¡no puedes evitar lo inevitable!

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A solo unos pocos segundos mi Alfa se quitaba los pantalones con el resto de la ropa y los dejaba a un costado... ¿porque se desnudaba frente a pleno acto del frío?.

Se metió al agua empezando a nadar.

Minutos después Eliot se dió la vuelta y busco mi mirada.

- Quiero que me seas sincera. -lo oí perfectamente, a pesar de la distancia, eso no impedía lo sonoro y ronco que se profundizaba el canto de su voz.

Su cuerpo iba dejando el mar y se acercaba poco a poco al mío.

Su cabello aún mojado, las gotas de su pelo chocaron contra mi piel...

Agarro mi mandíbula con ambas de sus manos, juntando nuestras frentes y me besando mis labios.

-¿ En qué? -solte la estúpida pregunta que espero no haberme arrepentido segundos después.

- ¿Alcanzarás ... A darme una oportunidad...?.

Lo estaba pensando...

Los recuerdos suenan en mi mente, el acto de su amor cuando lo hacíamos, la forma brusca que se instalaba en mi mente. Todo eso se doblegaba a su forma de querer poseer.

No me alcanza que cuando casi todas las mañanas en las que llegaba me tendía con regalos y me llevaba el desayuno a la cama.

Todo eso me confundía, no es que era una caprichosa pero...

- ¿es en serio? -solte de forma brusca su suave contacto de mi piel.

Me enoje, y está vez no será la segunda ni la primera.

Me miró atónito aún con las manos al aire donde estaban posicionadas mis mejillas.

-¿cuando vas a entender? -estaba arta- Te lo repetí una y mil veces - si, fueron mil veces- me cansé, eres un cobarde, un estúpido inmaduro. Te lo repetí tantas veces ...

Su mirada tierna se había convertido en una fría- ¿es así...?

- Es así. - repetí.

Se tocó en cuello de frustración, se lo veía cansado como si yo diera todo está extravagancia y desecharía toda esa bondad de su parte a la pura mierda.

Arrugó sus cejas, más venas resaltando eran fuertes, estaba tratando de no arrancarme la cara del enojo que el mismo propio resentia.

Se volvió a vestir y volvimos a casa.

Corrí al cuarto colocando la mesa sobre los dos pomos de las puertas como traba para que atasque su movimiento y supiera que no lo quería dentro.

El arranque de mi actitud no la justificaba como buena, pero tampoco halagaba a evitar mis prejuicios.

Dejo mi mente levitar, pero no paro de pensar en el porque insiste tanto en el tema del amor ... El ni siquiera es mi tipo, me confunde ...

Las puertas se removían fuertemente, Eliot me estaba buscando, y... me encontró.

- ¡Acaso tendré que tumbar la puerta otra vez para que habrás! -grito haciendo que mi cuerpo temblara también, además de las puertas.

Me quedé acostada llorando, suplicando a la diosa luna que venga por mi y me lleve.

Quizá ... Yo era el problema y es por eso que nunca quise a Eliot ... ¿tengo que obligarme a quererlo para que todo vaya bien?.

En plan ... soy honestá en lo que siento pero madre siempre me decía que me aleje de personas inestables tanto en lo económico como en lo mental.

Ser tan directa cuesta más de lo pensé.

-¡No puedes evitar lo inevitable! -La puerta dejo de sonar y al momento de hablar supe de lo que presentía- tu ... Me amas pero no te das cuenta ...

Yo... ¿lo amaba?.

the alpha posessive Donde viven las historias. Descúbrelo ahora