Capítulo 25

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Agradecida por la compañía de Alex durante la noche, salimos del lugar y nos encontramos con una horda de periodistas, ansiosos por capturar cualquier detalle del evento en sus cámaras y micrófonos. Nos abrimos paso entre la multitud, esquivando las preguntas y los flashes mientras nos dirigíamos hacia la salida.

Una vez fuera del alcance de los periodistas, nos sumergimos en un silencio cómodo mientras caminábamos hacia el automóvil de Alex. La atmósfera tranquila estaba cargada de emociones después del evento, y yo no podía evitar pensar en todo lo que había sucedido esa noche.

Recordé a Laura mi antigua compañera de la secundaria, cuya sorprendente revelación había dejado a todos boquiabiertos. Aunque no tuve la oportunidad de felicitarla por segunda vez, su anuncio seguía resonando en mi mente, recordándome la importancia de los lazos que formamos en el pasado.

Mientras caminábamos hacia el automóvil, me encontré agradecida por la presencia de Alex a mi lado. Había sido mi apoyo durante toda la noche, compartiendo risas y conversaciones que habían hecho que el evento fuera aún más memorable.

—¡Vaya, parece que los medios están muy interesados en el evento de esta noche! —comenté, tratando de mantener la calma mientras caminábamos hacia el automóvil.

Alex asintió con una sonrisa, mostrando su acostumbrada calma ante la atención de los medios.

—Sí, parece que han venido en gran número. Afortunadamente, pudimos salir sin problemas —respondió, abriendo la puerta del auto para que pudiera entrar.

- ¿Qué opinas de todo lo que dijo Laura? - pregunté, tratando de romper el silencio mientras nos desplazábamos por las calles iluminadas de la ciudad.

-Fue toda una sorpresa - asintió Alex desde el asiento del conductor. - Parece que este mundo empresarial está lleno de giros inesperados.

Me sorprendió mucho. ¡Quién iba a pensar que estaría comprometida con un hombre sumamente importante y una empresa que era rival con la de mi jefe!

Me quedé pensativa mientras observaba el paisaje nocturno pasar por la ventana del auto. La revelación de Laura había dejado un resquicio de incertidumbre en mi mente. ¿Qué significaba esto para Alex y su empresa? ¿Cómo afectaría a nuestra relación profesional?

A medida que llegábamos a mi apartamento, la conversación se desvió hacia temas más ligeros. Hablamos de nuestras impresiones sobre el evento, de las personas que habíamos conocido y de las extravagancias de la vida social empresarial.

Al detenerse el auto frente a mi edificio, Alex se giró hacia mí, su mirada intensa reflejando una mezcla de emociones. De repente, su mano se deslizó detrás de mi nuca, atrayéndome hacia él en un gesto sorpresivo. Mi corazón dio un vuelco cuando sus labios encontraron los míos en un beso inesperado.

Quedé aturdida por un momento, mis pensamientos se entrelazaron en un torbellino de confusión y sorpresa. ¿Qué significaba este beso? ¿Era solo un gesto impulsivo o algo más profundo?

El beso de Alex me dejó sin aliento, mi corazón latía con fuerza en mi pecho mientras procesaba lo que acababa de suceder. Me quedé allí, mirándolo con sorpresa, mientras intentaba encontrar las palabras adecuadas para responder.

- ¿Qué... qué fue eso? - pregunté, mi voz apenas un susurro mientras intentaba recuperar el aliento.

Alex me miró con intensidad, sus ojos brillando con una mezcla de emoción y determinación.

-Lo siento, Emily. No pude contenerme más - admitió, su voz suave y llena de sinceridad.

Me sentí abrumada por la intensidad del momento, pero al mismo tiempo, una oleada de emoción recorrió mi cuerpo. Había algo en ese beso que me hacía sentir viva, y una parte de mí ansiaba más.

-No tienes que disculparte - respondí finalmente, mi voz temblorosa pero firme. - Fue... inesperado, pero... no puedo decir que lo lamente.

Una sonrisa juguetona se extendió por los labios de Alex, iluminando su rostro con un brillo contagioso.

-Me alegro de escuchar eso - dijo, su tono lleno de alivio.

Nos quedamos allí por un momento, nuestros ojos encontrándose en un silencio cargado de significado. Había un magnetismo entre nosotros, una atracción palpable que parecía crecer con cada segundo que pasaba.

Finalmente, Alex rompió el silencio, su voz suave pero llena de determinación.

-Emily, sé que esto es repentino, pero... no puedo ignorar lo que siento por ti. Eres increíble, y desde el momento en que te conocí, supe que eras especial. No quiero perder la oportunidad de explorar lo que podría surgir entre nosotros.

Sus palabras me llegaron directo al corazón, y una sensación de calor se extendió por todo mi ser. Había algo en la forma en que hablaba, en la sinceridad de sus palabras, que me hacía creer en él.

-Alex, yo... también siento algo por ti", confesé, mi voz apenas un susurro mientras dejaba que mis emociones se expresaran libremente.

Una sonrisa radiante se extendió por el rostro de Alex, iluminando sus ojos con felicidad.

-Entonces, ¿qué dices? ¿Nos damos una oportunidad y vemos a dónde nos lleva esto? -preguntó, su tono lleno de esperanza y anhelo.

Asentí con una sonrisa, sintiendo la emoción y el nerviosismo burbujeando dentro de mí.

-Sí, Alex. Me encantaría - respondí, dejando que la certeza de mi corazón guiara mi decisión.

Y así, en medio de la noche, bajo el resplandor de las estrellas, nos dimos la mano y nos embarcamos juntos en un nuevo capítulo de nuestras vidas. No sabíamos qué nos deparaba el futuro, pero estábamos dispuestos a enfrentarlo juntos, con amor, confianza y determinación.

—Gracias por acompañarme esta noche, Emily. Ha sido un placer tenerte a mi lado —dijo Alex, su voz suave y cargada de sinceridad.

—El placer fue mío, Alex. Gracias por invitarme —respondí, devolviéndole la sonrisa con gratitud.

Con el corazón latiendo con fuerza en mi pecho me despedí de Alex y subí al interior de mi apartamento. Mientras cerraba la puerta detrás de mí, me quedé sumida en mis pensamientos, preguntándome qué depararía el futuro y cómo afectaría aquel beso nuestra relación profesional y personal.

Entre Informes y Sonrisas: El Destino Laboral de Dos CorazonesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora