Entre Informes y Sonrisas: El Destino Laboral de Dos Corazones

Capítulo 17

La noche avanzaba tranquilamente mientras Sarah y yo nos relajábamos en el sofá, viendo una película de acción y disfrutando de un tazón de palomitas. Todo parecía calmado y pacífico, hasta que noté que Sarah estaba particularmente arreglada para una noche de sábado en casa.

—¿Dónde te crees que vas, princesa? —bromeé, lanzándole un piropo con una sonrisa.

Sarah giró para mirarme con una expresión traviesa en el rostro.

—Oh, solo a una cena con la familia de Alejandro —respondió casualmente, como si fuera la cosa más natural del mundo.

Me quedé boquiabierta por un momento, tratando de procesar la información. ¿Una cena con la familia de Alejandro? ¿Ya? Me pareció extraño, considerando que apenas llevaban una semana juntos.

—¿En serio? —pregunté, incapaz de ocultar mi sorpresa—. Pero ¿no es un poco pronto para eso?

Sarah se encogió de hombros con indiferencia.

—Tal vez, pero Alejandro quería que los conociera y parecía importante para él, así que decidí aceptar la invitación —explicó, su tono revelando una mezcla de emoción y nerviosismo.

Intenté ocultar mi preocupación por mi amiga, pero no pude evitar preguntar.

—¿Estás segura de que quieres hacer esto? Quiero decir, es solo el comienzo de su relación y... bueno, no quiero que te presiones demasiado pronto.

Sarah sonrió tranquilizadora y me dio un suave golpecito en la rodilla.

—Gracias por preocuparte, Emily, pero estoy bien. Alejandro y yo nos llevamos muy bien y quiero darle una oportunidad a esto. Además, me gusta la idea de conocer a su familia, así que ¿por qué no?

Asentí con una sonrisa, aunque todavía sentía una pequeña punzada de preocupación en el fondo de mi mente. Sarah era una adulta, capaz de tomar sus propias decisiones, pero como su amiga, no podía evitar preocuparme por ella.

—Bueno, en ese caso, te deseo la mejor de las suertes. Y si necesitas cualquier cosa, no dudes en llamarme —dije, con una sonrisa genuina.

Sarah me dio un abrazo rápido antes de salir por la puerta, dejándome sola en el apartamento. Mientras me acomodaba de nuevo en el sofá para continuar viendo la película, no pude evitar preguntarme qué depararía el futuro para Sarah y Alejandro, y si su relación sería tan perfecta como parecía en ese momento.