~ Dejarlo todo por amor ~ Historia Radiodust

Capitulo 36: Se fue

Una fina lágrima se deslizaba por la mejilla de un chico de pelo negro, el viento golpeaba su rostro mientras miraba al suelo del bote, era increíble, ¿Cómo alguien podía ser tan inhumano con su propio hijo?

Arackniss volteo a ver a su madre, su rostro no reflejaba ninguna emoción, era un rostro vacío, de inmediato el azabache supuso que su madre seguía en shock, había perdido a dos hijos en una sola noche y ahora se encontraban en medio del Océano.

- Estamos cerca de Nueva York...- dijo el ayudante que manejaba el bote.

- Gracias, ¿Sabe si los sobrevivientes estarán ahí? - preguntó Henrion mientras sostenía la mano de su esposa.

- Los salvavidas irán por los sobrevivientes, los llevarán al puerto de Nueva York, los que están en un suceso como el suyo estarán ahí también - explicó el hombre, Henrion asintió y volvió el silencio.

Arackniss miraba atentamente a sus padres, parecía como si no les importara que sus hijos estuvieran muertos, Molly murió, eso era claro, pero aún no se sabía absolutamente nada de Anthony.

- ¿Que se supone que haremos? - preguntó finalmente el azabache, la pareja se miró entre si confundidos, Arackniss suspiró y continuó - Ellos... Talvez están muertos...

- Continuaremos con el plan, tu estarás a cargo de la empresa aquí en Nueva York, tu madre y yo nos encargaremos de Italia, te casarás con alguien de la alta sociedad y nos darás herederos - respondió Henrion con indiferencia, de inmediato Arackniss interrumpió.

- ¡¿Por que mierda actúan como si les importara un carajo la vida de Anthony?! - gritó el azabache perdiendo el control - ¡¿Si quiera les importó que Molly hubiera muerto?!

- ¡No te atrevas a levantarnos la voz! - ordenó Henrion con seriedad - Anthony tuvo un comportamiento infantil, un momento de rebeldía, volverá...

- ¿Y Molly...? - preguntó Arackniss, Clara soltó un ligero sollozó y finalmente habló.

- Habrá un funeral, pediremos que encuentren sus restos de su cuerpo, es lo adecuado...- respondió Clara con seriedad.

Arackniss no dijo nada más, era increíble creer que no les importaba su hijo menor.

- Volverá...- aseguro Henrion, refiriéndose a Anthony - Es un puto cobarde, sin nosotros no es nada...

Arackniss no respondió, se mantuvo mirando al suelo, una parte de el deseaba que eso fuera verdad, deseaba que su hermano volviera al casa, o que al menos algo le dijera que estaba vivo y en buenas manos. La otra parte de el deseaba que Anthony jamas volviera a casa, que si estaba vivo se fuera lejos, que sea feliz lejos de dónde no lo era.

Finalmente había llegado a un puerto, era de noche y el frío era demasiado, los paramédicos los recibieron y después de revisarlos y confirmar que estaban bien los dejaron ir como si no hubiera pasado un carajo.
El camino a su casa era silencioso, nadie sabía que decir, habían sucedido muchas cosas en tan poco tiempo.

Al llegar, Arackniss se dirigió a la casa de la mejor amiga de Anthony antes de entrar a su hogar, no sabía que decir pero quería de vuelta el gato de Anthony.
Tocó la puerta, no había respuesta, finalmente después de unos segundos una chica abrió la puerta.

- ¿Arackniss...? - murmuró la rubia con completa confusión - ¿Que haces aquí? ¿No estaban de viaje? ¿Dónde esta Anthony? - comenzó a preguntar Cherry con preocupación.

Arackniss no respondió, no tenía corazón para hablar acerca de lo sucedido.

- El está en casa, está muy cansado... Por favor deja que descanse el día de hoy y mañana...- respondió el azabache mientras aguantaba el llorar, después suspiró - Necesito a Fatt Nuggets...