diescisiete.

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GB POV

Me senté en el sillón del antro para recuperar el equilibrio.

—¿Qué pasó, pa? —preguntó Junior—. Hasta ahí aguantaste.

—Ya tomamos un vergo —respondí asqueado, mientras Junior reía.

—¿Por qué no trajiste a tu morra?

—Estamos peleados, wey.

—Pues hubieras aprovechado —palmeó mi espalda—. Mira nada más lo que hay —señaló a las chicas en nuestra mesa.

Negué.

—Nada más nos peleamos pero pues todavía la quiero.

Junior asintió sarcástico.

—¡De verdad! —dije divertido—. Es más, le voy a marcar, nos arreglamos o nos arreglamos.

—Márcale y le cantamos.

Reí y asentí. Abrí WhatsApp y sentí como si un balde de agua fría cayera sobre mí cuando vi el mensaje de mi mamá.

"Mi amor, recién me acordé, ya también felicité a Mar. Felices 5 años juntos, me encanta verte feliz junto a una mujer que te valora tanto como tú a ella. Los quiero!"
7:02 p.m

—¡Puta madre! —me quejé— ¿Qué día es, wey?

Junior me mostró la pantalla de su celular para que viera la fecha.

—Mi aniversario —dije asustado.

—¿Qué? ¿Cuándo es?

—Ya fue, se está terminando.

—No mames.

—Llévame rápido, a ver si la alcanzo.

Junior y yo salimos del antro y él manejó lo más rápido que pudo para que llegara a tiempo.

—¿Y que no le vas a llevar nada?

—Primero deja ver si sigue en la casa o ya se fue —respondí nervioso.

Llegué y suspiré aliviado al ver a Mar acostada.

"Mi niña", pensé mientras acariciaba su mejilla.

Bajé para ver lo que había preparado, toda la mesa estaba adornada y la sala llena de flores. También había muchas notas donde decía cuánto me quería.

"Porque si tuviera que renunciar de nuevo a todo con tal de que tú obtengas todo, lo haría"

Sonreí al leerlo. Sabía lo difícil que había sido para ella dejar nuestra ciudad y cambiar todo su entorno solo para venir aquí y ayudarme con mi carrera.

Sabía de las noches que se había desvelado hasta que terminara de componer o grabar.

Sonreí al recordar cuando se sacrificaba a acompañarme aunque tenía mucha tarea y después se desvelaba haciéndola.

Me pasé de verga, pensé mientras negaba con la cabeza.

fendi;gabito ballesterosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora