PREJUDICE | BILL SKARSGARD

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PARTE I

Jueves, 7:30 am.

Estacione mi auto fuera de la universidad, tomé mis cosas y salí de este para dirigirme al aula, podía pasar desapercibida todos los días, no era muy popular, así que mi presencia no era tan interesante para muchos.

— Jane ! — grita Harry — volteo enseguida.

Harry, mi mejor amigo desde segundo de secundaria. Responsable, leal, honesto, comprensivo, y siempre de mi lado.

Prácticamente pasábamos cada segundo del día juntos. Tiene 23 años, comenzó su carrera hace algunos meses, ya que decidió alejarse de el país por un tiempo, pero jamás dejamos de ser amigos.

— Harry ! — respondo.

— Te he estado enviando mensajes desde ayer — dice con preocupación — ¿qué pasa?

— oh todo está bien no te preocupes — digo tomándolo del brazo — solo no he revisado mi celular, pero ¿que necesitas?

— Solo no vuelvas a dejarme así Jane, no me asustes — suspiró, yo asentí. — Necesito que me acompañes a una cena — soltó de repente

— ¿Yo? — me apunte mientras sonreía — ¿A una cena? ¿Elegante? — reí aún más.

— Si Jane, tu, a una cena, elegante, conmigo tu mejor amigo — rió egocéntricamente — por favor — insistió.

— Lo voy a pensar — respondí desinteresada —

— ¡Perfecto! — dice emocionado — esto es importante para mi y tú eres importante para mi también... entonces, me haría muy feliz que estés ahí — dijo poniendo su brazo en mis hombros —

— Esta bien Harry — sonreí — te veo en la salida, debo ir a clase.

— Voy a tu casa hoy — respondió, más como una afirmación que como una pregunta, seguida de un guiño y beso al aire, yo solo reí —

Amaba que estuviera conmigo, era lo mejor que tenía, jamás me dejaba sola y yo tampoco lo haría.

El siempre estuvo para mi cuando nadie más lo hizo, por esa sencilla razón siempre ha sido como un hermano para mi, e independientemente de la escuela, pasábamos la mayoría del tiempo juntos.

Estudiábamos distintas carreras, yo tomé periodismo y el psicología, teníamos muy distintas formas de pensar, pero aún así, nos amábamos más que a nadie en el mundo.

El día pasó más rápido de lo que creí que pasaría, hubo solo temas breves, algo nuevo con la profesora Celia, que desde siempre ha sido una puta bruja.

Subí a mi auto de nuevo y fui a casa, Harry no tardaba en llegar y debía limpiar un poco.
Enseguida escucho el sonido de su auto frenando en seco fuera de mi casa, salgo antes de que logre bajar de su auto, siempre me emociona verlo una vez más.

— Hola linda — dice Harry bajando de su auto para enseguida abrazarme.

— Hola Harry — sonrío de vuelta.

Entramos a mi casa sin decir más.

— Y bueno, ¿que pensaste? — pregunta con una sonrisa en su rostro —

Reí como si la respuesta no fuera obvia.

— Iré contigo, tú ganas.

— ¡Si! — responde casi gritando mientras se apresura a abrazarme — No sabes lo feliz que me hace que me acompañes.... ¿Quieres que te diga por que es tan importante para mi? — alza sus cejas.

— Adelante — sonrío.

— Bien, Iré al punto, me gusta una chica.

— ¿Por que jamás lo habías mencionado? ¿No se supone que somos hermanos?

Para ser franca si sentí un poco de molestia, después de todo yo jamás le mentiría, y quisiera que el tampoco lo hiciera.

No lo apresuraba a nada, pero yo siempre había sido completamente transparente con el.

— No estaba seguro, pero ahora lo estoy, y quiero que la conozcas tú antes que nadie.

— ¡Que emoción Harry! — Lo abracé —

— Pero hay un detalle más ...

— ¿Otra cosa que no me haz contado? — me alejé de él mientras reía —

— Si Jane, yo ... ella es ... una persona, tal vez ... bueno.... Sus hermanos son... bastante conocidos

— HARRY ROBINSON ¿TE ENAMORASTE DE UNA JODIDA PERSONA FAMOSA? — Pregunte riendo, creyendo que era imposible que el se acercara a la supuesta chica.

— Si ... Si?

— Y ¿como diablos la conociste? Es decir, co- ¿como lograste que te invite a una cena elegante? no lo sé solo ... ¡Explícate! ¿quien es?

— Su nombre es Eija Skarsgard, hermana de aquel chico... Alexander Skarsgard

— Tienes que estar jodiendo — dije con asombro — ¿ella te conoce siquiera?

— Si Jane ! Eso es lo mejor, ella me invitó a la cena, es decir, nos invitó — dijo emocionado —

Yo seguía sin poder creer en que lío se estaba metiendo.

— ¿No estás emocionada? O no lo sé, ¿feliz por mi? Estoy encontrando el amor Jane, por fin lo estoy logrando y quiero que estes ahí conmigo.

— Claro que estoy feliz por ti Harry ... no lo dudes jamás, pero ... ¿Enamorarte de la hermana de alguien tan conocido? Te estás metiendo en un lío, espero lo sepas — dije con todas las emociones en existencia mezcladas.

No sabía que sentir por Harry, pero claro que estaba feliz por el. Es decir, había salido con algunas chicas antes, pero jamás fue algo serio.

— Lo se lo se, te juro que lo sé, pero de verdad, quiero internarlo, se que ella sintió algo.

— Entonces te apoyo — suspiré — puedes estar con quien tú desees, pero debes... pensar bien las cosas ¿si?

— Gracias — me abrazó con nostalgia — solo necesito tu aceptación, la de nadie más, esto me hace feliz, muy feliz.

Y era verdad, no necesitábamos la aceptación de nadie, nuestras familias no se interesaban nunca por nosotros, por lo menos no como deberían, así que ... ¿quien más lo haría? solo nos teníamos mutuamente, y aún así era más que suficiente.

Me preocupaba Harry y su manera tan inocente de ver el mundo, después de todo el creía en el amor de una manera en la que yo nunca pude.