NOVIO POR EQUIVOCACIÓN

NOSOTROS TRES

Dejando a los recién estrenados novios solos con una pequeña que estaba feliz de ver qué iba a pasar todo el día con sus tíos.

- Bueno es hora de irnos - aviso el rubio cuando vio al chófer llegar con el auto.

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Naruto de inmediato se acercó al auto y abrió la puerta trasera invitando a Sasuke a entrar primero, quien no dudo en hacerlo, viendo que su sobrina se subió después y al final el rubio quien se encargó de cerrar la puerta y dar la orden de avanzar.

— Primero pasaremos un rato a la mansión a recoger algunas cosas que necesito, espero no te moleste pequeña — dijo al ver a la menor, pero la pequeña la verdad no dejaba de ver pero el cuello del rubio. —¡Aaahh! — ante el inesperado toque del dedo de la menor en su cuello, Naruto se alejo por inercia y cubrió la zona con su mano.

—¿ También te pican los mosquitos, tío? — pregunto inocente la menor al referirse a las manchas rojas — a mi papá Shisui también le pican mucho los mosquitos en el cuello, pero papá Itachi dice que es porque su sangre es rica, ¿También es rica tu sangre, tío? —. Pregunto ingenuamente la menor.

Naruto no supo que decir ante lo que dijo la pequeña, por lo que miro a Sasuke y pidió su ayuda de manera silenciosa, pero este desvío el rostro y cubrió su boca en un intento de no soltar una carcajada.

— Después de pasar por mi casa, iremos a un acuario, ¿Te gusta la idea? — pregunto de inmediato Naruto en un intento de cambiar de tema, lo bueno es que la menor al ser una niña con una inocencia pura, no le dió mayor importancia a los piquetes que tenía el cuello de su tío, solo asintió a la idea de ir a un lugar lleno de peces de varios colores y tamaños.

— Tu sangre si es rica — murmuró el azabache mientras miraba en la ventana el reflejo del rubio, quien al ir platicando con la pequeña, no escucho lo que su novio dijo.

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Solo bastaron 10 minutos en auto y sin tráfico en la carretera para que llegaran a la mansión Namikaze sin problema.

La menor estaba sorprendida de ver dónde se había detenido el auto, por lo que al bajar Naruto, ella no dudo en hacerlo también.

—¿Aquí es donde vives, tío Naruto? — pregunto con asombro cuando se vio enfrente a esa enorme mansión de color blanco con ventanales de color negro y protección en estás.

— Así es corazón, por ahora la están remodelando, pero una vez esté lista, te invitaré a jugar aquí, ¿Te dices? —. La menor asintió feliz mientras sujetaba la mano del rubio y con Sasuke ya a su lado, los tres caminaron rumbo a la mansión.

Sasuke ya había estado en ese lugar, pero al ver lo hermosa que estaba quedando la remodelacion en el interior,  se volvió asombrar, lo bueno que no era el único ya que su sobrina miraba todo con fascinación.

Para mala suerte de ellos, no pudieron ir a ver la mansión ya que los trabajadores estaban por el lugar, algunos colocando vidrios y otros pintando las paredes.

— Iré a traer unas cosas que necesito, por favor esperen me un momento — pidió Naruto al dejar a los dos azabaches  en la sala y subir por las escaleras con dirección a su cuarto.

Sasuke se sentó en un sofá libre, mientras veía como su sobrina no dejaba de ver todo el lugar, obvio sin moverse de dónde estaba para no estorbar a los trabajadores.

Quienes veían que linda era esa menor y al parecerse tanto al azabache, era obvio que era su hija, la pregunta era si también era de Naruto. Pero no dijeron nada, solo siguieron trabajando.

Sasuke en cambio saco su celular y le tomo una foto a la menor para después mandarse a su padre.

(Crédito al autor)

"Estamos en la casa de Naruto y despues vamos a un acuario".

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"Mi bebé preciosa 😍, la cuidas Sasuke y no dejes de enviarme fotos de mi nena"

Sasuke suspiro levemente y escribió un simple "si" para después guardar su teléfono en el bolsillo de su pantalón.

No había pasado ni media hora y su papá ya sabía que estaría todo el día con su sobrina y Naruto.

— Jodido Itachi, no puedes guardar silencio — murmuro al saber que tendría que andar mandando foto de su pequeña sobrina a su papá y al sentir como su celular vibraba de nuevo, reviró los ojos al saber que seguro era Itachi pidiendo lo mismo que su papá.

— Ya estoy listo, vámonos — Sasuke de inmediato se levantó del sillón y se volteo a ver al rubio, quien tenía puesto una playera naranja de mangas cortas con franjas negras y un pantalón de mezclilla desgastado de color azul marino y botas altas tipo militar.

Sasuke pensó que cuando Naruto se fue a su habitación, se pondría una playera cuello alto para ocultar sus chupetones, vaya sorpresa que se llevó al ver que su dobe no hizo el mínimo esfuerzo en taparlos, algo que lo dejo complacido.

—¿Ya nos vamos? — pregunto la menor cuando su tío llevaba una maleta de una Aza colgando de su hombro.

— Si bebé, vámonos — aviso el rubio al caminar hasta la menor y sujetar su pequeña y tierna mano.

Sasuke al instante captó aquella fragancia cuando se acercó al rubio, una suave pero varonil esencia. Notando que Naruto se había puesto perfume.

Todo siendo visto por los trabajadores del lugar, quienes se miraban unos a otros hasta que un valiente se acercó al rubio.

— No quiero ser metiche ni incomodar joven Naruto, pero me preguntaba ¿La pequeña que es de usted? — quiso saber al notar los grandes y rojillos chupetones que tenía el rubio en el cuello.

Naruto se quedó un poco sorprendido y confundido al no entender porque le preguntaron eso, hasta que bajo la mirada y noto a su pequeña sobrina, por lo que no dudo en sonreír traviesa mente.

—¿Está preciosidad? Es mi hija — soltó sin dudar, mientras jalaba a Sasuke de la mano y lo abrazaba — y esta belleza es el amor de mi vida, la mami —. Con lo dicho, Naruto camino con dirección a la salida con sus dos azabaches, dejando a los trabajadores con la cara llena de sorpresa eh incredulidad ante lo escuchado.
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