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Los días pasaron cada cuál a su ritmo, unos aceleraban el contador sin tregua y otros parecían nunca acabar tanto como para las que pronto se casarían como para los que presenciarían la unión. Habían sido muchas las ocasiones en estas dos últimas semanas en las que las chicas habían reñido a sus amigos y familias que querían y pretendían celebrar por todo lo alto y de inmediato la boda sin tener en cuenta que los papeles de la adopción no estaban firmados.
Por otro lado, Noe y Susi junto con Tere no habían cedido ante la idea de no comprar ni tan siquiera unos ramos de flores, después de varias llamadas entre las tres habían conseguido organizar al grupo, entre todos habían decidido hacer de ese día algo mágico y especial entendiendo que la razón que maquillaba el deseo de celebración de ambas chicas también implicaba todo el cansancio acumulado de estos últimos meses, y como la frase que como mantra impulsó al grupo de Whatsapp "Si Mahoma no va a la montaña, la montaña irá a Mahoma", no dudaron en ningún momento en mover cielo y tierra por sus amigas.
Entre Denna y Naiara, que había vuelto a media jornada después de su baja pudiendo así conocer a la chica de la que todo el mundo hablaba, se encargaron de visitar el salón de la ceremonia para poder visualizar la decoración de las sillas, las mesas y la pasarela que cruzarían sus amigas para llegar hasta su lugar ante el notario. Noe y Susi no pararon hasta conseguir llevarse de compras a sus chicas por separado para comprarse algo medianamente formal pero no muy pomposo para el gran día, mientras que Manu, Martin y Ruslana no hacían más que darle vueltas a las distintas canciones que deberían sonar en la entrada y a la salida, y cómo las versionarían.
Alex, Omar y Juanjo, tomándose muy enserio su trabajo reservaron un local y los tíos de Violeta contactaron con varios caterings que les ofrecieron tanto el servicio de entrantes como el de cena y recena al ver que los chicos habían alquilado el local hasta la mañana siguiente con la idea de festejar. Bea y Alba optaron por encargarse de la decoración del local recorriendo miles de tiendas y copisterías, en las cuales habían mandado a imprimir las postales que Natalia había diseñado de recuerdo y que repartirán en cada mesa, y todo en apenas dos días para encontrar los mejores manteles y adornos para llenar la estancia de fotos y recuerdos. Y por último, Samantha y la Mari habían conseguido llevarse a las niñas y a Gavi para vestirlas a juego y además ensayar la parte en la que Lúa le entregaría los anillos a sus madres.
Sin ellas saberlo al despertarse abrazadas aquella mañana, aquel día quedaría grabado en sus memorias dibujando en sus retinas el brillo de quienes se saben cuidadas y queridas.
Pov Denna
Conducía camino a la casa de mi mejor amiga, había salido de casa nada más recibir el mensaje de la Kiki diciéndome que ya estaba en casa de sus hermanos y que por ende Violeta estaba sola, hace unos días hablé con la prometida de mi casi hermana le comenté que quería tener un momento de los nuestros antes de todo ya que conociendo el patio, una vez firmado todo ninguno las dejaría respirar y me respondió asegurando que me avisaría una vez saliese por la puerta aquella mañana del 1 de Marzo.
Aparqué y llamé al telefonillo.
—¿Otra ve' te has dejao las llaves Kiki? -escuché a Violeta contestar haciéndome soltar una carcajada que reconoció al instante.- ¿Denna?
—No piensas abrirle la puerta a tu hermana o qué, que hace frío ja puta -le respondí y automáticamente la puerta del portal se abrió.
—¿Cómo tú por aquí? -me enfrentó al segundo de que la puerta corredera del ascensor me abriese paso hasta el rellano.
