Capitulo 4

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Repasé la plancha por mi pelo por última vez antes de volver a chequear que estaba perfecta para el inicio de clase. Me miré seriamente al espejo.

-Este es tu último año en el instituto y tiene que ser el mejor, el inolvidable.- sonreí al final.
Realmente estaba muy animada por no decir que ansiaba empezar las clases. Salí del baño, cogí mis cosas y me dirigí a la entrada de mi casa.

-Buenos días mi amor- dijo una voz muy conocida. Se acercó a las escaleras.

-Buenos días mi niño- me detuve en los últimos escalones para saltar sobre su espalda.

- En la vida os he visto tan animados para ir a clase- comentó mi madre viendonos.

- Es que es nuestro último año.- dijo Carlos sonriente mientras que yo lo abrazaba fuertemente.

-Mamá no nos puedes culpar por estar ilusionados, por fin estamos en segundo de bachiller.- solté una risita tonta al final bajandome de la espalda de mi amigo.

-Que rápido pasa el tiempo, mis niños se hacen mayores.- se acercó a nosotros pellizcando nuestras mejillas. Entonces comenzó a arreglar  nuestra ropa, el cuello de la camisa de Carlos, mi falda, etc.

-Mamá que no llegamos.- Reí al ver que no nos soltaba.

- Venga, iros.- levantó las manos rindiendose. Salimos de mi casa y nos dirigimos al coche de Carlos. Al montarme me aseguré de que llevarala la "L" de conductor novato.

-Oye Carlos, ¿cómo que hoy no vamos en moto?- pregunté poniéndome el cinturón.

-Porque llevas falda y se te va a congelar el chichi- dijo soltando una carcajada.

-Ja Ja en serio-

-Puede que le haya dado un buen golpe y esté castigado.- se encogió de hombros.

-¿Te caiste?- lo miré desconfiada.

-Intenté hacer un derrape, no me salió, la moto se fue a tomar por culo pero a mi no me ha pasado nada así que no me quejo.- dijo deteniendose en un semáforo.

-Y todo eso por ligar ¿verdad?- lo miré decepcionada.

-Pues no la verdad, fue por ser gilipollas básicamente.- me miró divertido. - Y porque si lo hacía Raúl me daba 100 pavos.- reí - me ganó la avaricia.-

- Si es que a veces haces unas tonterías- comenté. -Por cierto, he hablado con Val.-

-¿Y qué te ha dicho? qué estaba con su primo ¿no?- asentí - Claro que si joder, si no fuera porque conocemos a sus primos- Carlos fue quien vio a Valeria con ese tío.

-Dice que ya no es lo mismo con Rodri y que hoy hablaría con él-

-Para Rodrigo ella lo es todo.- dijo seriamente - Lo va a pasar muy mal como terminen mal.- asentí nuevamente.

-Sería una gran putada para él, pero si la cosa no funciona deben terminar por el bien de los dos.- saqué un bollito de mi mochila.

-Tienes razón, por cierto dicen que hay un profesor nuevo.- llegamos al parking del instituto.

-¿En serio?- dije masticando. -No nos dijo nada Julio cuando nos escribió para que no llegaramos tarde.- Julio había sido nuestro profesor desde Tercero de secundaria.

- Tal vez sea mentira, no se.- me quitó el resto del bolllito. -Dime que tienes otro- suplicó bajandose del coche.

- Si, pero es para después.-

-Hola parejita-se acercó Raúl desganado.

-¿Es verdad lo del nuevo profe?- le pregunté.

- Eso dicen las de primero de bachillerato, así que a saber- dijo rodeandome los hombros con su brazo. - Pero creo que hay otro chisme más interesante, Rodrigo está aquí.- señaló a la parte trasera del edificio.
Miré a Carlos, ambos asentimos y nos acercamos al lugar pero manteniendo la distancia.

Alexander El Profesor |EN EDICIÓN|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora