Talking to the Moon ©

¿Y si no regresa?| 23

Travis.

Las ganas de ir al baño me despertaron de mi cálido sueño. Abrí los ojos y la oscuridad invadió mi vista. Me senté en la cama y caminé derecho posando mis manos adelante para no chocar con algo. Toque una pared y arrastré mis manos por ella hasta encontrar el interruptor de la luz. Prendí la luz y la habitación se iluminó causando que pestañeara lentamente acomodándome a la luz. Mire extrañado el lugar, pensé que me encontraría con Julietta a mi lado ¿Como llegue aquí? Sólo recuerdo que ella me traería mi chocolate caliente y... oh cierto.
Me dirigí hacia el baño y hice mis necesidades. Lavé mis manos y miré un reloj en la pared que marcaba las 4:07 am. Salí de el baño y fui a la habitación de Julietta. Abrí la puerta cuidadosamente y pude notar como dormía cálidamente abrazando una almohada, parecía un ángel. No pude evitar las ganas de aun que sea sentir su respiración a mi lado. Entré a la habitación de puntillas y me acosté junto a ella rodeándola con mis brazos. Ella respondió el gesto con los ojos cerrados y de giró rodeándome con su brazo derecho. Su respiración en mi cuello era la mejor sensación que pude tener. Le comencé a hacer cariño en su cabello, se que me alejaría al despertar asi que aprovecharé cada minuto de tenerla cerca. Nunca pensé que le correspondería. Ella parece tan dolida pero a la vez tan fuerte. Traté de olvidarla, lo intenté. Cuando conocí a Megan pensé que sería la mejor oportunidad, era hermosa, bailaba hermoso y su sonrisa me cautivaba. Pero nunca me llenó psicológicamente, su actitud ignorante y sin carácter lo ignoraba interponiendo su belleza. Es cierto, la apariencia es lo primero que uno mira, lo primero que te cautiva, pero al final es lo que tiene fecha de caducidad y siempre se puede complementar con tu actitud si lo sabes manejar pero al fin y al cabo, siempre reina la calidad de persona que eres por dentro. Ahora tengo que pensar cómo  terminar todo con Megan, no soy de fierro, se que le dolerá pero yo no quiero perder a Julietta. Trataré de ser sutil con Megan.

Mirando el bello rostro de Julietta en mi cuello, una sonrisa se dibujo en mi rostro y el sueño me consumió.

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Julietta.

Abrí mis ojos por primera vez en el día y me di cuenta que no estaba abrazando a mi almohada, si no a un cuerpo fornido...Travis. Quité mis manos rápidamente de él y el gruñó aún dormido. Me di vuelta dándole la espalda. ¿Como llego aquí?

-Mmh -gruño. Sus brazos me rodearon por atrás causando un escalofrío que recorrió todo mi cuerpo.

-Travis, suéltame -dije susurrando. Dándole palmadas en su brazo.

-Mmh, no. -habló en mi cuello y se aferró mas a mi cuerpo.

Mi celular comenzó a sonar en mi velador. Estiré mi mano para alcanzarlo con aún Travis encaramado ami. Miré la llamada entrante, Dew. Me había olvidado por completo de él.

-Hola desconocida. -habló su voz ronca a penas contesté.

Rodé los ojos- Hola dramático.

-¿Sabes hace cuánto no me hablas?

-¿5 días?

-Exacto, por que te olvidas de mi, siempre tengo que estar llamándote yo para saber de ti, la amistad no funciona así. -habló intentando sonar duro.

Reí por su intento de enojo. -¿Sabes que te quiero? Nunca te olvidaría, tonto. Podríamos hacer algo estos días, he estado ocupada por eso no te he hablado.

-Aún no me dices lo que quiero escuchar.

Suspiré- Lo siento.

Sentí su risa al otro lado de la línea.-Ok, adios, hablamos mas tarde. Te quiero.