Capitulo 24

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La noticia de que Kelly estaría en Baku para un evento de modelo me llenó de sudor frío y ansiedad. Me sentí abrumado por el dilema ético y emocional en el que me encontraba. Aunque seguía siendo mi novia, había perdido interés en ella debido a problemas pasados, y mi corazón ahora pertenecía a Checo.

El temor a cómo reaccionaría Checo ante la presencia de Kelly me atormentaba. Había prometido pasar tiempo a solas con él en Baku, y la idea de decepcionarlo o lastimarlo me aterraba. Sin embargo, también temía herir a Kelly y enfrentar las consecuencias de mis decisiones.

Me encontraba en una encrucijada emocional, atrapado entre el deseo de seguir mi corazón y el deber de enfrentar las responsabilidades y compromisos de una relación anterior. Sabía que debía ser honesto con Checo sobre la situación, pero me angustiaba pensar en cómo afectaría nuestra relación recién floreciente.

Con el corazón lleno de incertidumbre y ansiedad, me di cuenta de que debía afrontar esta situación con valentía y sinceridad. A pesar del miedo a las posibles consecuencias, sabía que la honestidad era la única opción para mantener la confianza y el respeto en nuestra relación.

—Che- —. Observando a Checo pacíficamente dormido con su cabeza descansando en mi hombro, me invadió una sensación de serenidad y ternura. Decidí no interrumpir su sueño, ya que seguramente necesitaba descansar después de lo que probablemente había sido una noche agitada.

Con un suspiro de alivio, dejé de lado mis preocupaciones por un momento y me permití disfrutar de este momento de tranquilidad compartida. Con una sonrisa suave en los labios, acaricié suavemente su rostro con mi pulgar, sintiendo el calor reconfortante de su piel bajo mi tacto.

No quería perturbar su sueño, así que me quedé allí, sintiendo el latido rítmico de su respiración y la calma que irradiaba su presencia. En silencio, me prometí a mí mismo ser un apoyo constante y cariñoso para él, sin importar los desafíos que enfrentáramos juntos.

Con Checo dormido a mi lado, me sentí agradecido por este momento de paz y conexión, y me prometí a mí mismo hacer todo lo posible para proteger y cuidar este amor que habíamos encontrado el uno en el otro.

Observar a Lucas jugar felizmente, ocasionalmente mirándome y sonriéndome, llenaba mi corazón de calidez y alegría. Era evidente que Checo había inculcado en su hijo valores de respeto y amabilidad, y su comportamiento ejemplar reflejaba la dedicación y el amor de Checo como padre.

Cada sonrisa de Lucas era un recordatorio del vínculo especial que compartíamos como familia, y me sentí profundamente agradecido de tener la oportunidad de formar parte de sus vidas. A medida que lo observaba jugar con tanta inocencia y alegría, mi corazón se llenaba de un amor incondicional y una sensación de pertenencia.

Con cada sonrisa y gesto cariñoso de Lucas, me recordaba la belleza y la alegría de la vida en familia, y me comprometía a hacer todo lo posible para mantener y fortalecer nuestro vínculo familiar en los días venideros.

Con delicadeza, moví suavemente a Checo mientras nuestras horas de viaje llegaban a su fin y finalmente llegamos a Baku. Con una sonrisa suave, le informé con ternura: Checo, ya hemos llegado. Puedes descansar cuando lleguemos al hotel.

Vi cómo Checo asentía, aún adormilado, mientras comenzaba a despertarse lentamente del sueño. Me sentí aliviado de verlo despertar con calma, sabiendo que pronto podríamos relajarnos y disfrutar de nuestro tiempo juntos en el hotel después de un largo viaje.

Con pasos cuidadosos, nos preparamos para salir del avión y dirigirnos hacia nuestro destino final. Mientras nos dirigíamos hacia el hotel, anticipaba con ansias los momentos de tranquilidad y cercanía que compartiríamos una vez que llegáramos a nuestro destino.

Meant to be [Chestappen]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora