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| Max






Era la última clase, me estaba muriendo de sueño y realmente no entendía nada, pero me estaba esforzando por mantenerme despierto.

La campana sonó al fin y recogí mis cosas para irme de una vez.

— ¿A dónde crees que vas, novato? —Oí mi propia voz. — No me llames así, alguien te va a escuchar. —Dije.

— Tenemos que ir a regularización, ¿lo olvidas? —Llevaba su mochila colgada de un hombro, se me acercó. — Ya sé, ya sé, agh... —En realidad lo había olvidado, yo quería irme a dormir el resto de la tarde.

Suspiré. No tengo de otra.

Entramos al salón que nos indicó el profesor la última vez, nos sentamos en las bancas con dos separandonos.

— Bueno, jóvenes, que alegría verlos aquí. —Si, se siente hasta acá la alegría (que se note el sarcasmo). — Debido a que han reprobado, tengo que volver a recordarles algunos temas.

Dijo, esto era un pérdida de tiempo, yo recordaba todo completamente bien, y estoy seguro de que Brad también.

Tuvimos que aguantar DOS HORAS escuchando cosas que ya sabíamos, incluso vi a Brad muriéndose de sueño. Y es que, ¡El profesor apenas habla y te da sueño!, no es nuestra culpa, las pocas ganas que ese profesor pone nos lo contagia.

Cuando al fin acabó, Brad y yo salimos juntos, eran las 5:07pm.

De la nada, vi como venia Tanque con otros chicos y se dirigían a nosotros.... Bueno, a mi.

— ¿Bradley?, ¿Qué haces con este? —Me preguntó. — ¿A quién llamas "este", he?, ¿Qué acaso no ves con quien- ¡Auch! —Le di un pellizco, parece que se olvidó que esta en mi cuerpo.

— No te estas hablando a ti... Novato. —Dije, abriendo grande los ojos dándole a entender lo que pasaba, el pareció entenderlo y solo rodó los ojos cruzando sus brazos.

— Cómo sea, Camil organizará una fiesta. —Habló Tanque. — ¿Una... fiesta? —Pregunté. — Eso sería genial, podria- —Me interrumpí a mismo al sentir las miradas pesadas de los presentes. — Ahm, quiero decir, ¿por qué gastaría mi tiempo en eso?, y peor aún, con ustedes. —Dije como creía que lo diría Bradley, ¿él actuaría así?

Miraba de reojo al otro, quien miraba expectante.

— Sabes como es Camil, si no vas no te la vas a acabar con ella. Además, hace mucho que no nos divertimos, anda jefe.

Era curioso como a pesar de todo seguía llamándolo jefe, igual que sus otros amigos.

— Lo voy a pensar, te aviso luego. —Y avancé con Brad detrás de mi, tratando de cortar la conversación.

Sentía como nos observaban a ambos por detrás, seguro más tarde Tanque me llenaría de preguntas que no sabría como responder, pero bueno, ya veré que inventar.

— Solo diré, que lo hiciste terrible. —Habló Brad, lo miré molesto. — No me jodas, Brad. —Rodé los ojos.

El camino fue silencioso, agradecí eso.





(...)





¿Y qué planeas hacer, viejo?, ¿Vas a ir? —Habló PJ del otro lado de la línea. — No sé, para ser sinceros, no tengo muchas ganas... no sé como fingir ser Bradley, con todas las chicas detrás y eso, ya sabes como es en las fiestas. —Hable.

Les llame a los chicos cuando llegué a la fraternidad de Brad, comienzo a extrañarlos.

— Podría ir, aunque quisiera que ustedes estuvieran ahí también. —Dije mientras me ponía una ropa más cómoda. — Posiblemente Camil no nos quiera ahí... Pero podemos colarnos, no importa.

Sonreí. — Son los mejores, chicos.

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Maldito dólar - Maxley [CONCLUIDA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora