El fuego del dragón

Capítulo 31 🐲

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Visenya corrió para que no pudiesen entrar mientras Aemond escapaba por el otro lado, el joven se había dejado el parche y cuando Daemon entró lo vio, aquel objeto sólo representaba a una sola persona además con la que ella tenía un sentimiento amoroso, le hizo llegar a la conclusión de que había algo entre ellos, y que la joven estuviera semidesnuda le alertó. Cuando Rhaenyra se marchó procedió a hablarle directamente sobre el tema.

-Daemon: Aemond ha estado aquí.

-Visenya: No.

-Daemon: Visenya quiero la verdad.

-Visenya: Te la estoy diciendo. - Intentaba estar tranquila.

-Daemon: ¿Ah si? -Caminó por la habitación y colocó el parche entre sus dedos. -¿Y esto que es?

-Visenya: (Cerró los ojos y suspiró) Puedo explicarlo.

-Daemon: Estoy deseando oírlo. - Sonrió irónico.

-Visenya: No le hagas nada, solo buscaba una excusa para estar con él.

-Daemon: Te has acostado con él.

-Visenya: Oh por los antiguos dio...

-Daemon: ¡Deja de mentirme! Ni siquiera te lo he preguntado porque sé que lo has hecho.

-Visenya: ¿Cómo?

-Daemon: Tu ropa y su parche me lo dijeron.

-Visenya: Si, lo he hecho.

-Daemon: ¿Desde cuando? - Estaba furioso, le hubiera dado igual si de tratase de otro joven.

-Visenya: Dos días después de volver a Desembarco de rey por orden del abuelo.

-Daemon: ¿Por qué él?

-Visenya: Sé que estás enfadado pero hazlo conmigo.

-Daemon: Si hubiera sido otro no me molestaría, yo también he sido joven.

-Visenya: ¿Podemos dejar el tema? Es raro además, de que sé que por mucho que intente explicarlo nunca me entenderías, a pesar de que tú viviste algo parecido con madre pero él está en el bando Hightower, entonces no puedes comprender mis sentimientos por él.

-Daemon: (Suspiró) Bien, ten cuidado tienes poco tiempo, que no te descubran.

-Visenya: Gracias. -Lo abrazó.

Aemond estaba al otro lado y escuchó la conversación de Visenya con Daemon, sabía que su tío no sentía ninguna simpatía por él, pero se alegraba que al menos no le prohibieran estar juntos el tiempo que les quedaba.

Estaban a punto de cumplirse el tiempo, durante el período que pudieron se encontraban todas las noches en los aposentos de ella, que eran más seguros pues no tendrían el peligro de que la reina pudiese entrar sin avisar. Habían tomado muchas medidas para que nadie más lo supiera pero todo tenía un fin y el suyo estaba muy cerca, los miembros de otras casas habían empezado a llegar, Elmo Tully, Loreon Lannister, Borros Baratheon, Amos Bracken...Desde una terraza veía como iban llegando los carruajes, le angustiaba verlos llegar, tendría que fingir querer pasar tiempo con ellos cuando realmente quería escapar de allí con Caníbal, pero era su deber, decidió bajar y enfrentar la situación, se sorprendió de ver allí al que supuestamente era su medio hermano Addam Velaryon, la madre de este Marilda, poco después de la muerte de Laenor Velaryon anunció que sus hijos Addam y Alyn eran hijos de él, a pesar de que sabían todos sus gustos, Corlys Velaryon lo dio por válido aunque Visenya creía que no eran hijos de su padre sino de su abuelo y, que para tapar las infidelidades a su esposa aceptó a esos niños como nietos.