Familia Halcón

36

Giulietta estaba en su cuarto haciendo su tarea cuando su celular comenzó a sonar, se emocionó al ver el nombre del contacto y contestó porque era videollamada.

-¡Hola Isaac!- saludó emocionado.
-¡Hola bonita!- devolvió el saludo Isaac-. Ya extrañaba verte.
-Yo también ya extrañaba verte.

Ambos estuvieron hablando de muchos temas desde la última vez que hablaron, uno de esos temas fue el embarazo de Joaquín y la emoción no se podía guardar, ese bebé iba a llegar a una bonita familia. Isaac a través de la pantalla miraba a Giulietta muy enamorado, pues era la joven más hermosa que había conocido.

-Oye, te mensajeo al rato porque tengo que terminar mi tarea- dijo Giulietta.
-Claro, bonita- dijo Oscar y le mandó un beso-. Te mando un besito.
-Yo te mando otro.

Colgaron, Isaac se quedó triste porque realmente estaba comenzando a enamorarse de Giulietta y más tristeza era saber que la distancia era lo que los separaba.

-Hijo, necesitamos hablar contigo- dijo el papá de Isaac.

Giulietta ya había terminado su tarea y bajó un rato, allí estaba Joaquín y se acercó a abrazarlo.

-Hola mi niña- saludó Joaquín.
-Hola papi- dijo Giulietta y acarició el vientre de su papá-. ¿Cómo está mi hermanito o hermanita?
-Todo está muy bien, aunque ya estoy empezando a sentir náuseas. Creo que con este bebé no tendré muchos malestares porque con ustedes tuve bastantes.
-¿Tan tremendos éramos?

Ambos rieron y Giulietta se fue a la cocina por una manzana.

Después de comer, Joaquín estaba acostado en su cama leyendo un libro y en eso entraron sus tres hijos quienes se acostaron junto a él, sonrió al ver que acariciaban su vientre.

-Nunca pensé que ahora ustedes tres comenzaran a vivir esta etapa de hermanos mayores- dijo Joaquín.
-Ay, siempre habíamos querido tener un hermano más pequeño y cómo no lo vamos a amar- dijo Sebastián dándole un beso a su vientre.
-Ay, nosotros también queremos darle un beso a nuestro hermanito- dijeron Ramiro y Giulietta.

Joaquín reía por las cosquillas que le provocaban sus hijos, pero también era algo tierno. Emilio llegaba de trabajar y al entrar al cuarto vio esa hermosa escena.

-Los cuatro amores de mi vida juntos y muy pronto serán cinco- dijo Emilio y los abrazó a todos cuando se acostó.

Los Osorio Bondoni sin duda eran una bonita familia, Emilio y Joaquín nunca imaginaron que después de ese reencuentro en LCDLF se casarían y formaran su propia familia.