—Lucas, ven vamos de aquí, te he dicho varias veces que no puedes jugar aquí—.reprendió Checo con firmeza. Su voz resonó con seriedad mientras observaba la escena entre su hijo y yo. Noté claramente su molestia, evidenciando que la relación entre Checo y yo ha empeorado considerablemente, llegando incluso a un punto en el que siento que me odia mucho más que antes.
Desde que se unió a Red Bull, Checo siempre ha tratado de forjar un vínculo entre nosotros. Sin embargo, en ningún momento he apreciado sus esfuerzos, y tampoco tengo la intención de hacerlo. Mi ego actúa como una barrera infranqueable, impidiéndome abrirme a él y aceptar su cercanía. Aunque Checo ha extendido la mano en señal de amistad, mi orgullo me mantiene distante, incapaz de ceder ante la posibilidad de una conexión genuina.
Con una mueca de tristeza en sus labios y lágrimas en los ojos, el pequeño Lucas me miraba en busca de consuelo. Su expresión conmovió mi corazón, generando un sentimiento de compasión hacia él. En ese momento, mis ojos se posaron en Checo con una mirada intensa y seria, como un reflejo de mi desaprobación ante la situación y mi determinación de proteger y cuidar al pequeño Lucas.
—¿Qué te pasa, Pérez? No le hables así al niño, él no tiene la culpa de nada y además, no estaba molestando a nadie—.expresé con enojo, sin apartar a Lucas de mis brazos.
Al escuchar mis palabras, la expresión de Checo se había vuelto más seria, sus cejas fruncidas denotaban su creciente irritación. Sabía que no tenía por qué meterme en ese asunto, pero al ver al niño en mis brazos, su carita triste y desamparada, no pude contenerme. A pesar de la mirada enfurecida de Checo y sus brazos cruzados, mantuve a Lucas cerca, decidido a protegerlo y mostrar mi apoyo ante cualquier injusticia.
—Actúas como un inmaduro, Max
—.soltó Checo con una seriedad que me hizo estremecer. Sentí un escalofrío recorrer mi cuerpo al escuchar esas palabras, nunca antes había sentido su desaprobación de una manera tan contundente. Era evidente que esta discusión había alcanzado un nivel de tensión nunca experimentado entre nosotros, lo que me llevó a reflexionar sobre mis acciones y su impacto en nuestra relación profesional y personal.—Y déjame decirte, no es asunto tuyo porque no eres nadie para mi hijo—.habló Checo con un tono brusco que me tomó por sorpresa. No sé por qué, pero me dolió el corazón al ver a Checo actuar de esa manera conmigo. Durante estos dos años, él nunca me había hablado así, a pesar de que yo sí había sido un maldito tonto con él.
—Checo, está claro que el niño no quiere ir de aquí, estás siendo tú el inmaduro, no yo—.respondí con firmeza, dejando a Lucas en el suelo y cruzándome de brazos. Ante mis ojos, Checo no estaba demostrando ser un buen padre, y sentí la necesidad de hacerle frente y proteger el bienestar del niño.
Ante mi respuesta, Checo suspiró con frustración antes de levantar a su hijo en sus brazos. El pequeño, al ser alzado, se aferró a su padre y me miró con una expresión de pena en sus ojos. La escena me hizo reflexionar sobre el impacto de nuestras acciones en los demás, y sentí un atisbo de arrepentimiento por haber contribuido a la tensión en la situación familiar de Checo.
—Es mi hijo y si yo digo que no puede estar aquí, es un no y ya, no te metas en mi vida privada, Emilian—.expresó Checo con firmeza. Otra vez, al mencionar que era su hijo, sentí una punzada de molestia. No podía evitar sentir rabia cada vez que recordaba que Checo era un hombre casado. La complicada situación familiar me hacía cuestionarme mis propios sentimientos hacia él.
Perdido en mis pensamientos, no me di cuenta de que Checo se había ido después de dedicarme unas palabras con un tono brusco. Me quedé ahí parado, con la mente llena de confusiones y emociones encontradas. Lo único que resonaba en mi mente era un mantra repetitivo: "Lo odio, lo odio más que a nadie". La intensidad de mis sentimientos me abrumaba, y me dejaba preguntándome qué había desencadenado esta furia hacia él.
—Maldito Pérez...—. Murmuré apretando el puño.
Vi a Carlos acercarse a mí con una sonrisa, probablemente para sugerir que volviéramos juntos a casa en mi coche. A pesar de mi enojo y las ganas de golpear a Checo, actué como si nada, lo saludé de manera normal y sin decir mucho. Ambos nos sentamos en el coche en un silencio incómodo, y empecé a conducir sin mencionar lo ocurrido. La tensión del momento llenaba el interior del vehículo, dejando entrever la complejidad de las emociones que atravesaba.
—Oye, Carlos, ¿tú sabías que Checo estaba casado?—. pregunté con voz suave, manteniendo mi mirada fija en la carretera. La pregunta salió casi como un susurro, cargada de una mezcla de curiosidad y resentimiento hacia Checo.
Carlos me miró mientras tomaba agua de una botella y asintió sin decir más. Notando su reacción, decidí esperar a que él decidiera compartir más información sobre el tema. Sin embargo, al no recibir ninguna respuesta adicional, hice un gesto con la mano, indicándole que continuara o que hablara más sobre el asunto si quería.
—Checo estaba casado con una mujer llamada Carola. Todo parecía estar bien, pero hace un año se divorciaron, y Checo obtuvo la custodia de su hijo. Aunque Lucas aún ve a su madre de vez en cuando.
La mente se quedó en blanco, como si las palabras se hubieran desvanecido en el aire, dejando solo un eco vacío en mi mente. Un sutil sentimiento de pena se apoderó de mí por un breve instante al pensar en Checo, imaginando las dificultades que podría haber enfrentado como padre soltero.
Sin embargo, en medio de esa sensación de compasión, una chispa de intriga se encendió dentro de mí, provocando una curiosidad insaciable. ¿Qué habría llevado a Checo a convertirse en un padre soltero? ¿Cuál era la historia detrás de su divorcio? Mis pensamientos se agolparon en mi mente, alimentando mi deseo de conocer más, de desentrañar el misterio que rodeaba a este hombre enigmático.
Con un gesto de asentimiento, dejé que la curiosidad guiara mis pensamientos, preparándome para descubrir la verdad detrás de su historia personal....
✨🫶🏼
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Meant to be [Chestappen]
FanfictionMax odiaba a su compañero de equipo, Sergio Perez con todo su ser, simplemente no lo podia soportar. Pero lo que Max no se esperaba era que el mexicano era la persona indicada para él. Estaban destinados a estar juntos. Fanfic Pareja principal: Che...