferente, nosé porque estúpida razón estamos siendo como una pareja.

Pero siento que esto ahora me va gustando.

the alpha posessive Donde viven las historias. Descúbrelo ahora