Cap 6: Señales en el cielo

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En el cielo se puede notar un hermoso amanecer, en este barco siempre nos levantamos temprano y lo bueno de eso es que podemos apreciar el paisaje.
Me gustaría decir que soy de las primeras en apreciarlo pero no, al menos hoy no.

Pese a que Zuko si fue a dormir, nada le impidió levantarse mucho más temprano de lo usual, tanto así que fue el primero en despertar, por mucho diría yo.

Actualmente me encuentro observando el entrenamiento del príncipe junto a mi tío, aunque según esté último no lo esta haciendo bien.

-No, no es así. El poder de los maestros fuego viene de la respiración, no de los músculos. La respiración se transforma en energía que luego se irá extendiendo por todo tu cuerpo transformándose en fuego.

Hizo una breve demostración de lo dicho, algo que claramente molestó a Zuko, pienso que su molestia es por el apuro de mejorar, si sigue siendo así de impaciente con todo en algún momento se perderá de algo importante.

Por otro lado, no imaginé que la respiración fuera tan clave para la energía del fuego control.
En mi caso uso la respiración para calmarme, de esa manera puedo moverme más libremente y usar aire control con más fluidez aunque solo sea con las manos.

¿Quizá pueda usar un poco de esta información con mi elemento?.
De todas formas no puedo usarlo por ahora, me expondría demasiado.

Zuko y su tío están teniendo una discusión ahora mismo, el motivo principal es que no puede avanzar en su entrenamiento precisamente porque no puede hacer bien este ejercicio.

—Intentalo de nuevo.

El príncipe lo miró con rabia, de un solo movimiento se dió la vuelta para atacar con su elemento a uno de los soldados que estaba ayudándolo en su entrenamiento, logrando así que este cayera hacia atrás.

—¡Contrólate, Zuko!.

Le grite con obvio enojo a la par que iba a ayudar al guerrero a levantarse.
Sé que en un entrenamiento a veces las lesiones son inevitables, pero ni siquiera había dado inicio a la lección, simplemente actuó por molestia.

—¿Te encuentras bien?.

Una vez de pie, este se paró al lado mio y casi pude sentir su sonrisa tras la máscara.

—Claro que si, no se preocupe por eso.

¡Mierda! Otra vez preocupándome por cosas triviales.

Me alejé unos pasos soltando una risa incómoda por la situación.
Debo comenzar a disciplinarme de algún modo, incluso llamé al príncipe enojón por su nombre, había quedado en decirle "príncipe Zuko" para guardar distancia.

—Los sabios dicen que el Avatar es el último maestro aire, hoy ya debe tener más de 100 años.

Miré en la dirección de ambos familiares mientras escuchaba la conversación.
Eso es mentira, aunque para ser justos ellos piensan que los últimos nómadas murieron hace 5 años y ningún Avatar se presentó en la descendencia de ellos.

Incluso así, yo soy de sangre mixta.
Mi madre y mi padre, tierra y aire, esa es parte de mi identidad.

—¡Ha tenido un siglo para lograr dominar los cuatro elementos! ¡Yo necesito más para vencerlo! ¡Tú vas a enseñarme las series avanzadas!.

No me gusta ese tono de voz suyo, pero no puedo intervenir, mi tío siempre se ha encargado de ponerlo al margen, aunque si se le llega a pasar la mano juro que lo lanzo del barco.

—De acuerdo, pero antes de todo eso terminaré mi pato asado.

Lo miré con incredulidad, creo que incluso yo me sentiría frustrada con esa reacción considerando la desesperación, pero qué se puede hacer, así es mi tío.

La misión secreta-ZukoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora