Ambos chicos después de charlar un buen rato finalmente se fueron por sus propios caminos, ya era tarde y debían descansar.
En el camino a sus habitaciones ambos pensaban en lo sucedido, se sintió tan especial que deseaban repetirlo una y otra vez hasta que halla un final, cosas que esperaban que jamás pasará, deseaban que jamás hubiera un final, porque esto apenas estaba empezando y se jugaron que duraría toda la vida.
...
....Cuando Anthony llegó a la habitación se encontró con Valentino, sentado en la cabeza de la cama, era extraño porque su mirada reflejaba furia y al mismo tiempo tranquilidad, Anthony trajo en seco y se acercó un poco.
- ¿Que haces aquí? Tu habitación no es está y bien lo sabes - preguntó Anthony mientras se quitaba los guantes y los colocaba en su tocador.
- Quería verte... Pero note que no estabas aquí así que decidí esperar - respondió Valentino, dando señales de que el rubio se acercará, a lo cual el obedeció - ¿Dónde estabas? - preguntó el mayor, cada vez enojando se más.
- No tiene importancia, solo estaba pasando el ra..- quiso terminar de hablar pero fue sujetado con fuerza del brazo por Valentino, acercándolo más a él.
El rubio trato de forcejear y alejarse de Valentino, cosa que fue inútil pues el agarre se hizo mucho más fuerte, acercándolo más y lastimando su brazo, haciendo que el rubio soltará unos quejidos de dolor.
- No puedes mentirme Anthony... Se perfectamente que estuviste con ese hijo de puta de tercera clase - habló Valentino, acercando más el cuerpo del rubio, quien se soltó de golpe, haciéndose para atrás.
- Eres increíble, ¿Tanta es tu locura como para mandar a uno de tus sirvientes a seguirme? - contestó el rubio, dispuesto a salir de la habitación, dió media vuelta y se dirigió a la puerta.
Valentino gruñó y se levantó con rapidez, sostuvo con fuerza un brazo de Anthony, volteando lo y después pegando lo a si mismo. Ese acto tan brusco lastimo al rubio, quien soltó gimoteos de dolor, irritando al mayor, que le soltó una cachetada aún sin soltar su brazo.
- ¿Acaso crees que puedes hablarme así? ¡YO SERÉ TU ESPOSO DENTRO DE DOS PUTAS SEMANAS! - gritó Valentino, tomando con más fuerza el brazo del menor y acercándolo más.
- ¡¡Val me lastimas!! ¡Suéltame! - grito el menor, forcejeando - ¡Porfavor suéltame! - suplico el menor, sintiendo como su muñeca le dolía de una forma muy intensa y su vista se nublaba por las lágrimas que se asomaban.
- ¡ERES MI PUTO PROMETIDO! Vas a hacer todo lo que yo te diga, vas a estar para mí, VAS A SERVIRME, ¿Si? Me vas a obedecer - habló Valentino, mientras sostuvo con fuerza el rostro del rubio y lo azotó contra la cama, quedando con Anthony abajo de el.
Anthony solo cerro sus ojos con fuerza, no quería decir nada, no quería sentir nada, no quería estar ahí, deseaba con todas sus fuerzas volver a los brazos de Alastor, volver a sentir sus labios contra los suyos, y más que nada deseaba volver a sentir el tacto suave y tierno del moreno. Pequeñas lágrimas cayeron de los ojos del rubio, deslizándose por las mejillas rojas de Anthony.
- Si yo digo que vas cojer conmigo hasta que YO me cansé, ¿Tu respondes? - preguntó Valentino, apretando con más fuerza sus agarres en el cuerpo del menor.
- Si Valentino...- respondió el rubio, cerrando con mucha más fuerza sus ojos, forzando se a no llorar más.
- Si yo digo que vas a estar en los eventos conmigo, ¿Tu respondes?
- Si Valentino...- volvió a contestar el rubio, sin poder evitar que unas finas lágrimas salieran de nuevo de sus ojos.
- Entonces... Si yo digo que te vas a alejar de ese imbécil de tercera clase, ¿Tu respondes? - preguntó Valentino, acercando su rostro al rostro del rubio y luego con una mano acariciar la mejilla de Anthony.
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~ Dejarlo todo por amor ~ Historia Radiodust
FanficUn joven de Nueva Orleans decide tener una aventura junto con sus queridos amigos, así que pensó ¿por qué no subir al Titanic? pues, así empezó la aventura de Alastor y sus amigos, nunca pensó que terminaría encontrando al amor de su vida en un barc...