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BILL'S POV

Mientras Jane dormía tranquilamente en su habitación, yo esperaba a Thomas intranquilo, quien envió horas atrás un escrito sigiloso demandando tener "malas noticias". No podíamos comunicarnos por teléfono de nuevo, pues los Evans podrían estarnos vigilando. Suena la puerta y me apresuro a abrir, teniendo cuidado para no despertar a Jane.

— Bien, dime que es lo que tienes.

— ¿Está ella aquí? — Pregunta Thomas.

— Está durmiendo, ¿por qué?

Niega con seriedad.

— ¿Qué pasa Thomas?

Su manera de mirarme me genera nervios excesivos.

— No puedes decirle, no ahora.... Perderá la cabeza.

— Dímelo.

Toma su maletín y saca de este un folder repleto de documentos. Comienzo a pasar uno por uno, veo la cara de James en diversas fotos junto con su información personal y múltiples análisis de sangre.

— Su hermano tiene cancer terminal.

Al instante de escuchar aquellas palabras, mis ojos se enrojecen y siento mi cuerpo temblar, la ansiedad llena mi cuerpo de pies a cabeza. La noticia cae en mi como un gran balde de agua fría.

— Bill...

Thomas llama mi nombre.

— ¿Cómo estás seguro de esto? Es decir, de donde lo sacaste? ¿Como sabemos que no es una trampa?

— Su padre le causó esto....

— Maldito hijo de puta.

Intento no estallar en exasperación para no llamar la atención de Jane, quien aún duerme en la habitación.

— Como es posible... Dios mío...

— Lo se. — Dice Thomas. — Es un enfermo mental, lo expuso a radiación, hasta que logró su objetivo...

— Hace esto para lastimarla, ¿no es así?

Thomas asiente y continúa acomodando sus documentos, tiende uno cerca de mi y me acerco a este, otro historial médico.

— No tiene esperanza de vida, Bill.

La impotencia por no saber que hacer me hace sentir que estoy a punto de enloquecer.

— ¿De cuanto estamos hablando?

— 2 semanas... tal vez 3.

— Ella tiene que saberlo...

— No, no puedes decírselo.

— Se lo diré, pero no... no ahora.

— No puedes arriesgarla mas.

Aquel comentario me tomo por sorpresa, por qué era completamente verdad, era yo quien la había estado arriesgando todo este tiempo. Ella no quería tener nada que ver con sus padres, solo quería la custodia de James.

— Tienes razón, no tiene que saberlo.

Saque el celular de mi bolsillo delantero y teclee un par de números.

— ¿Que harás? — Pregunta Thomas.

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JANE'S POV

Desperté nuevamente por la madrugada, mi habitación estaba completamente obscura. Tal vez eran los medicamentos o el cansancio acumulado lo que me hacía caer en un sueño tan profundo. Algo apretaba mi pecho, me sentía desesperada y comencé a tocar la cama en busca de Bill.

— Bill.... — Lo llamé por lo bajo. — ¿En donde estás?

Me levanté de la cama sintiéndome desubicada, caminé a la sala en donde no parecía estar, todo estaba en completa obscuridad excepto una luz proveniente del cuarto de Harry.

— Bill... — Llamé acercándome.

Una sombra reflejada en la blanca pared de aquella habitación se acerca a mi, miro a Harry salir de la habitación y me confundo por completo.

— ¿Qué haces aquí?

Había decidido dejar a mis amigos fuera de todos esto, lo último que quería era a Harry de visita, podía sentir su nerviosismo y desconcierto por la expresión en su rostro.

— Bill me llamó.

— ¿En donde está? — Pregunté seria.

Lo trataba con frialdad pues necesitaba alejarlo, no podía seguir emanando confianza, no por ahora.

— Tranquila, dijo que tenía un par de pendientes y volverá en cuanto pueda.

Me atemorizaba el pensar en qué algo podía sucederle, pero ahora la inquietud era por Harry, a quien debía evitar entrometer a toda costa.

— ¿Que fue lo que te dijo?

— Solo dijo que habías discutido con tu padre. — Aclara su garganta. — Escucha no tienes que contarme nada si no quieres.

Sus ojos reflejan sospecha y al instante me pregunto si Bill detalló algo más sobre lo sucedido.

— ¿Está todo bien? — Pregunta.

— Si, solo.... — Suspiro. — No creo que debas estar aquí.

Endereza su espalda y sus cejas se entrecierran, no parece entender por completo mi petición, o más bien, la razón.

— ¿Pasa algo? — Se acerca a mi con serenidad.

— No, solo debes irte.

Sentía un dolor inmenso al alejarlo tan abruptamente de mi, pues siempre ha sido una pieza indispensable en mi vida.

— Bill dijo que no podía irme hasta que el volviera.

— Pero no puedes estar aquí. — Suelto con firmeza.

Me dejo llevar por la preocupación dentro de mi y digo lo primero que llega a mi mente. No quería hacer esto, no de esta forma, quería tener esta conversación en otro momento.

— Jane, no se que está pasando, pero prometo que cuando llegue Bill te daré todo el espacio que quieras, si? solo.... relájate. — Habla sin miedo, no me toma en serio y su tono de voz lo delata. — Me contó sobre el shock que tuviste, lo respeto, no te obligaré a hablar sobre ello. — Se voltea dándome la espalda. — Estaré en mi habitación si eso te hace sentir mejor.

Caminó hasta la puerta de su recamara, pero justo antes de tomar la perilla, voltea a verme y dice:

— No salgas de aquí o me meterás en problemas con Bill.

Cierra la puerta y no hace más que dejar mi mente dando vueltas. De repente recuerdo a Sadie, había estado pensándolo y decidí que sería mejor enviarle una carta, Harry podría dársela.

Entré a la biblioteca y tomé de mi escritorio un par de hojas de papel y bolígrafos, le diría todo lo que debía saber.

Sadie,

Se que recibir esta carta te será un poco extraño, pero necesito que tomemos distancia. Cuando todo termine, y espero lo haga, te daré detalles. Por el momento espero respetes mi decisión, sabes lo peligrosa que es mi familia y no quiero atraer problemas para ti o Harry.

Te ama, Jane.

PREJUDICE | BILL SKARSGARDDonde viven las historias. Descúbrelo ahora