the alpha posessive

Dije destruirlo ¿que me está pasando?

- Déjame ayudarte ... .

Su toque tranquilo.

Muy cálido.

A este punto mi cuerpo estaba siendo posicionado sobre la hermosa y comida cama.

Requiero de su toque.

Lo necesito.

- Volveré después, tengo trabajo que hacer.

Su sonrisa es amplia.

Sus labios chocaron delicadamente en mi frente.

Lo veo irse y quiero detenerlo, me molesta que me deje sola aún cuando me siento más mal de lo que piensa.

...

Eliot ni siquiera se ah molestado en visitarme, porque no lo hizo.

Todos me atienden como una puta muñeca de porcelana, a lo cual me molesta y mucho.

De repente, dos golpes suaves escucho en la ventana.

Tal como dos ojos azules me fijan con su mirada a través de la ventana.

-¿Matt?.

Abro la ventana, justamente interrumpe en mi momento menos esperado.

- Debemos escapar, Eliot tiene la guarida baja.-Se le escucha desesperado y ansioso.

-¿estás ... Seguro?.

-¡no tenemos tiempo, haya tienes todo lo necesario, apúrate!.

El nunca me había hablado en ese tono de voz, siempre fue cariñoso y respetuoso... ¿que le estaba sucediendo?.

Saque un par de cosas del armarios, lo necesario porque tenía "lo necesario" Eliot en un principio también lo había dicho.

Ahora dudaba porque no quería dejar solo a Eliot ... Me dolía, un poco.

- Y ahora ... ¿cómo escapamos?.

- te llevo en mi espalda. -Se dió la vuelta e inclinó sus rodillas pegadas al piso. - Agarrate fuerte, no puedo convertirme en lobo porque el olor quedará impregnado en el aire, apúrate.

me subí a su espalda, y mierda ... Al fin al cabo saltaba de maravillas.

¿cómo era posible que a tan solo dos pisos de altura pudiera saltar sin hacerse daño?... Y peor aún, yo le tenía miedo a las alturas.

-¡Ahhhhh!. -Si, estoy gritando.

A este paso estábamos casi fuera de la manada, solo falta atravesar las rejas de dónde viene la otra manada.

-¿cómo hacemos para salir de aquí?.

- No toques las rejas, ten cuidado con los choques de corriente, estás pueden reconocerte.

Le di una leve sonrisa muy desconfiada pero eso pareció converserlo.

Cruzamos la muralla de rejas que impidió nuestro paso, casi olvide la enorme agilidad que tenía su cuerpo lobuno.

Mi corazón late frenéticamente, porque si no fuera por el pánico desesperado lo entendería y sería una maravilla correr por "praderas".

Porque aunque ahora me doy cuenta, los enormes kilómetros y la velocidad sobrehumana con la que se dedica a correr es sorprendente.

- Llegamos. -exclama agitado inclinandosé.

Salgo de su espalda y me digno a caminar.

-¿está es tu casa?. -pregunté sorprendida, porque para ser del menor rango sorprendía lo grande que era.

- Puede que no es como la de Eliot ... - hizo énfasis entre comillas con sus dedos "Eliot"- pero vivirás bien, tienes todo y puedo decirle a mi manada lo que necesites.

-¿tienes manada, eres un alfa?.

- No, soy un beta. -Rio a lo cual me contagio.

Entre a la casa, no pude parar de pensar en Eliot. ¿Que será de el ahora que se enteró de que no estoy?.

Mas haya de todo, se preocupa por la existencia de su cachorro.

Dije destruirlo ¿que me está pasando?.