Es bueno hablarle un poco a la luna. |© 14

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Travis

Después de que Julietta me llamó no dude en ir a buscarla de inmediato, se notaba que estaba mal por su tono de voz. Me intrigaba saber que le pasó y solo quería poder llegar y ver que estaba bien.

Mientras manejaba intenté llamarla para saber si seguía ahí pero sonaba apagado inquietándome  aún mas.
Llegué a la calle divisando el sector oscuro y  observé una pequeña figura a lo lejos acurrucada en el suelo. Me acerqué un poco mas y la reconocí. Tenía los ojos rojos y sus mejillas húmedas. Salí del auto y fui corriendo donde ella.

Julietta

Vi que un auto se acercó y alguien se bajo corriendo, era Travis.

Me paré y el me abrazo de improviso.

-Estaba tan preocupado - me dijo sin soltarme.

-Gracias por venir -Hablé pasmada por el acto.

-Vamos -Me tomo de la mano y me llevo hacia el auto.

-Llévame a mi departamento por favor -Le dije cuando estábamos en el auto apenas me senté en el copiloto y el ya había conducido unas cuadras. Yo de verdad estaba mal, trataba de reprimir las lágrimas.

-Que paso? -Me miro por un momento y luego siguió mirando hacia la oscura y desolada calle.

-Sólo necesito estar sola, déjame en mi departamento por favor.

-Si no me dices, no te llevaré -Habló serio mientras conducía mientras conducía.

-no estoy para juegos ahora.

-No me dirás?

-No.

-Bueno.

Lo mire extrañada por su repentino cambio pero el seguía conduciendo como si nada. Algo no me calzaba, llevábamos demasiado tiempo en el auto y no conocía esta ruta.

-¿Donde me llevas? -Hablé.

-No querías que te llevara a tu departamento. -Encogió sus hombros.

-¿QUE? -grité -¡Claro que quiero!

-Yo te dije, si no me dices, no te llevaré a tu departamento. No me dijiste, eso significa que no quieres que te lleve-se bufó.

-¿Que mierda? ¡Para el auto! -Vociferé y él se mantuvo plácido. Sin saber que hacer, saqué la mitad de mi cuerpo por la ventana.

-¿Que estas haciendo? -me miro de reojo

-AYUDAAAAA!! AYUDAAA! ME ESTÁN RAPTANDOO! AYUDAA!
grité pero mis intentos fueron estúpidos, no había nadie en la calle.
Un fuerte jalón me dejo en el asiento y de inmediato se cerró la ventana.

-Ridícula -Me dijo Travis conteniendo la risa.

-Para el auto o juro que abro esta puerta y me lanzo a la calle. -Le dije segura.

-Muy tarde, ya llegamos. -Me dijo y aparcó el auto.

Mire a mi alrededor, era como un bosque, estábamos aparcados a un costado de la carretera y había un absoluto silencio.

Me bajé del auto y Travis estaba parado dándome la espalda. Se volteó y se dirigió ami.

-Vamos -Me dijo mientras me tendía su mano.

Yo la tomé y lo seguí, sabía que el no podría hacerme daño, lo sentía. Tampoco servía de mucho decir que no, prefería irme con él que quedarme en este lugar sola.

Caminamos entre los grandes arboles. Sólo la luz de la luna me permitía ver el camino.

Llegamos, dijo Travis aún sosteniendo mi mano. Alcé la mirada de el suelo y me encontré con la vista mas hermosa que mis ojos han presenciado. Habían pocos arboles, era como si hubiesen decidido cortar todos los arboles de ese lugar solamente por que lo restante estaba rodeado de gigantes arboles, estaba el lugar despejado y un pequeño lago situado al medio de el lugar al lado de una enorme roca. Al ver esa roca solo pensé como llegó ahí, era demasiado grande.

Talking to the Moon ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora