XIX. ¿Qué te pasa?

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No estoy enamorado, es todo sin sentimientos...

No estoy enamorado, es todo sin sentimientos...

No estoy enamorado, es todo sin sentimientos...

Martin repetía esas palabras como un mantra, pero cada vez le costaba más convencerse. Caminaba de un lado a otro en su habitación, intentando ahuyentar los sentimientos que lo confundían.

No porque ahora dormían en la misma cama sin haber hecho nada antes, porque se cogian de la mano inconscientemente mientras miraban una película, o por qué se daban besos y palabras de apoyo, no significaba que eran novios.

No porque te dijo mi chico en una oración significaba que te amaba, Juanjo habla así con todos.

El domingo, incapaz de apartar esos pensamientos de su mente, se levantó temprano. Buscó a la pelirroja, que dormía plácidamente, y luego se sumergió en las redes sociales en un intento desesperado por distraerse.

Pero todo empeoró.

Kiki había publicado una avalancha de historias de la noche anterior, y una imagen específica captó su atención y desató una punzada de celos en su pecho. En la foto, Denna y Violeta posaban juntas, radiantes, de fondo a Juanjo que la veía con mucha ilusión.

La siguiente historia mostraba a Denna sobre las piernas de Juanjo, cantando con entusiasmo una canción que solían tararear juntos.

Los celos empezaron a carcomerlo, es que ya ni si quiera podía negarlo, estaba celoso, estaba completamente celoso, esas piernas para sentarse eran de él, y esos ojos solo lo podían mirar a él.

¿Y si Denna realmente había regresado para quedarse? ¿Y si todo lo que había construido con Juanjo estaba en peligro?

El sonido de un mensaje entrante lo sacó de su ensimismamiento. Corrió hacia su teléfono, esperanzado de ver un mensaje de Juanjo que no llegaba. Pero era Kiki quien escribía.

| Marts mis papás han vuelto, ¿puedo quedarme en tu piso unos días?

Kiki... Kiki y Violeta... Violeta la mejor amiga de Denna. La respuesta a sus preguntas acababa de manifestarse.

| Sabes que no tienes que preguntar, vente ya.

—¡Que noche! ¿A qué hora te fuiste? yo me quedé hasta el final, fue wow. —la pelinegra mencionaba mientras se acostaba en la cama junto al del bigotes.

Perfecto, eso le servía —Me fui con Lucas, como a las 3... ¿pero qué tal? cuéntame más...

Kiki lo miró con las cejas alzadas.

Martin negó —Solo paso a dejarme y se fue, más bien tú cuéntame ¿quienes se quedaron?

Necesitaba información, necesitaba saber si continuaba con lo que tenía con el maño o se había terminado por la llegada de su ex novia.

—Bueno pues llegó Violeta, estuve con ella toda la noche, ¿sabías que la mejor amiga de ella es la ex de juanjo? ayer me enteré...

En estos momentos amaba que su mejor amiga no se calle nunca y de detalles que nadie pidió.

—Y cuando Salma se fue, el apartado se quedó prácticamente para nosotros solos...

¿Nosotros quién? ¿Se fueron juntos? ¿Se estuvieron besando toda la noche? ¿Han regresado? Se moría de ganas por hacer todas esas preguntas que no podía.

—Denna es un amor, lástima que Rus y tú no la trataron mucho, es de Granada como Vio...

—¿Ah sí? —fingió una sonrisa de interés —¿Y vino de vacaciones?

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