pensamientos suicidas

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No quiero mirarme al espejo, no necesito verlo para saber que estoy bien, en solo un par de días todos esos pequeños estrías y cicatrices se habían desvanecido de forma instantánea, un dato curioso de todo esto es que me he sentido con hambre de comer carne cruda todo el tiempo, unas que otras ideas se me pasan por la mente.

Me doy una ducha mientras espero como de costumbre ver acostado al Eliot de siempre que se queja por no estar junto a él y que reclame lo que es suyo, porque ahora no me importa lo que pase, sé que mi familia es lo más fuerte que hay ahora en todo el mundo.

Los protegeré, incluso si eso significa a costa de mi muerte.

En estos momentos estoy en la habitación, sonrío con ternura al ver al padre y al hijo juntos tomados de la mano mientras duermen de forma dulce como una familia.

Cargo a mi bebé en brazos para acariciar su pequeña cabeza.

Que en estos momentos quisiera pensar que sea para siempre.

veo como Marek absorbe desde mi pezón, un cachorro, un niño, elegimos el nombre de un perro que en mi momento me gustó. Se aferra a mí como si fuese la única fórmula humana que puede protegerlo.

Sé que no abre sus pequeños ojos porque aún no puede saberlo, qué es un cachorro y quiere ser protegido por una madre la cual lo quiere mucho .

hace quisquilleos desde su garganta, gruñendo de forma suave como un cachorro, su melodía me parece tan hermosa que no quisiera que se acabara nunca.

 hunde sus pequeñas manitos sobre mi piel aferrándose de forma cariñosa, mi instinto maternal quiere amarlo, quiero protegerlo como si fuera la única misión de mi vida.

tengo lados extraños en los que estoy experimentando... mientras que por el otro... cuándo bajo las escaleras... quiero tirarlo contra la pared, quiero ver su cara destruida, estoy muy preocupada y la ansiedad me crece...

 No sé qué mierda me está pasando pero tengo miedo. Miedo a hacer algo mal y que todo se vaya al carajo, y sé que sí lo hago estaría teniendo esos pensamientos erróneamente suicidas y me arrepentiría por el resto de mi vida.

Trago saliva mientras aprieto a mi pequeño en brazos contra mí, no debo hacerlo, no debo lastimarlo... es inocente, una inocente criatura que no se queja por tener hambre o frío.

Pero después de todo, soy una madre. He dado a luz a un ser maravilloso que tiene vida, cada vez estoy más ansiosa, no quiero que nadie toque a mi cachorro, lastimarlo o tocarlo quisiera cortar sus manos si eso fuera a pasar. Eliot y Marek son míos y de nadie más, solo yo puedo amarlos... .

ahora somos una familia, dos padres y un niño... una familia, le daré todo lo que nunca tuve ... un padre ausente, lo protegeré de Eliot y de cualquiera quién se interponga en el camino.

Mi cachorro, mi familia, solo míos. Míos.

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