Unos días más tarde volvía a ser Lunes, se avecinaba una semana bastante ajetreada, el viernes tendrían una importante reunión que, si todo salía bien, podrían celebrar ya que les llevaría a uno de los eventos de márketing y publicidad más importantes de Francia.
El finde se había planteado tranquilo, Violeta aprovechó para estar con su familia a la cual no le pasó desapercibido el pequeño cambio de actitud de la pelirroja, por otro lado Chiara había estado mano a mano con su hermano y Ruslana apañando el piso al cual todavía le hacían falta unos muebles.
Todo parecía tranquilo hasta que a media mañana sonó el teléfono de la morena.
Pov Violeta
Chiara se disculpó un momento y salió a responder la llamada, después de unos minutos cuando volvió lo hizo con el rostro pálido.
—¿Qué ha pasado? ¿Todo bien? Estás blanca Kiki, te voy a traer un vaso de agua, siéntate -se lo traje y al beberlo comenzó a llorar.
—¿Te acuerdas de la casa de mis padres del campo, de la que te hablé? -asentí.- Ha salido ardiendo, tenía una fuga de gas, tengo que ir, tengo que firmar unos papeles que no me he enterado muy bien de qué son, ¿me das dos horas?
—Cariño te doy el día entero, es más te llevo yo, no puedes ir conduciendo en este estado ni mucho menos ¿Martin lo sabe?
—Que no Violeta, no te molestes que tenemos mucho trabajo, y que necesito la nota y si falto muchas horas la media me baja
—No te baja si yo no quiero que te baje, y te llevo yo a tí y a tu hermano, vamos -le tomé la mano y fuimos al garaje.
—Martin no sabe nada, no sé si decírselo -dijo una vez sentada en el hueco del copiloto.
—Quieres que vayamos a la tienda de discos y se lo cuentas antes de hacer nada -le propuse.
—Uf, vale -retuvo las lágrimas.
—Conmigo no te tienes por qué esconder, puedes llorar todo lo que necesites ¿lo sabes, no?
Me dio una sonrisa triste empapada en lágrimas que salían sin control de sus ojos y a mí se me partió el corazón al verla. Desde ese momento decidí que iba a hacer todo lo posible y más para que sufriera lo menos posible.
...
Una vez llegaron a la tienda de discos Chiara decidió contarle directamente a Martin lo que acababa de suceder a unos pocos kilómetros de allí, el chico se echó a llorar en el pecho de su hermana y Noe, que trabajaba por las mañanas en la tienda del chico y según ella así se entretenía, los acogió a ambos entre sus brazos mientras Violeta observaba todo desde fuera, sintiendo que estaba invadiendo la privacidad de la familia de la morena.
—¿Nos vamos ya? -preguntó Martin todavía afectado.
—Tengo el coche fuera, cuando digáis salimos -aclaró Violeta.
Ruslana fue quien les sacó de ese momento tan delicado ayudando a cerrar la tienda y recogiendo todo para montarse lo antes posible en el coche.
Pov Chiara
Nos quedaban aproximadamente unos diez minutos para llegar a casa, Violeta conducía concentrada en la carretera dejando de vez en cuando caricias en mi pierna haciéndome ver que estaba ahí aunque me estuviese dando mi espacio, yo se lo agradecía apretando su mano, ese se había convertido en nuestro pequeño lenguaje.
Todo estaba quemado, los bomberos nos dieron mascarillas para protegernos de los gases tóxicos y al entrar de la mano de Martin me quedé en shock, todo estaba completamente comido por el fuego y las pequeñas explosiones.
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Cometas Por El Cielo (Kivi)
FanfictionUna historia de romantiqueo tontorron de las kivi.