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Max fue con la anciana, sentía que no podía más. Se sentía mal de sus emociones, sus pensamientos no ayudaban y la relación que tenía ahora con Bradley no le era de mucha ayuda. La última vez los consejos de la mayor lo hicieron sentir motivado, así que quizá esta vez le ayudaría igual.

No podía dejar de recordar los sucesos de hace unas semanas cuando peleó con Bradley.

— ¡Eres solo un inseguro de mierda!, ¡a nadie le interesa si te cojes a un hombre o lo mucho que eso te encanta! —el castaño le reclamaba con molestia.

— No lo entiendes, Bradley, tú no-

— ¡Claro que lo entiendo!, ¿piensas que a mi me da igual?, ¿crees que no me preocupa lo mucho que voy a decepcionar a mi padre?, ¡el es capaz de matarme si de entera, Max!, pero estaba dispuesto a arriesgarme, por ti—hizo una pausa para retomar la compostura—. Tú no sabes absolutamente nada, deja de ser tan egoísta. Siempre estás pensando en ti y nada más, todo este tiempo y desde que eras un adolescente has buscado tu propio beneficio —Bradley se veía bastante molesto, movía sus manos con rapidez en la cada palabra que decía.

— ¿Nada más yo? —preguntó sintiendo el enojo invadirle de una forma que nunca antes lo había hecho—. Eres un maldito narcisista que solo busca atención porque no tuvo la suficiente cuando era un niño. Quieres tener todo bajo tu control y cuando no lo haces, te vuelves loco, ¿es por eso que me odiabas?, ¡ahora mírate!, ¡babeas por mi! —se acercó hasta él, sus ojos estaban inyectados de veneno y Bradley sintió un nudo en su estómago y garganta. Mentiría si dice que no sintió algo de miedo.

— Eres un cobarde, Max —le dio la espalda. El azabache sintió su corazón quebrarse cuando notó las lágrimas en sus ojos azules, ya no era el cielo despejado que tanto amaba, ahora era un mar con una tormenta terrible en ellos—. Largo —le ordenó con la voz más fría y sería que logró tener. Ni si quiera volteaba a verlo de frente.

— Brad, lo sient-

— Vete, no te quiero ver —la tranquilidad tan falsa con la que este se lo decía lo hacía sentirse inquieto, pero lo entendió y se marchó.

Ambos se dijeron sus verdades, y Max en el fondo agradeció que no escalara a los golpes porque sus peleas siempre eran demasiado extremas. ¿Por qué ahora se sintió diferente?, se quiso golpear. Era demasiado obvio el porque.

Se sentó en la orilla de la alberca vacía, justo como aquella vez. La anciana llegó soltando un pesado suspiro.

— Sabía que había sido demasiado fácil —dijo.

— Soy un idiota, un idiota inseguro. Él tiene razón…

— Mi niño… —lo abrazó por los hombros, Max no pudo contenerse y rompió en llanto ahí, aferrándose a la anciana de piel suave—. Todos cometemos errores, nadie es perfecto —Max asintió—. ¿Qué es lo que te impide amar?, ¿qué es lo que hace que te detengas? —el azabache pareció analizarlo un momento, pero no dijo nada, la anciana suspiró—. Mira, muchachito… las cosas suceden por algo, y esto no fue coincidencia. Hay algo detrás de ese simple dólar, ¿crees que solo logró cambiarlos de cuerpo por qué si? —Max dirigió su vista hasta ella.

— ¿A qué se refiere? —había controlado su llanto hace unos segundos, pero sus ojos todavía tenían restos de lágrimas en ellos.

El dólar nunca se equivoca —sonrió—. Ese pedazo de papel sólo funciona con personas específicas, tú y él…—tomó la mano enguantada de Max— están destinados a estar juntos —Max no entendía nada—. Lo puedo ver, aquí está —tomó su meñique jugando con este.

— ¿Qué..? —Max creía que se había vuelto loca, estaba por ponerse de pie e irse, pero la curiosidad le ganó.

— ¿Has oído hablar de las almas gemelas? —Max poco a poco entendía—. El hilo rojo en tu meñique, esta atado al suyo.

— ¿Y usted cómo…

— Yo sé cosas, muchachito —le sonrió grande—; ahora, tienes que ir y empezar por eso que te detiene de amar a ese chico. Después, vas a ir con ese niño caprichudo y le pedirás ser su novio —Max asintió, había funcionado, la anciana volvió a subir sus ánimos.

Estaba por salir de ahí después de despedirse, pero en su teléfono una notificación llegó. Era su padre, había vuelto luego de sus largas vacaciones con Silvia. Suspiró.

 Suspiró

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NUEVA HISTORIA MAXLEY, "The way i hate u" disponible en mi perfil mfkskkff

Maldito dólar - Maxley [CONCLUIDA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora