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Nate

El fin de semana se fue rápido tanto que ya estaba de nuevo en la escuela.
Me encontraba en la cafetería con Ryan y los demás chicos.

Como era de esperarse el tema principal era la carrera del sábado.

— Hermano, le diste una paliza — Andrew me dio una palmada en el hombro. 

Él y Ryan son como hermanos para mi, nos conocíamos desde pequeños y siempre habíamos sido muy unidos.

Enseguida de Andrew estaba su novia Priscila la cual era su más reciente conquista. Cuando nos comentó a Ryan y a mí que ya había formalizado con una chica nosotros estallamos de la risa ya que mi amigo no solía salir enserio con ninguna se limitaba a tener chicas de una sola noche, pero debía admitir que la relación con esta chica había durado más de lo esperado.

Ryan llegó con su almuerzo sentándose a mi lado. No había hablado mucho con él, se había encargado de contarme sin nada de detalles como terminó llevando a Grace a su casa.

Un poco interesante, por cierto.

Escuché como Andrew mencionaba algo sobre nuestro proyecto de Estrategia financiera y no pude evitar quejarme al igual que Ryan.

— El idiota de Zack presentó su proyecto antes y tuvimos que escuchar al señor Robbins durante dos horas sobre la responsabilidad y él buen estudiante que es Zack por entregarlo una semana antes — dijo Ryan haciendo que recordara el sermón del maestro. Estaba tan harto y ver la cara arrogante de Zack solo me hizo voltear los ojos.

Aunque no lo negaré, me reí de él junto a los demás chicos por qué mientras él estaba trabajando en su proyecto nosotros nos la pasábamos bien el la carrera y que mejor ganando un millón de dólares.

Tenía el dinero suficiente como para pagarle a un nerd para que hiciera mi trabajo, pero como esto no es una típica película americana tenía la obligación de hacerlo yo mismo y además me gustaba lo que estudiaba aunque a veces eso colisionara con mis otros gustos.

Mi carrera estaba enfocada en los negocios. Algún día yo dirigiría la empresa de mis padres y tenía que prepararme. Me gustaba, me gustaba todo lo relacionado a lo empresarial, los negocios y por supuesto, las negociaciones. El carácter que se necesitaba ya lo tenía solo hacía falta graduarme.

Desvíe mi mirada hacia la mesa donde estaba Serena con sus amigos. Estábamos en mi facultad y era raro que ella estuviese aquí, las pocas veces que la veía era en la otra ala de la universidad.

Al verla con su pareja no pude evitar preguntarme ¿Él sabría dónde estaba Serena el sábado? No lo creo, Zack es tan "apropiado" para esos eventos.

Zack y su familia daban la impresión de ser buenos samaritanos, la típica familia adinerada y sobre todo tradicional. Los había visto en un par de reuniones o cenas de negocios. Daba risa él como Zack Eloy aparentaba ser un pan de Dios cuando su familia estaba cerca, pero en otros lugares era todo lo contrario.

Suponía que su relación con Serena era un plus para aparentar. Salir con la chica más popular que además tiene una familia más adinerada que la suya y por si fuera poco es la heredera de todo.

Reí ante mis pensamientos.

No me interesaba para nada Serena o convivir con ella, se lo ameritaba a que mis padres me lo prohibieran desde que tengo memoria; había tenido suficiente con nuestro encuentro el sábado y la ayudé por... ni siquiera se por que. Nada me costaba dejarla tirada ahí, es más, me hubiese ahorrado una multa, pues cuando la señorita Brooks aún no subía a mi auto los oficiales lograron anotar mis placas.

Noches de inviernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora