2

113 10 0
                                    


Los días pasaron rápido, muy rápido, decidí usar un vestido negro, algo que jamás falla. Me sentía nerviosa, ¿Que tal si Eija me alejaba de Harry? Es una persona muy conocida, y yo no soy nada al lado de ella, tantas cosas pasan por mi cabeza que no se que pensar.

Sin darme cuenta ya estábamos en el auto de Harry de camino al lugar, sería en un lindo restaurant, demasiado elegante para ser honesta.

— ¿Nervioso? — Pregunte pasando una de más manos por su brazo izquierdo, en forma de apoyo. 

— Si soy muy honesto, si — ríe por lo bajo.

— Está bien — lo abrazo — estará bien

Me sonríe de vuelta y comienza el camino a el lugar.

Al llegar nada era como creíamos, había muy poca luz y mucho silencio, todas las mesas parecían estar llenas, cada una con su centro de luz, algo muy, muy privado, y ¿como no? Hablábamos de personas con el apellido más famoso y mencionado.

—¡Harry por aquí ! — se escucha a lo lejos.

Se acerca a nosotros Eija, la hermosa modelo de 23 años recién cumplidos, una hermosa sonrisa y ojos llenos de brillo.

—¡Eija! - responde Harry.

Ella se acerca a nosotros con una linda actitud, me abraza como si me conociera desde hace una vida entera, le correspondo por que he amado ese gesto, me da confianza instantánea.

— Tu debes ser Jane ¿no?

— Jane, mucho gusto — estiro mi mano, la cual ella toma casi instantáneamente.

— Eres hermosa Jane, bienvenida — la sonrisa seguía sin salir de su rostro.

Tanta amabilidad me hacía sentir especial, ella voltea con Harry una vez más, le da un largo abrazo seguido de un beso en la mejilla, creo que lo he subestimado.

— Bueno, acérquense por acá, se sentarán conmigo y mi familia — volte a verme rápidamente — ¿Está bien? ¿Crees sentirte cómoda?

Asentí sin pensarlo dos veces, después de todo lo hacía por Harry, me sentía muy feliz por el.

— Claro, si si, Perfecto.

Toma a Harry del brazo y levemente lo empuja para que comencemos a caminar, suelto una pequeña risa para seguirlos, aunque Janet se asegura de no dejarme atrás, muy linda para ser real.

Nos lleva hasta una mesa que parece estar en una zona del restaurant más privada, la cual esta detrás de una puerta corrediza, la luz sigue siendo escasa, pero entre más nos acercamos logro percibir algunas caras conocidas, Dios mío, lo había olvidado, son los Skarsgard, LOS SKARSGARD.

— Bueno chicos, el es Harry — lo señaló — Y ella es Jane, mejor amiga de Harry — sonrió —

La puerta corrediza cerró y las luces se encendieron, como si intentaran no llamar la atención, algo que es obvio.

Había un total de 5 personas en la mesa, Janet comenzó a mencionarlas.

— Mi mamá My — la señaló —

— Mucho gusto — sonrió de la manera más dulce.

— Alexander, Gustaf, Mi padre y Bill.

— Mucho gusto — dijeron varias voces al unísono.

Mis ojos se plasmaron en alguien en específico.

— Un placer conocerlos — dice una voz ronca.

Se levanta de su asiento para acercarse a nosotros, se quien es, es Bill, Bill Skarsgard.

Mi cuerpo parece no responder, cuando de repente siento que toma mi mano y deja un ligero beso, como todo un caballero.

Reacciono con una leve sonrisa, no puedo creer que lo tengo frente a mi, tantos rumores sobre el, no se que pensar.

Alto, muy muy alto, por encima de 1.90, cabello peinado hacia atrás, sonrisa perfecta, llevaba un traje que lo hacía opacar a cualquier otro hombre pisando el restaurant. Su tez era más blanca de lo que recordaba, había visto algunas fotos suyas en internet, más sin embargo jamás le di seguimiento a su vida o cualquier otra cosa sobre el, solo sabía que tenía una rara reputación.

Y sin olvidar.... que era ridículamente apuesto.

Se acercó a Harry y lo saludo con un tipo de abrazo, me miro nuevamente y volvió a su asiento.

— Bueno, presentaré a Harry con los demás — Lo tomó del brazo nuevamente — Toma asiento Jane.

— Ya vuelvo linda — me dice Harry —

Asiento levemente para escuchar a My decir ..

— Toma asiento dulzura.

Me siento al lado de Alexander, frente a My.

— y dime cariño, ¿estudias?

— Si ummm, yo ... yo estudio periodismo.

El me mira al instante, se por que lo hace, su fama no lo ayuda en nada ... sus chismes han estado esparcidos por todos los malditos tabloides, pero ese no era mi problema.

—  Muy bien linda, siempre he considerado los estudios como algo esencial en la vida, veo un buen futuro en ti — toma mi pierna para darle un pequeño meneo mientras yo sonrío sin parar —

Jamás había recibido un trato así de alguien como ella, mi mamá nunca me apoyó con mis desiciones, esto era algo totalmente nuevo.

— Muchas gracias My, es un placer conocerla, he oído maravillas de usted por todos lados — puse mi mano sobre la suya —

— Igualmente querida, es un placer conocerte.

Eija y Harry entran por la puerta con velocidad, Eija ríe mientras se recarga en el, ¿por que se siente tan raro? Harry ya había tenido pareja antes, pero esto era distinto.

— Vamos a tomar algo Jane — dice Janet — acompáñanos.

— Con su permiso señora Skarsgard — me inclinó ante ella — un gusto conocerlos ... a todos. — sonrió nuevamente —

Gustaf ríe y agita su mano, Alexander se levanta para darme un rápido abrazo y Bill solo me mira con atención, su actitud cambio desde que supo sobre mi profesión, y eso no me gustó, ¿quien cree que es?

Salimos juntos por aquella puerta misteriosa, Eija nos tenia a ambos entrelazados en sus brazos, meciéndose de lado a otro, con mucha emoción.

Comenzó una canción de Madonna y nos olvidamos por completo de las bebidas, como si nos conociéramos de toda la vida bailamos por horas, algo que nunca olvidaré.

Al terminar la cena, salimos del restaurant juntos, había sido mas divertido de lo que pensé, incluso después de que nos siguieran algunos paparazzis como por dos cuadras.

Eija nos dejo en mi casa, o mas bien su chofer lo hizo. No podíamos creer lo que acabamos de vivir, fue UNA MALDITA FIESTA DE GENTE RICA Y CON PODER, suena un poco interesado de mi parte, pero no era así, era el hecho de ser tomada en cuenta el que me importaba tanto, me hacia sentir Bien después de tanto tiempo, igual que la atención de My.

Parecíamos niños pequeños después de un paseo al parque, ¿era nuestra vida tan aburrida? Yo creo que si.

PREJUDICE | BILL SKARSGARDDonde viven las historias. Descúbrelo ahora