Extra-1

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El día de nuestra boda finalmente llegó, y mientras me preparaba para caminar por el pasillo hacia mi futuro esposo, mi corazón latía con una mezcla de nerviosismo y emoción abrumadora. En el espejo, vi a mi madre y a mi mejor amiga Sarah ayudándome con los toques finales de mi vestido de novia, y no pude evitar sonreír al recordar todas las veces que habíamos soñado con este día juntas.

Estás radiante, Emily - dijo mi madre con voz emocionada, secando una lágrima de felicidad de sus ojos - Estoy tan orgullosa de ti, cariño.

-Gracias, mamá - respondí con gratitud, sintiendo la emoción aumentar con cada segundo que pasaba. - No puedo creer que finalmente esté aquí, a punto de casarme con el hombre de mis sueños.

Sarah se acercó y me abrazó con fuerza - Estoy tan feliz por ti, Em - dijo con voz temblorosa. - Eres la novia más hermosa del mundo, y Alex es un tipo afortunado.

-Gracias, Sarah - respondí, devolviendo el abrazo con cariño – Muchas gracias por estar ahí para mí y esas palabras de ayer en mi despedida de sortera me llegaron al alma Sarah.

-Siempre mi hermosa amiga y esas palabras me salieron del corazón – Ella me dio un abrazo ante de salir de la habitación.

Mientras nos dirigíamos hacia la ceremonia que es en un hotel en la playa blanca donde Alex me pidió matrimonio, las palabras de mis votos resonaban en mi mente, recordándome el profundo amor y compromiso que compartíamos Alex y yo. Nos habíamos prometido amarnos y apoyarnos mutuamente en todos los momentos de nuestras vidas, y hoy estábamos sellando ese compromiso frente a nuestros seres queridos.

Cuando llegué al altar vi a Alex esperándome con lágrimas de alegrías derramadas y una sonrisa radiante, todo el nerviosismo se desvaneció, reemplazado por una sensación de paz y felicidad abrumadora. Tomé su mano con seguridad, sintiendo la conexión instantánea que siempre había existido entre nosotros.

-Estás impresionante, Emily - dijo Alex en un susurro, sus ojos brillando con amor y admiración - No hay palabras para describir lo afortunado que me siento de tenerte como mi esposa.

-Y yo de tenerte como mi esposo - respondí con una sonrisa temblorosa - Te amo más de lo que las palabras pueden expresar Alex.

La ceremonia comenzó, el padre nos dio la oportunidad de decir nuestros votos primero fue a Alex que está un poco nervioso

- Mi querida Emily

Desde el momento en que te vi entrar por aquella puerta de la oficina con esa sonrisa radiante, supe que mi vida cambiaría para siempre. Tu alegría contagiosa iluminaba incluso los días más grises, y tu determinación en defender tus ideas me dejaba sin aliento y admiración. Recuerdo claramente el día en que nuestros labios se encontraron en aquella discoteca; mi corazón parecía querer salir disparado de mi pecho de la emoción. Y cómo olvidar aquella noche en la que casi me confunde con un ladrón en la oscuridad, ¡casi me da un infarto! Al ver que casi me quería dar con un salten.

Pero más allá de las risas y los sustos, hoy estoy aquí para hacer una promesa solemne y, al mismo tiempo, llenarte de risas. Prometo amarte en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza, y en cada momento de nuestra vida juntos, incluso cuando intentes defenderte de sombras inexistentes en la noche.

Prometo acompañarte en tus locuras y en tus momentos de lucidez, en tus alegrías y en tus tristezas, y en cada aventura que la vida nos depare. Prometo ser tu cómplice, tu apoyo incondicional y tu mejor amigo, incluso cuando te empeñes en convencerme de que los unicornios existen.

Pero sobre todo, prometo amarte con todo mi ser, con cada fibra de mi ser y con cada chiste malo que se te ocurra, porque contigo la vida es una aventura llena de risas y amor. Así que aquí estoy, ante ti y ante todos nuestros seres queridos, para decirte que te amo hoy, mañana y siempre, con todo mi corazón y con todo mi humor.

Yo Alexander Stone te acepto como mi esposa Emily Michell Waters de Stone

Las palabras de Alexander me dejaron emocionada ya que estos 7 meses que estuvimos planeando la boda estuve enfocada en tener uno votos que sean inolvidables, pero me di cuenta de que solo tengo que poner varios recuerdos hermosos. Los aplausos y las risas no se hicieron espera respire hondo antes de comenzar mi voto matrimonial con la mirada puesta en el hombre que se convertirá en mi futuro esposo en solo minutos.

- Mi amado Alexander

Recuerdo el día en que te conocí, estaba llena de nervios y expectativas. Había escuchado rumores en la universidad sobre un tal "Alexander Stone", un hombre arrogante y mujeriego, pero al encontrarme contigo descubrí que eras todo lo contrario. En lugar de arrogancia, encontré dedicación a tu trabajo y una determinación admirable.

Antes incluso de que nuestros labios se unieran en aquel beso inolvidable en la discoteca, ya estaba enamorada de ti. Cada día me sorprendía más tu forma de ser, tu habilidad para comunicarte con tus empleados y mantener la confianza en todo momento. Ese beso, aunque inicialmente parecía un sueño, al día siguiente en la madrugada me pregunté si había sido real. Pero me di cuenta al amanecer en tu apartamento cuando ese día te ataqué con el salten al confundirte con un ladrón, me di cuenta de que, sí, ese beso fue muy real. Mis disculpas por el susto, pero ¿quién diría que el amor también tiene su lado de artes marciales?

Sin embargo, lo que más me enamoró de ti fue algo tan simple como un elogio y una sonrisa. Cada día, sin falta, me dedicabas una sonrisa que iluminaba mi mundo, y esos pequeños elogios eran como un bálsamo para mi alma. Así que aquí estoy, frente a ti y ante todos nuestros seres queridos, para prometerte mi amor, mi risa y mi complicidad en esta locura llamada vida.

Prometo amarte en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza, y en cada momento que la vida nos depare, incluso cuando me hagas reír tanto que me duela el estómago. Prometo ser tu apoyo incondicional, tu compañera de aventuras y tu cómplice en cada travesura que se nos ocurra.

Que este día sea solo el comienzo de una vida llena de amor, risas y momentos inolvidables. Te amo más de lo que las palabras pueden expresar, mi querido Alexander, y estoy emocionada por compartir el resto de nuestras vidas juntos, con todos sus chistes malos y sus momentos de ternura.

-Yo Emily Waters te acepto como mi esposo Alexander

Mientras intercambiábamos nuestros votos, el mundo parecía desvanecerse a nuestro alrededor, dejándonos solos en nuestra burbuja de amor y compromiso. Prometimos amarnos y cuidarnos el uno al otro en todas las circunstancias, y sellamos nuestros votos con un beso lleno de promesas y esperanzas para el futuro.

Después de la ceremonia, nos reunimos con nuestros seres queridos para celebrar este día tan especial. Entre risas y lágrimas de felicidad, bailamos, brindamos y compartimos momentos inolvidables que quedarían grabados en nuestros corazones para siempre.

Y mientras observaba a Alex entre la multitud, su mirada llena de amor y dedicación, supe que había encontrado mi verdadero hogar en sus brazos, y que juntos, enfrentaríamos todos los desafíos que la vida nos presentara, con amor, fuerza y ​​compromiso inquebrantables.

Entre Informes y Sonrisas: El Destino Laboral de Dos CorazonesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora