-Y-yo no se que he hecho... Mal-dijo María entrecortadamente.
Estábamos rodeando nuestro banco del patio porque Maria lloraba sin parar.
Al final, Kevin cortó con ella...
-No pasa nada, tu desahogate -dijo Sam consolandola.
-Ayer quedamos para cenar, pero justo en el restaurante, me dice de repente que rompe conmigo -dijo llorando más fuerte.
-¿Sin ninguna explicación? -Dijo Rosa perpleja.
Negó limpiando sus mejillas empapadas de lágrimas.
-¿No crees que ahora estás mejor?-Soltó Carlos.
-¿A que te refieres? -Preguntó Valeria.
-Ayer Irene te avisó, digo,es mejor que todo se haya terminado antes de que hubieras hecho alguna tontería- dijo demasiado bien para ser él.
Lo miré perpleja.
"Okeey, ¿Quién es este?¡ Han cambiado a mi Carlos por otro super inteligente! "
-¡YO NO CREO NADA DE ESA MALDITA!-Gritó Maria poniéndose de pie alterada.
-Relájate -dije agarrandola de los hombros.
-¡NO QUIERO!-Protestó-¿¡ACASO NO RECUERDAS LO QUE NOS HIZO, LO QUE TE HIZO ELLA?!-me preguntó buscando algo de razón en mis ojos.
-Da igual lo que hiciera en su momento, ahora lo importante es que debes relajarte, Carlos no te dijo nada malo, no reacciones de tal forma -dije serenamente.
-No es justo que creáis a esa -dijo fulminandome con la mirada.
-¿Tu no has madurado aún o es que tu mentalidad es de una niña chica?, así que será mejor que te relajes antes de que yo me enoja ¿Okey?-dije yo en su mismo tono.
Todos permanecieron en silencio, saben que cuando digo algo en ese tono es mejor hacerme caso.
Puedo llegar a ser un "poquitín" gritona.
María quitó mis manos de sus hombros y se marchó.
Cerré los ojos y suspiré.
-Calmate-dijo Thomas tocando mi hombro izquierdo.
-Elizabeth ¿Por qué confías en Irene? -Preguntó Valeria con los brazos cruzados.
-No confío pero se de lo que habla -dije levantándo la mirada.
Permaneció en silencio, reflexionando lo que dije.
-¿Cómo sabes de lo que habla? -Preguntó Thomas.
-Irene sabe lo que dice -
-Eres ingenua -dijo Thomas frunciendo el ceño.
-Tal vez pero yo se lo que hago -dije cruzandome de brazos.
-no lo sabes todo ¿lo sabías?-siguió Thomas.
-Lo sé pero soy capaz de enterarme de todo sin que te des cuenta -protesté.
Thomas me miró confundido.
-Eres rara-dijo finalmente Valeria.
-Gracias - dije haciéndo una reverencia.
Giré sobre mis pasos y me fui de allí.
Caminaba a paso rápido por los enormes pasillos.
Me dolió lo que dijo Valeria.
Dolió... Mucho.
Sé que tengo cosas de adultas y otras de niña pequeña.
Muchas veces puedo llegar a ser una persona super seria y otras ser la más loca.Muchos me han llamado rara pero nunca me importó.
Que Valeria me dijera eso, de verdad,no me lo esperaba.
ESTÁS LEYENDO
Alexander El Profesor |EN EDICIÓN|
Teen FictionEn un determinado punto de nuestra existencia, toda nuestra vida pasa delante de nuestros ojos, a veces provocado por un estímulo externo, otras por situaciones que se nos escapan de nuestro control, pero la unificación de los mismos tiene el poder...