Insecta

La Verdad

Tardamos una eternidad en llegar a su habitación. Yo estoy temblando cuando entramos, de dolor y de miedo, su cuarto no me agradó demasiado la primera vez que lo vi. Sin embargo, una vez en él, me doy cuenta de que ha retirado los adornos que ostentaban cabezas de chicas cuyos grupos no conocía, además de la alfombra (ya la había quitado la vez anterior) a pesar de todo, el lugar sigue siendo tan blanco y perfecto, que no puede llegar a ser confortable.

-Siéntate- me pide guiándome a su cama. Toma un pequeño aparato circular, lo toquetea con un movimiento rápido y enciende un gran trozo de una pared metálica, pintándola de brillantes colores, seguramente es la "Metallurmen". En esa composición de luces coloridas, un punto negro se mueve de un lado a otro, parece que es Raul quien lo controla, selecciona dando un golpecito. El panorama cambia y selecciona otro pequeño símbolo, con un dibujo muy extraño. Ahora la pared se torna negra.

Se dirige a la cama y se sienta a mi lado, dando de nuevo un golpe en el artefacto. Aparecen unas letras en la pared. "Reunión para dar noticia internacional. 26 de julio de 2068. George Nulkandur, presidente de los Estados Unidos. Gustavo Tarsa, presidente de México. Fernando Lilómea, rey de España. Shinzo Naraku, primer ministro de Japón"

Salen a escena cuatro hombres. El primero es muy alto y rubio, con unas marcadas ojeras y arrugas que hacen lucir su rostro como una nuez pálida. El segundo es moreno, con ojos pequeños y el cabello muy negro, se le ve agotado. El tercero es de tez clara, el cabello completamente blanco debido a la cantidad de canas y el último, a diferencia de los demás, rebosa juventud, es muy gordo y bajo, quizá hubiese resultado simpático de no ser por sus ojos, y no porque estuvieran tan extrañamente rasgados, sino  porque mostraban un brillo mezquino y perverso. Lo único que tenían en común esos cuatro personajes, era que todos lucían igual de cobardes y poco confiables.

El rubio comienza a hablar:

"Hemos tenido numerosos problemas, como sabrán todos ustedes. Los animales, que hasta ahora constituían nuestra principal fuente de alimentación y en parte de vestimenta y comercio, son cada vez más escasos, debido al evidente abuso de la población" hace una pausa para remarcar que la culpa no la tienen ellos "por ello, hemos establecido medidas disciplinarias para preservar las especies, desde la extinción de animales en estado salvaje, las cuales alteraron nuestro panorama natural, el calentamiento global, la falta de agua para los hábitats naturales y la matanza en masa de animales de granja tampoco favoreció el desarrollo sustentable mundial"

A continuación, el moreno toma la palabra, hablando muy extraño, con un acento que hace que me cueste entender lo que dice, pero alguien se molestó en poner en pequeñas letras debajo de la imagen, lo que iba diciendo:

"Latinoamérica, que antes tenía una de las más diversas faunas, ahora tiene escasez de carne y piel. Aunque recientemente, los laboratorios han elaborado un sistema muy novedoso que nos permite fabricar agua potable, descubrimos que la clonación de animales para su preservación no es una solución, ya que es un sistema altamente costoso y las clonaciones suelen tener fallos, lo cuál podría causar serios problemas en nuestra salud, ya que son nuestra principal fuente de alimentación"

El canoso se adelanta un poco para dar por fin la esperada noticia: "Mi nación, junto con la de estos tres caballeros, hemos decidido unirnos para crear un organismo que nos ayude a salvar esta grave situación y que nos sirva de apoyo en caso de lo peor. Así, Estados Unidos, México, Japón y España, se unen y crean la organización Humanisi, que hoy, es oficialmente inaugurada"

Los tres hombres toman un artefacto pequeño cada uno, es de color dorado, con dos cuchillas y dos agujeros para poner los dedos. En el fondo hay una placa color rojo, en letras doradas pone Humanisi, con el dibujo de una mano y una pequeña esfera roja en su interior. Lo cruza un listón igualmente rojo, que todos cortan a la vez. Se escuchan aplausos; todo se vuelve negro.