Capítulo 38

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-Quiero saber todo, exactamente todo lo que te está pasando con Alex-dijo mi madre sentándose sobre mi cama.
Al salir del instituto, fui directamente a casa porque mi linda madre quería "conversar " conmigo, aunque yo lo consideraba que tan sólo quería enterarse del chisme.

-¿Todo?- Pregunté por si quería rajarse un poco.

-Todo- afirmó con rudeza.

-Pues yo le conocí en las murallas -dije tumbandome para buscar un punto fijo en el techo.

-¿Cuándo?-preguntó tumbandose al lado mía.

-Eso, túmbate que la historia es larga -dije comenzando a narrar casi todo lo que me ocurrió con Alex, desde que lo conocí gracias a mi maldito dibujo hasta la discusión que tuve en su coche volviendo de la fiesta, ahorrandome el beso y la pelea de Alex por supuesto, no quería que le diera un paro cardíaco.

-¿siempre te lo encontrabas de casualidad? -Preguntó jugando con mi pelo.

-En el instituto no siempre, a veces, ocurría algo y me llamaba con alguien, o algún profesor me enviaba a buscarlo¿sabes?-

-¿No quedaste con él fuera del instituto? -dijo preocupándose.

-No, siempre nos hemos encontrado por casualidad, al menos por mi parte-dije jugando con un boli que estaba en el escritorio.

-¿Sabes por qué te protege?-preguntó nuevamente.

-Espera un momento -dije incorporandome -¿Cómo sabes eso?-

"esta me ha escuchado en la enfermería "

-Elizabeth, es evidente que él siente algo por ti, sin embargo, ¿tu sientes algo por él? -dijo poniéndose a mi altura.

-mamá, él tiene novia, no puede sentir algo por mi-

-Cariño, a veces las personas, al principio de una bonita historia no saben con seguridad lo que sienten y pueden cometer fallos con otras personas, sin embargo, después se dan cuenta de que esos fallos les ayudaron a descubrir sus verdaderos sentimientos y por eso mismo, debes de tener paciencia, cualquier persona no te protegería si no es de corazón-dijo con una mirada dulce.

-¿Qué haría yo sin ti?-dije a la vez que resbalaban por mi rostro pequeñas lágrimas de emoción.

-Tu estas extraviada, pérdida por este mundo de locos, no sabes del amor y ahora que se manifiesta de la peor forma, no sabes como seguir y por eso mismo, piensas que lo sabes todo por leer unos cuantos libros-hizo una pausa para secar mis lágrimas -Elizabeth, deja de pensar y empieza a sentir, pero no hagas estupideces por amor, simplemente has lo que tengas que hacer siendo tu misma.-terminó sonriendo levemente y aferrandome en un fuerte abrazo.

-Gracias mama- dije sabiendo lo que iba a hacer.

-Por cierto, estas enamorada de él y-dijo pero fue interrumpida por mi.

-El discurso estaba chulo como estaba ¿vale?-dije sonriendo.

-Admitelo -dijo separándose de mi.

-No puedo, según tu, una persona no está segura de sus sentimientos y total-dije riéndome.

-Pero me refería a él -Dijo en un puchero.

-Es apicable para los dos-dijo cogiendo mi móvil.

Abrí WhatsApp.

Marta: nena, tengo que ir a por el cargador del móvil que se lo deje a Ester la otra vez ¿te vienes?.
Elizabeth: ¿Tengo que andar mucho?.

Soy floja, lo sé.

Marta: no, casi nada.
Elizabeth :entonces si voy.

Apagué el móvil y le comenté a mi madre sobre los nuevos planes que tenía para esta tarde.

Alexander El Profesor |EN EDICIÓN|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora