En un determinado punto de nuestra existencia, toda nuestra vida pasa delante de nuestros ojos, a veces provocado por un estímulo externo, otras por situaciones que se nos escapan de nuestro control, pero la unificación de los mismos tiene el poder...
Se podría decir que este viaje estaba resultando ser uno de los más extraños vividos en estos pocos años de vida que poseo.
Alex apareció en mi vida como un huracán que arrasa todo a su paso,destruyendo mis esquemas y dejandome al descubierto sin saber que hacer,sin saber como reaccionar. Tras su repentina confesión,no sabía que pensar, si sentir lástima o fingir que nada pasaba, pero eso último sería mentira para mi.
Porque si pasaba.
Alex se ha vuelto una persona muy importante para mi, hemos pasado tantas cosas juntos que ni yo misma se como han podido pasar. Y si me hubieran contado que me pasaría todas esas cosas con mi sexy profesor, me hubiera reído hasta caer al suelo y tras ese ataque de risa golpearia a esa persona en la cabeza por decir semejante estupidez que probablemente sería Carlos. Y ahora mirenme, perdidamente enamorada de un príncipe azul disfrazado de profesor y con novia para mejorarlo más.
"Cada vez vas mejor, Eli"
Gracias conciencia, se agradece tu maldito comentario sobre mi penosa vida de adolescente.
Ahora me encontraba mirando el gran paisaje helado, sumergida en mis profundos pensamientos.
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-¡Eli!-Voltee para ver a Carlos acercarse dando brincos por la nieve mientras que Alex se acercaba más lentamente.
-¿Te apetece inspeccionar la zona?-dijo el primero estrechandome una mano para que lo siguiera. Yo la agarré levantando mi trasero de la fría nieve así como el resto de mi cuerpo.
-Vayamos por la cascada-exclamé comenzando a caminar.
-Podría ser peligroso-
Ambos volteamos la cabeza para observar a Alex con detenimiento.
-pero podría ser divertido -protestó Carlos como tanta veces había hecho en su corta vida.
-Es una cascada congelada ,podríamos resbalar y caer o incluso puede estar descongelandose y nosotros sin tener la menor idea eso.-dijo Alex defendiendo su anterior comentario.
En cierto modo tenia razón, pero entonces ,teníamos el cerebro medio congelado y decidimos pasar de él.
Carlos se encogió de hombros y comenzó a caminar hacia la enorme cascada que se nos presentaba.
-Alex, esto solo nos pasará una vez en la vida, vayamos a divertirnos-dije intentando animarle.
-Es demasiado peligroso,no puedo dejarte ir-dijo agarrando mi muñeca derecha.
